Secreto (Sterek)

46.

46.

-Lo rastreamos hasta Londres. – Revelo Lydia mirando fijamente a Derek. – El número no parece pertenecer a alguien.

-Llamare a Cora para que se acerque a la ubicación. – Hablo Derek dejando la habitación.

-Mi manada también pude ayudar, ellos son más y están situados en el país. – Hablo Newt con decisión.

-Si, Necesitamos de todas las personas posibles. – Hablo el Alpha con seriedad.- Yo llamare para tomar el vuelo más pronto.

Todos en la manada se fueron preparando para el viaje que se les aproximaba, así como también prepararse para aceptar la condición con la que encontrarían a Stiles, aunque esperaban que este estuviese bien.

(...)

Su dolor de cabeza había regresado y había dormido muy poco por estar velando el sueño de Peter. El lobo había convulsionado dos veces, también había tenido fiebre y ahora divagaba contando historias fuera de lugar.

-A ella le molestaba cuando Thalía se escapaba de casa.- Balbuceó con una sonrisa boba. – A papá no le agradaba ese tipo, de todas formas, era parte de otra manada, y papá no quería que ella terminara siendo la mujer de otro Alpha creía que le había enseñado tan bien que le parecía un desperdicio.

-¿Tu familia era muy unida? – Había descubierto que mantener a Peter hablando ayudaba a que este no sufriera de otra convulsión.

-A pesar de las peleas de Papá y David, todos nos centrábamos en pasar tiempos juntos. – Revelo con nostalgia. – David me entreno para mi primera pelea, también apoyaba a Thalía con su relación. – Se encogió de hombros mientras sonreía. – De todas formas, Papá acepto la relación cuando Derek nació, creo que su parecido con David fue lo que ayudo.

-¿Quién es David? – Se atrevió a preguntar.

-Mi hermano mayor. – Explico con una sonrisa.- Fue el único de nosotros que heredó los ojos verdes, claro que, Derek también lo hizo también. Creo que si ambos se hubiesen conocido hubiesen sido muy cercanos. Él hubiese sido un excelente Tío.

Stiles no pudo preguntar más ya que una estridente voz les interrumpió.

-¡Despierten holgazanes! – Grito el hombre habitual mientras hacía ruido con las rejas. – Síganme. – Ordeno después de abrir la reja.

Stiles ayudo a Peter a ponerse de pie, también le permitió usar su propio cuerpo como soporte para poder caminar. Llegaron a otra habitación obscura, fueron separados por otros dos tipos enormes, Stiles fue amarrado en una silla mientras que Peter permaneció estático en un rincón. Estaba delirando de nuevo y apenas podía levantar la cabeza.

-¡Ustedes dos se ven muy bien! – Hablo un hombre mientras se acercaba a Peter. – Lobito, no te ves muy bien ¿Mis chicos fueron muy grotescos? – Tomo al lobo por las mejillas.

-¡Déjalo! – Grito Stiles con fuerza. – Esta lastimado, lo que buscas, encuéntralo en mí.

-El chico que corre con lobos. – Pronuncio cambiando su atención en Stiles. – Siempre te metes donde no te llaman ¿Verdad? – La burla seguía aferrada a su tono. – De todas formas, no necesito nada de ti, es este lobito que tiene que escupir la sopa. – Su mirada se volvió a centrar en Peter. - ¿Hablaras?

-Depende de que preguntes. – Le contesto con una sonrisa. – Y, además, no puedo prestarte dinero.

La sonrisa del hombre se agrando y con fuerza estrello su puño en la mandíbula del lobo.

-¿Te crees gracioso? – Levanto al pobre hombre desde el cuello de la camiseta. - ¿¡ENTIENDES QUE PUEDO REVENTAR TU CABEZA EN CUALQUIER MOMENTO!?

Peter estallo en carcajadas ante lo dicho por el otro.