Narra Lia:
Ya habían pasado unos días desde nuestra salida al centro comercial, y Nick nos invita a la casa Wolfhard a comer, ya que sus padres no están en casa.
-¡¡Liiiiaaaa!! -grita mi hermana desde su habitación.
Gruño desesperadamente mientras me dirijo arrastrando los pies a su cueva, y al abrir la puerta, abro los ojos de par en par.
-Ejem ¿Qué ha pasado aquí?
-No puede ser, es que no encuentro nada para ponerme.-dice rebuscando entre su armario.
-¿Has probado a ponerte unos vaqueros y un top negro básico? -digo burlona.
Ella se gira molesta hacia mí, pero al verme se pone a gritarme de manera agresiva.
-¿Pero se puede saber dónde vas así?
Me miro al espejo más cercano, y no encuentro ningún error en mi ropa.
Llevo como siempre, mis pantalones de chándal, una camiseta de tirantes blanca y mis zapatos del mismo color ya desgastados.Me encojo de hombros sin entender- No sé que tiene de malo lo que llevo.
-Es increíble ¡¿Así es como vas a conquistar al pobre Finn?!
-¡Oh venga ya! Si yo ya he conquistado a Finn, a parte estamos saliendo.
-¿¿QUÉ??
-Sólo estoy bromeando, venga vámonos.
Recojo del suelo lo primero que veo y se lo tiro a la cara.
-En menos de 5 minutos te quiero arreglada. -dicho esto, salgo de su cuarto dando un portazo.
Media hora más tarde nos encontramos en el salón de la casa de mi cuñadito.
-Finn ahora bajará, seguro se está echando su mejor perfume para verte Lia. -dice Nick saliendo de la cocina comiendo unas papitas.
-HAHAHAHAHA- rie abiertamente mi hermana desde el sillón.
Seguidamente le da un beso a Nick.
Yo entorno los ojos, ya no sé si por el comentario o por sus muestras de amor público.-Eso lo hacéis en vuestra habitación Nick, no tenemos porque aguantar...eso. -murmura Finn con una mueca de asco entrando en el salón.- Vamos arriba Lia.
Lo sigo hacía el piso superior, aunque mientras subimos los escalones oímos la voz de Nick.
-Seguro van arriba a besuquearse. ¡¡Por lo menos usad condón!!-grita el hermano de Finn por toda la casa.
- No le hagas caso. -me susurra Finn- Por cierto, te acuerdas del juego del otro día? Aun no lo he probado, te estaba esperando y así jugamos a la consola juntos.
-Mhm ¿Entonces quieres jugar conmigo eh?-digo cerrando la puerta de su habitación.
-Ehm... Claro que sí- dice tímido alejándose de mí.
-Dale Finn, no te pongas así, solo bromeo.- le digo acercándome a él.
-No te preocupes, no pasa nada, de echo vamos a jugar.
Se dispone a abrir la cajita del juego y a pasarme el mando de la consola.
-¿A qué vino la actitud del otro día? -le pregunté dispuesta a averiguar que le pasaba.
-Sólo fue una broma, nada más.-se limitó a responder distraídamente.
Decidí dejar el asunto, y pasamos toda la tarde jugando, hasta que nos aburrimos y Finn decidió ir a la cocina a por algo de comida.
-Fiiiiinn, has tardado siglos, necesito alimentarme.- murmuro al alcanzar un botella de agua.
Él suelta una carcajada mientras se tumba a mi lado.
-Quiero conocerte, juguemos a las 20 preguntas.
-¿Se llamaba así? -pregunta pensativo.
-No importa, venga ¿Quién empieza? -digo mientras doy un sorbo de agua.
-Yo. A ver... ¿Color favorito?- pregunta él.
-Azul marino... ¿Dia o noche?
-Noche ¿Estas preguntas son un poco aburridas no?
-Tienes razón, a ver...¿Primera novia? ¿O novio?- pregunto riendo.
-Nunca he tenido pareja. ¿Tu sí?- pregunta curioso.
-Si, uno a los 14.- respondo cortante.
Él da por sentado que no me apetece hablar del tema, y lo da por zanjado.
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Ricitos de Carbón- Finn Wolfhard-
FanfictionCuando al padre de Lia le proponen un nuevo trabajo, la familia debe abandonar su antigua vida, Lia no se siente del todo emocionada, aun así, su nuevo hogar no está tan mal, conocerá al hermano del novio de su hermana. Y a pesar de su extraña amis...