•Monstruo•

XXXVI

Frey Stein

Mire a la chica que llacia acostada a mi lado, fruncí levemente el ceño al no entender del todo que era lo que sentía por ella, pero algo tenía en claro y nunca cambiaría.

Ella era mía.

Cada parte de ella me pertenecía, sus labios, su cuerpo, su cara, todo.

Me pregunto muchas veces ¿Cómo pude llamar su atención? Ella es diferente a mi, pero como dice heist.

Los polos diferentes se atraen.

Mi mano fue a su cabello y lo acaricie, sentía algo extraño hacia ella, algo mas fuerte que el amor seguramente, no quería despertarla pero debíamos salir antes que mi hermano hiciera todo el plancito que le tiene a leigh.

-porque me miras tanto?- pregunto en voz baja mientras abría sus ojitos..

-no quería despertarte- baje mi mano a su mejilla y la acaricie- pero debemos salir

ella no protesto, solamente asintió y se levanto de mi pecho, puso sus pies fuera de la cama y se levanto pero se tambaleo un poco pude ver su cara de dolor e incomodidad y sonreí de lado, ella se volvió a sentar soltando una maldición y me miro.

-no puedo caminar- dijo mirándome mientras entrecerraba los ojos.

-es tu culpa- me encoji de hombros mientras ponía mis manos detrás de mi cabeza y ella me dio un golpe.

-frey! - protesto

la ignore ella se subió a la cama y se acostó arriba de mi mientras recostaba su cabeza a mi pecho.

-amor- susurro

-si?

-me llevas a mi cuarto?-sonreí y la deje a un lado de la cama para levantarme, fui a mi armario y saque lo que me pondría, ella miraba cada uno de mis movimientos atenta con el ceño ligeramente fruncido, al escoger un oufit bonito y elegante camine hacia ella con mi ropa en la mano, se la di y ella la tomo.

luego me acerque un poco a ella y la cargue como princesa ella paso sus brazos por alrededor de mi cuello y dejo un beso en mi cuello al separarse pude ver su gran sonrisa ella acaricio mi cuello.

-que?

-eres mío frey stein- dijo mientras yo comenzaba a caminar a la puerta.

-si soy tuyo, al igual que tu eres mía señorita stein- sonrió.

-stein?- pregunto.

-serás mi esposa en un futuro cercano- hable mientras entrabamos a su cuarto- que me detiene en decirte señorita stein.

la acosté en la cama y ella me beso.

-porque me dejas en la cama?- fruncio el ceño

muchas ideas de adolecente hormonal cruzaron por mi mente, todas las formas en la que podia hacerla mia de nuevo, recorde sus gemidos, recorde todo lo de hace rato haciendo que comenzara a ponerme duro ella golpeo mi muslo sacándome de mis pervertidos pensamientos y la mire con reproche.

-no volveremos a tener sexo!- me dijo cruzándose los brazos.

-yo nunca...

- deja de pensar con el pene frey- la mire mal y ella señalo el bulto que se notaba en mis pantalones..

pude sentir mis mejillas arder y mire a un lado, entonces sentí como metio sus manos en mis pantalones y lo saco ahogue un gemido y la mire rápidamente.

-que ases?- pregunte con dificultad.

verla desde aquí arriba y recordar todo lo que esa boquita sabia hacer, Ademas lo estaba agarrando como si fuera un juguete.