𝙶𝙸𝚁𝙻 𝙰𝙻𝙼𝙸𝙶𝙷𝚃𝚈 || 𝒄𝒉𝒓𝒊𝒔 𝒆𝒗𝒂𝒏𝒔

33

CHAPTER THIRTY-THREE

Downey me abrió después de tocar el timbre, solo había venido para cumplir con Robert y para que Brooke no se enoje conmigo.

Dios, la extrañaba tanto.

—¡Chris, hola, hermano!— nos saludamos con un abrazo y me dio paso a su casa.

Casi todos mis compañeros de elenco se encontraban aquí, los fui saludando uno a uno.

—¿Como has estado, Chris?— preguntó Renner mientras me pasaba una cerveza.

—Todo bien, grabando una nueva película.

—¿Y Brooklyn?— sonreí de lado.

—Por Inglaterra, recién llegará mañana— él asintió con una sonrisa.

—¿Ya son pareja?— asentí— Me alegro por ustedes dos, son tal para cual.

—Gracias, Jeremy.

—¡Señoras y señores!— entró Robert a la sala donde estábamos todos— ¡Que la fiesta comi...— el ruido del timbre lo interrumpió— ¿Es una broma? Debe ser el niño.

Todos reímos al verlo ir hacia la puerta corriendo.

—¡Ahora sí llegó el último invitado!— volvió junto a nosotros y detrás de él apareció Tom— ¡Que empiece la fiesta!

Me pasé la mayoría del tiempo hablando con casi todos mis compañeros y bebiendo cerveza, bueno, no tanto porque tengo que conducir.

En este momento me encontraba hablando con Stan, Mackie y Rudd.

—¿Qué tal todo con Brooke, Chris?— me preguntó Mackie y luego se rieron, de seguro por la cara de tonto enamorado que pongo cada vez que la mencionan.

—Todo va bien, ella es una chica genial. Me alegra tanto tenerla en mi vida— ellos sonrieron.

—Vas hacerme arruinar mi maquillaje si sigues hablando así de mi— ella entró al grupo poniéndose entre Paul y Sebastian.

Sonreí de lado, luego abrí mis ojos y salté de mi lugar, provocando las risas de algunos.

¡Era Brooke!

Vestía una campera de jean, debajo un top rojo y una falda blanca pegada al cuerpo. Ay, solo diosito sabe como me estoy controlando.

¿De verdad ya estaba aquí?

Su cabello... ¡Su cabello ahora es negro!

¡Le queda tan bien!

—¡Sorpresa!— dijo divertida y no esperé un segundo para envolverla en un abrazo.

—Quítese a la verga— empujé a Stan que la abrazaba por los hombros.

Todos rieron.

—¡Evans la vas afisxiar!

—¿Cuando llegaste, Brooke?— pregunté mientras la besaba en la mejilla.

—Hace una hora, sólo esperé un poco para venir. Vine en el mismo vuelo que Tom— explicó y la abracé nuevamente.

—¡Ah, Brooke! Te teñiste el cabello— exclamó Sebastian.

—Sí, quería probar el negro desde hace mucho tiempo. Chris, no puedo respirar— dijo con dificultad y muy a mi pesar, la solté.