Mi hermana me jalo en dirección a la entrada del orfanato —. Corre.
—¿Cual es la prisa? —me queje.
—Anda ya.
Bufé y la seguí, tocó el timbre del orfanato y una de las monjas nos abrió la puerta.
—Adelante.
Se aparto y un jadeo abandono mi boca al ver el patio.
Donde antes había enredadera de pasto ahora habían lindos rosales. Estaban en tondo el alrededor del patio.
Algunos niños aún plantaban algunas, no pude evitar sonreír cuando ví a Artemis todo lleno de tierra indicandoles como debían hacerlo, está incado y está ayudando a Stephan a cortar algunas ramas.
Usa una playera de tiras color blanco que deja ver sus brazos tonificados y brillantes por una leve capa de sudor, lleva unos vaqueros olgados y desgastados al igual que unos guantes.
Su mirada se cruzo con la mía y me sonrió, se levantó y dejó al pequeño acargo de una monja.
Se detuvo frente a mí, y se limpio las manos con la parte frontal de sus vaqueros.
—Hola.
—Hola.
Me sonrió —. ¿Te gusta?
—Si, es increíble.
Se acercó un poco más, su aroma me desestabilizó un instante, huele a tierra húmeda, a la fragancia de las rosas y a sudor, una mezcla particular.
—Lo siento. —se disculpo —. Espero con esto dejar de ser tan idiota y una bestia.
Le sonreí —. Alguien debe amarte antes de que caiga el último pétalo para que dejes de ser una bestia.
Me sonrió —. Si, debe ser muy difícil conseguir alguien ame a alguien tan bestia como yo.
—Si, definitivamente muy difícil.
—Ujum.
—De verdad lo siento.
—Lo se, alguien no puede vivir con la culpa de hacerle algo malo a esos niños. Son unos ángeles.
—Si, son adorables.
—¿Me perdonas?
Suspiré —. ¡Perdonelo señorita!
Sin darme cuenta, ya estábamos rodeados de los niños.
—Siii, perdonelo. —chillo una pequeña.
Me hicieron ojos de perrito —. Bien.
Artemis me abrazo y chille —. ¡Espera estás sucio y lleno de sudor! —me reí.
Me pegó a su pecho —. Podemos darnos una ducha más tarde.
Me tomo del rostro y unió nuestras bocas.
—¡Iuuuu!
Nos separamos mientras reíamos —. Yo nunca, nunca besaría a una niña.
—¿Que tal a un niño? —le sugerí.
—Nooo. —se enojo e hizo un puchero.
—Yo solo si están bonita como la señorita TN. —Stephan pestañeo tiernamente.
Me reí, me separé de los brazos de Artemis —. Debo dar clase.
—Bien, te veré después.
Nota.
Ya por fin se arreglaron, fueron como tres capítulos no?
Bueno x.
Las leo luego Artemisas.
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Secretos||•Artemis Hidalgo✔️
Fanfikce¿Que pasara cuando Raquel les presente a los Hidalgo a su nueva amiga? CABE ACLARAR QUE ESTA ES UN FANFIC DEL LIBRO DE ARIANA GODOY ESTE FIC ES 100% MIO NO SE PERMITAN COPIAS NI ADAPTACIONES