Capítulo 15

351 47 4
                                    

~•Sustos agradables•~


Narra Mew:

Después de una madrugada placentera y llena de fantasías que lograban hacer a mi amiguito exprimirse una y otra vez, logré dormir demasiado cansado una mañana entera de sueño.

Ya era muy tarde y aún estaba sentado en la barra de la cocina con el desayuno que preparé (porque no era ningún inútil) para Gulf y para mí, sin embargo él seguía totalmente dormido, podía verlo por la pequeña abertura que dejé intencionalmente ayer al semicerrar la puerta.

Él se había arropado con las sábanas grises, eso significaba que había aceptado que estaba en mi cama y solo se había resignado a aceptarlo y dormir lo más cómodo posible con mis suaves sábanas, o talvez ni siquiera sabía en la habitación de quién estaba y había aceptado que podía estar en cualquier lugar menos en su casa.

Lo veía y recordaba que odiaba cuando siempre que sucedía algo con Gulf el fin de semana llegaba, porque quería verlo precisamente al día siguiente, saber cómo está, en sí, había empezado a odiar todos los fines de semana. Pero afortunadamente este sábado, un chico adormilado (parecía que aún un poco borracho) se levantó de MI cama y salió de MI habitación con la misma ropa que había llevado el día anterior.

—¿Aun se te mueve el piso Gulf?

Se acercó más con su camisa revuelta y abierta, era obvio que aún no se había observado a sí mismo, sino no me estaría mostrando la hermosa vista de esos pequeños hematomas rojos causados por mi boca esparcidos sobre su hermosa piel blanca.

—De verdad lo siento señor, no tengo ni siquiera la valentía de alzar mi cabeza...y el piso se está acercando a mí...y...

Me acerqué y lo ayudé a sentarse...en mis piernas, antes de que callera o se mareara más.

—¡¿Qué está haciendo?!— intentó safarce de mi agarre desesperadamente. Al parecer todo se le movía aún, pero su cordura ya estaba intacta. Lo apreté más con mis brazos alrededor de su cintura y su cuerpo entre mí y la barra.

—¿No recuerdas lo que pasó anoche?

Él abrió tanto sus ojos que creí se le podrían salir. Su rostro era un tomate muy rojo, pero muy rojo.

—¿Qué estás pensando?— lo miré extrañado, divertido mientras lo acusaba con mi mirada por sus pensamientos tan extremos— Tu reacción me dice que definitivamente no lo recuerdas.

—Entonces...usted y yo...

—Si piensas que tuvimos sexo no es así, fui hasta lo suficientemente caballeroso para dejarte mi cama y mi habitación mientras yo dormía en una cama que no tenía ni sábanas.

Sí, mi farsa de ser caballeroso se iría a la basura apenas él se viera en un espejo.

—Que alivio— cerró sus ojos y relajó su cuerpo, tanto que hasta pareció olvidar en dónde estaba sentado. Lo importante era que yo no haya profanado su cuerpo.

—¿Tan malo sería?— su reacción había causado una gran inseguridad en mí, sé que no sería lo que él quisiera, ¿pero tan malo sería?

—¿Qué?— él pareció tomar en cuenta mi cambio de humor— Noo...quiero decir, no me gustaría no recordar mi primera vez, aunque obviamente no sería lo ideal...pero sería peor no recordarlo...¿Verdad?

—Si lo piensas así— sonreí pícaramente por su satisfactoria respuesta — significa que o me tienes un poco de estima, o mi cuerpo te tiene realmente loco que no sería malo recordarme sin nada de ropa embistiendo al tuyo en mismas condiciones.

Sálvame (MewGulf)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora