¿Sin suerte?

29

Tengo varías razones para querer matar al desgraciado de mi padre y no me importa decir que es un desgraciado porque por su culpa nos mudamos.  ¡Nos mudaremos mañana maldita sea!  Todo esta arreglado y no hay nada que se puede hacer.  Nuestras cosas han sido enviadas en grandes camiones hasta Texas y nosotros nos largaremos mañana en avión. 

Todavía estoy en shock.  Ahora después de tantos años vienen con ésta mierda de mudarnos.  Estoy que nadie me aguanta y me molesta tener que ver a mi madre cantando y bailando por todos los rincones llena de felicidad.

¿Qué no ven que me estoy muriendo?  Estoy que agonizo el tan solo pensar que mañana dejaré mi hogar, mi casita y mi vida, me pone llorona. 

Lucas también ésta triste me lo demuestran sus ojos.  Cuando ésta conmigo sus me ven con tristeza y me dan ganas de llorar.  Él solo me abraza, me besa e intenta hacerme reír con bromas tontas y pellizcos.  Lo voy a extrañar mucho. 

— Recuerdame otra vez porque no puedo explotar las cuatro gomas del auto de tu padre — dijo Laura cruzandose de brazos con los ojos cristalizados.

Bufe—. Porque como quiera utilizaríamos el otro auto para llegar al bendito aeropuerto — dije sin mucho interés.

Estaba triste mirando la habitación de mi amiga por última vez y eso me llenaba de melancolía.

— Si tu te vas, ¿Quién me recordará de la clave de mi casillero? — Se quejo tirando la almohada en el suelo.

Oh por favor,  ¿Es enserio? 

— Laura la clave es la fecha de cumpleaños — respondí con ganas de tatuarle la cara con una buena bofetada. 

Ella se quedo pensativa unos segundos hasta que después solto un largo, ohh.

Laura se levanto de la cama y busco algo en una de las gavetas de su fea mesita de noche.   De solo saco un envoltorio plateado y quise matarla.

¡Un condón! 

— Tomalo por si hoy te acuestas con Lucas. — Me dio el maldito condón y yo la miré como si estuviera loca.

— No me acostare con él.   Solo iremos a la playa para pasar nuestro último día juntos.  ¿estarás demente?

— No importa solo guardalo por si algún día lo necesitas — susurro comenzando a llorar.

Hay bendito...me quiere joder.

— No llores Laura.  Seguiremos siendo las mejores amigas.  Te llamare todos los días,  hablaremos por texto, por skype y te enviare muchas fotos del lugar donde viviré.   Para cuando llegue el verano te quedas conmigo — dije abrazandola con fuerza y la morena gimoteo mientras lloraba—. Todavía puedo raptarte — murmuro y yo negue con la cabeza.

Todos estos días ella había maquineado muchas opciones para que yo no me fuera y algunas eran descabelladas.

Le diremos a tu padre que E.T te secuestro.

Te raptamos sin pedir recompensa.

Le decimos que eres alérgica al clima de Texas. 

Te raptamos.

Le décimos que te ahogaste en el acantilado.

Te raptamos otra vez. 

— No se puede hacer nada.  Te quiero mucho Laura y siempre serás mi amiga.

Nos abrazamos una vez más y bajamos las escaleras para ir afuera.  Lucas debería estar en camino.  Estaba deseosa de verlo para besarlo porque esté seria el último.