NUESTRO DESTINO

Capítulo 23

Izuku se encontraba tumbado en la cama con el peso del rubio encima de él, cerro sus ojos dejándose llevar por el momento, de repente sintió calidez en su labios un beso comenzaba era la primera vez que sentía el deseo de entregarse por completo, sabía que no eran los efecto de un celo pues aún falta casi un mes para que llegara, si no era la necesidad de ser uno con su destinado lo que lo tenía tan mal, el sabor de sus labios era el paraíso, al sentir las manos del contrario recorriendo su espalda un cosquilleo recorría su columna, sabía que su entrada ya estaba húmeda pues comenzaban a escurrir un poco por sus piernas, cada cosa que hacía el alfa le resultaba demasiado excitante como sus manos navegaban por su cuerpo.

Ambos seguían vestidos, pero eso no dudaría mucho, después de un largo beso donde las caricias y abrazos no se hicieron espera Katsuki paro la arrebata situación, Izuku creyó que había hecho algo mal no sabía el motivo por el cual el alfa se separó -Eres tan perfecto- le susurró al oído – te quiero comer mi pequeño conejito- el lobo encontró su presa esa noche sería un conejo negro.

Midoriya respiraba agitado por las caricias de Bakugo – No sé qué me pasa- su cuerpo era una fogata el calor lo envolvía por completo -me siento muy caliente- literal estaba subiendo su temperatura corporal.

- No te preocupes yo me encargó de eso- comenzó a desnudar a Izuku primero su camisa blanca después el short debajo de él no traía nada más fue fácil quitarle todo el omega fue muy cooperativo en todo momento – te voy a quitar esto también- sus manos se encontraban en el rostro del pecoso queriendo quitarle su máscara.

-No- Izuku se hizo hacia atrás evitando eso – ¿Te puedo hacer una pregunta? - ya estaba desnudo tenía pena ver como lo observaba con lujuria el alfa se sentía agobiado.

-Sí lo puedes mi conejito – el cuerpo adornado de pecas era maravilloso, no podía apartar la mirada que recorría de arriba abajo el alfa.

- Sí hoy lo hacemos... ¿Lo volveremos a hacer otra vez? - Izuku también había escuchado ese rumor que el alfa jamás repetía sus encuentros.

El rubio nunca espero una pregunta así – No lo sé, lo más seguro es que todo quede en esta noche- no podía mentirle con algo que sabía bien que no se repetiría.

- Si ese es el caso, por mi está bien que solo sea esta vez, yo no te molestaré...- el peliverde pensaba cada palabra que le diría -pero si no me piensas ver de nuevo, no le veo el caso de que quieras ver mi rostro si no me volverás a buscar- Izuku no por nada era él número uno era un chico muy inteligente todo un futuro abogado.

- Tienes razón- le hubiera gustado ver su rostro descubierto, pero se conformaría con todo lo demás que era una vista hermosa su cuerpo estaba marcado, pero no demasiado solo lo suficiente para hacerlo lucir muy lindo – esta noche serás mi chico misterioso, porque no creo que me digas tu nombre ¿verdad? -.

Izuku negó con la cabeza - ¿Estas bien con eso? - lo miro directamente a los ojos rubís.

Que más podía hacer, él aceptaría todo lo que el chico quisiera, pues su miembro ya le estaba apretando demasiado debajo de su pantalón, mientras el acto se consumara la máscara era lo de menos, si eso hacía sentir mejor al omega que se miraba algo preocupado, quizás si no hubiera tomado sus supresores el cuarto estaría lleno de olores, pero el único que desprendía su esencia era el alfa ese lugar era embriagante para Izuku eso era lo que más lo enloquecía y se podía notar como respiraba hondo -Por mi está bien, esa es tu decisión pequeño- le acaricio la mejilla despacio hasta bajar a su cuello donde se encontró con su collar, era raro muchos omegas era lo primero que se quitaban cuando tenían algún encuentro con el alfa con la idea que a la hora del sexo Katsuki los llegara a marcar cosa que nunca sucedía y ahora tenia a un chico frente a él con su collar demostrando que no le interesaba ser de su propiedad, solo quería una noche casual con Bakugo de cierta forma eso le daba en el orgullo pues ahora los papeles se voltearon y muy en su interior la idea de marcarlo se hacía presente -Bueno conejito creo que ya fue mucha platica en que nos quedamos- se quiso para despojarse de sus prendas pero Midoriya lo tomo de las manos impidiendo que lo hiciera Bakugo se sorprendió un poco pensó que el pecoso quizás ya se estaba arrepintiendo de hacerlo.