•Monstruo•

VIII

"cazar a mis presas lo hace mas divertido"

Nyx Fleming

heist me miraba fijamente esperando a que hablara, podía ver en su cara que se estaba frustrando por hacerlo esperar mientras yo mantenía mis ojos en el conejo con el que estaba jugando pensando como decirle porque me mandaron al internado de una manera sutil y sin tanto detalle, comencé a hacer cortes en el conejo, cuando sentí que me arrebataron el conejo y mi daga de las manos, mire a heist enojada y el me miraba serio, me abalance a el tratando de quitarle mis juguetes pero el me esquivo y caí al pasto.

-dámelos heist- hable amenazadoramente.

-no- hablo sonriendo burlón y se levanto de suelo

-juro que si no me los das...- no me dejo terminar mi oración

-que harás- pregunto jugando con mi daga y yo me levante.

la diferencia entre ambos era notable, muy notable el me sacaba como dos cabezas y yo debía alzar un poco mi cabeza para mirar sus ojos.

-oh no querrás saberlo- una sonrisa torcida apareció en mi rostros- pero son cosas muy dolorosas.

-a si?- susurro acercándose  a mi mientras se inclinaba a mi altura sintiendo su cálida respiración chocar con mis labios

aprovechando la postura en la que estamos me abalance  enrollando mis brazos en su cintura para tarándolo al suelo, ambos dimos un par de vueltas cayendo por una pequeña colina y gracias al altísimo  

acabo de decir "gracias al altísimo"

si*

quede sentada a horcadas sobre el y estire mis manos tratando de tomar mis cosas pero el estiro ambos brazos hacia arriba y bufe frustrada, me estire hacia arriba pero no alcanzaba, a causa de que sus brazos eran largos y los míos no, me moví sentándome mas arriba justo en sus caderas y volví a estirar los brazos escuche un murmullo que dijo en alemán y lo mire raro.

-que?!- pregunte aun tratando de tomar mi daga y mi conejo.

-bonitas tetas- hablo burlón

me senté de golpe al darme cuenta que al estar estirada mis senos llegaban a la altura de su cara y el rio burlonamente, yo sonreí de lado y el frunció el ceño, entonces tome una daga que llacia en mi bota y la enterré en su muslo.

-MALDITA LOCA!- grito y yo sonreí.

aprovechando su situación tome mis juguetes y comencé a jugar con ellos aun sentada arriba de el, mire su cara y vi una expresión de dolor mi sonrisa se ensancho y sentí ambas de sus manos en mis muslos apretándolos.

-tranquilo, no dejare que te desangres- hable encogiéndome de hombros

me saque el abrigo y corte una parte de el, de di la vuelta, aun dentada arriba de el y amarre el pedazo de tela mas arriba de la herida para detener el sangrado.

-acaso te gusta estar arriba mío?- pregunto

-es mas cómodo que estar en la tierra- hable sin importancia.

- te verías mejor desnud..AAHHH- grito al sentir que hice presión en su herida.

- mejor cállate- me levante con mi conejo en mis manos, lo envolví en mi abrigo eh amarre los lados donde metes los brazos formando una cartera, me la coloque guarde mi daga- te quedaras alli o como?

-ayúdame- dijo enojado

-ay ya va princesita- estire mi mano y lo ayude a levantarse- pasa tu gran brazo por mis hombros, aunque no servirá de mucho