0.49

135 17 7
                                    

Nessmara


Son las seis de la mañana cuando escucho el primer chillido, de forma pesada me levanto con cuidado de no pisar a Calum quien está profundamente dormido y levanto a Eleanor quien está llorando.

Me siento sobre la mecedora mientras le doy su biberón, casi quedándome dormida y solo escuchando el sonido de su boquita chupando la boquilla del biberón.

Después de un rato, Eleanni sigue a su hermana y comienza a llorar desesperadamente, esta vez si veo a Calum despertarse alerta y se levanta como rayo.

—Hey, tranquilo—.Me río un poco.

—¿Te puedo ayudar?—.El pregunta somnoliento y yo asiento.

—Si, mira, sigue meciendo a Eleanor en lo que yo atiendo a Eleanni—.Intento levantarme y el me detiene.

—No no no, yo atenderé a Eleanni, solo dime que hacer.

Calum se gira hacia la cuna de Eleanni y lo veo levantarla con sumo cuidado.

—El biberón está listo en este pequeño calentador—.Le señaló la pequeña máquina y el la abre sacando un biberón.

Calum actúa tan natural que hasta puedo jurar que el el que me ha estado ayudando todos estos meses ha sido él.

Después de unos minutos ambos estamos meciendo a las bebes y aunque los dos estamos sonriendo, no decimos nada.

—Jamás creí que estaría a las 6 de la mañana meciendo y alimentando a un bebé—.Calum menciona después de un rato y echa su cabeza para atrás entrecerrando sus ojos.

—¿Y qué tal?—.Es lo único que pregunto.

—Es una experiencia agradable.—Una sonrisa se asoma en su rostro.

Las niñas se quedan dormidos y ambos las recostamos sobre sus respectivas cunas.

—¿Tienes sueño?—.Pregunto mientras vuelvo a tomar asiento sobre la mecedora.

—No, no puedo desperdiciar mi tiempo durmiendo.

—¿A qué te refieres?—.Pregunto un poco confusa.

Él me mira como si fuera obvio.

—Vamos, tú eres muy inteligente—.Contesta y yo ruedo mis ojos a lo que el suelta una carcajada.—¿Por qué dormiría cuando podría estar disfrutando de estos momentos con ustedes?

Su pregunta hace que mi corazón se acelere pero por favor, no debía caer aunque tuviera al mismísimo Calum Thomas Hood diciéndome esas palabras. Desvío mi mirada porque no puedo sostener la intensidad con la que me miran sus ojos.

A mi mente viene Camile y el hecho de que él me dejo por mucho tiempo, no importándole el que le haya dicho que yo estaba embarazada.

—¿Por qué me dices eso, Calum?—.Pregunto en un tono serio y no puedo evitarlo.

—Porque vine a responderte todo lo que me quieras preguntar y arreglar todo lo que me permitas arreglar—.Responde.

Lo volteo a ver y sigue viéndome fijamente.

—Ya es muy tarde para arreglar algo—.Las palabras dolidas salen antes de que yo misma las analice.

Veo las facciones de Calum después de decir eso, la sonrisa que tenía se desvanece y tuerce sus labios en una mueca.

—Yo no creo eso, hice las cosas mal, lo sé, debí venir y explicarte todo desde aquella tarde que Camile me beso y tu lo viste, se que no debí dejar pasar el tiempo, no debí desconfiar de ti, pero por favor dame la oportunidad—.Su voz volviéndose más débil y apagada con cada palabra que dice.

Nessmara | Calum HoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora