Capítulo 34

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Por fin llego el fin de semana, Uraraka noto que sus dos mejores amigos estaba raro, no es que Denki fuera normal pero la chispa que tenía todos los días ya no se veía en sus ojos y ni hablar de la alegre sonrisa en la cara del pecoso esa había desapareció por completo, cuando les pregunto cuál el motivo de su cambió, ninguno le dio una razón lógica para tremenda aura que se cargaba.


La castaña llego por el Kaminari, quedaron de que se verían en su casa, donde se prepararían para asistir al nuevo bar, el omega pelirrubio, saco varias prendas, pero no se sentía conforme con ninguna, al final una playera negra con unos jeens pegados fue su elección, unos botines y algunos accesorios fue lo que usaría con un chaqueta dándole el toque final, la omega se cambió en el cuarto de Denki un corto vestido con un saco las zapatillas combinadas, el pelo suelto no ocupaba mucha ayuda tenía un cuerpo bien proporcionados se veía atractiva con cualquier cosa, de esa forma se fuera a su destino planeado.


Al llegar fueron bien recibidos, ya tenía una mesa que la omega había reservado con anticipación con una buena ubicación, como le dijo al omega pelirrubio estaba lleno, la música era buena, muchos asistieron al ser fin de semana, los alfas se podían distinguir por todo el lugar, más de algunos les dedicaron unas miradas al entrar.


-¿Que tal te parece Denki?- pregunto la omega entusiasmada.


-Está muy bien, me gusta- respondió el chico, este lugar era su lugar, era feliz al llegar a un sitio de este tipo, pero esta vez no sentía la emoción tan típica que tenía cada vez que llegaba, se sentía un bicho raro, quizás después de un par de tragos todo sería como antes, el alfa que le guiño el ojo al entrar no estaba nada mal, solo que era temprano para pensar en eso ya habría tiempo.


El mesero llego, todavía no pedía nada, pero unos chicos les mandaron las primeras bebidas, agradecieron con una picara sonrisa a la mesa donde estos estaban -Creo que esta noche está empezando bien, te extrañaba no es lo mismo sin ti- la castaña tomo un pequeño sordo con la pajilla.


-Yo también extraño esto, portarme bien no es lo mío, siento que fueron años privándome de todo esto, lo bueno que ya se terminó, jamás volveré a hacer algo así- Denki miraba hasta donde se encontraba un chico que llamo su atención desde un principio, el tipo lo miraba fijamente.


-¿Que paso? - El rubio todavía no les decía que ya había terminado con el alfa pelirrojo -Ya veo porque tengo días que no lo veo ir por ti- la ausencia del alfa ahora tenía sentido -Como fue cuéntame todo-.


Kaminaria tomo de un trago todo el contenido de su copa -Solo terminamos y ya... fue fácil, ya no importa, lo que importa es que vuelvo al mercado y que ya no volveré a ver su cara ni a escuchar sus cursilerías- El rubio tomo a la castaña de la mano -Vamos, esa canción se escucha bien- Uraraka no se hizo de rogar y lo siguió a la pista.


Los omegas, bailaron tanto, tomando copa tras copa, ambos mostraban una cara extasiada de felicidad, unos chicos se acercaron a bailar fueron bien recibidos entre la multitud era difícil estar separados aprovechaba para toca un poco los cuerpos de los omegas lo cuales no ponían resistencia, Denki volvía a sus jugadas, esta era lo que le gustaba ser, su versión favorita sin duda era esa.

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