Llegué a mi casa y en cuanto abrí la puerta Jacob y mi madre me miraron extrañados, alcé los hombros y entonces recordé por qué: Aún quedaban tres horas para la verdadera salida del instituto.
---Me encuentro mal -me excusé rápidamente cuando mi madre cruzó los brazos- me duele la cabeza y el estómago. Yo no faltaría a clase así porque sí, ya lo sabes mamá –Ella se quedó pensando pero después rodó los ojos y asintió.
Subí las escaleras y me tumbé en mi cama, dejé el móvil a un lado y me acomodé para dormirme. Me encontraba bien pero estaba muy cansada, así que aproveché para dormir.
***
---¡Janeth! ¡Última vez que te llamo para comer! -odiaba con todo mi ser que me despertaran mientras dormía, pero más odiaba cuando me llamaban por mi nombre completo, ¡Era espantoso!
Yo misma fui la que empezó a decirle a todo el mundo que me llamasen "Jane", me gustaba mucho más y así es como me llamaba Liam.
Bajé las escaleras corriendo para que mi madre no me llamase más veces, me encontré con Darik hablando con Jacob. ¿Cómo? ¿Estaba viendo bien?<<Esto no era real>>
---¿Q-Qué haces aquí? -dije llevando mi mirada hacia Rikson, cada día entendía menos lo que pasaba por su cabeza
---Nada, he venido a verte -añadió una sonrisa- Lyn me avisó de que te fuiste a casa porque te encontrabas mal... ¿Estás mejor, amor? -¿Cómo? Creo que perdí la vista y el oído ese día. ¿Me dijo amor? ¿Delante de Jacob y mi madre? ¡¡¡ME DIJO AMOR!!! Hoy me iba a dar un infarto definitivamente.
---S-sí, estoy m-mejor, gracias... -se notaba mucho que estaba nerviosa pero la respiración se me iba cortando por momentos gracias a este señor que tenía enfrente, el cual me miraba de arriba abajo riéndose, ¡Mierda! Iba con un moño mal hecho, seguramente la cara de dormida y un pijama de dibujos para niños de 3 años. Muy bien, Jane, tú siendo tú siempre
---Me alegro, Jane.
---Quédate a comer, hijo -le dijo mi madre dejando los platos sobre la mesa, él asintió y se sentó en una de la sillas, yo rodé los ojos y me dejaron un sitio libre a su lado.
---Entonces... ¿Este es tu novio? -preguntó Noah después de sentarnos todos en la mesa y empezar a comer. Mi intención era decirle que no, ya que no lo éramos, o eso pensaba yo antes de que Darik me interrumpiera y le contestara él:
---Sí, soy su novio. Aunque todavía nos estamos conociendo, pero, siendo honestos, estoy bastante interesado en tu hija -dijo esta vez dirigiendo su mirada hacia mi madre- Soy buen chico, no la dañaré, pueden confiar en mí ---mi madre asintió y para finalizar la conversación dijo que con cuidado y amor todo dura. Sí, mi madre a veces solía ponerse filosófica.
Terminamos de comer todos, y Darik y yo nos fuimos a la cocina para recoger la mesa:
---¡¿¿¡¡Se puede saber qué haces?!!?!! En ningún momento hemos dicho que seamos novios, o por lo menos no me lo has dicho a mí
---Ah, ¿No? ¿Y el beso que me distes esta mañana? ¿Eso no significa nada para ti?
---Pues... Sí, pero no nos conocemos casi, antes de salir con alguien me gustaría saber si nos complementamos personalmente... -él asintió, aunque creo que no me estaba escuchando porque estaba atontado mirándome los labios, pasándose la lengua por los suyos y acercándose peligrosamente a mí- No, aquí no, nos pueden ver... -comenté susurrándole, cogiendo su mano y guiándole hacia mi habitación.
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Nueva vida
RomanceAdmito que nunca quise vivir en Nueva York, que yo amaba California, que jamás quise estar allí, pero ahora que sé quién está en esta ciudad... No quiero irme jamás. Porque él me ha sacado de algo que nadie en todo este tiempo ha podido. 𝖈 𝖍 𝖆 𝖔...