Arco I.
Vino Escarlata.
Capitulo 12.
[...]
El filo marchito de una traición en el pensamiento aflora con cada beso que es repartido por sus suaves mejillas.
[...]
—¿Te gustaría ir al jardín?—Le cuestionó el mayor, con el brillo de sus ojos intensificándose conforme transcurrían los segundos.Para el omega era cómo ver miles de luceros encerrados en dos pequeños cristales, todo un magnífico espectáculo exclusivo. Y es que así lo era, majestuoso brillo azulado era por y para él.
Embelesado por el brillo de los fanales índigos del alfa, asintió de una manera suave, de tal forma que el tacto entre ambos no se rompiera. En respuesta ante el sí a la petición que él mismo propuso, sonrió, le sonrió de forma elegante, siendo tan brillante.
—Si, me gustaría ir al jardín.— Afirmó, con una de sus manos buscando la de Louis, buscando un poco más de ese precioso tacto que lo hacía temblar, y dejar de razonar.
El hecho de que Harry tomará la iniciativa lo desconcertó hasta cierto grado, no obstante le resultó bastante agradable. La mano del menor tanteó la distancia que había entre la suya y la de Louis, palmeando la cama con sutileza, un par de veces bastaron para que el alfa fuera quién colocará su mano encima de la de él.
Tanto él, cómo su omega, ronronearon melodiosos. La mano un poco áspera del alfa descansaba sobre la suya, provocando que sonriera de una manera abierta, iluminando su rostro del tal forma que luciera más feliz, extasiado por las miles de emociones que lo embriagaban de la mejor manera.
Su cuerpo temblaba bajó el mínimo tacto del hombre, era una esa de las reacciones que su cuerpo le daba ante la pronta cercanía de la piel cálida ajena. Los latidos del rizado eran fuertes, rápidos, tanto que lo mareaba y lo llenaba de cierta adrenalina que había desconocido por completo. Su corazón parecía estar demasiado acelerado por la cercanía de Louis, sentimiento que parecía ser mutuo.
Louis, alejó su mano del rizado, no sin antes volverle a sonreír de aquella manera que lo hacía sonreír de sobre manera, de una manera que sólo Louis podía hacerlo.
—Tienes que tomarte estás pastillas si deseas que esa jaqueca no se intensifique.
—¿Más?—Preguntó incrédulo, abriendo de su boca para formar una adorable "o" con sus labios ya no tan rosas.
Los labios de Harry solían tener un color rosa, bastante brillante y deseable, algunas veces el color era rojo, debido a que los mordía en demencia al sentirse nervioso, resultando cómo el color que tenía la sandía al estar en su punto, rojos, jugosos, carnosos, y sobre todos tan apetitosos. Sin embargó este no era el caso, eran blanquecimientos, estaban rotos y bastante maltratados, todos debido a la resequedad sobre la piel de este, y la deshidratación que había provocado el ingerir cantidades inmensurables de alcohol la noche anterior.
El mayor emitió una risa desde lo profundo de su pecho, captando la atención de quién tomaba de las pastillas con bastante cuidado de no vomitarse. Acción que le estaba costando mucho, por el simple hecho que con el simple tacto del aguas lograba sentir las arqueadas, sin omitir el agrío y repulsivo sabor de sus jugos gástricos haciendo un vaivén doloroso sobre su garganta. Todo esto causaba que en su rostro se dibujarán muecas agrías, con sus labios siendo surcados conforme bebía un poco de agua, mientras que sus cejas formaban arrugas entre ellas, debido a que las fruncía involuntariamente.

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Vino Escarlata
FanficHarry Styles, omega, príncipe de las tinieblas. Louis Tomlinson, alfa, rey del fuego y el renacer. Un omega y un alfa en busca del más precioso imperio. 🥀🥀🥀 La muerte del jefe, la nota roja de los periódicos, la oportunidad de oro para las famili...