Ein Monster - Frey Stein

29.

Ese mismo día, de mañana.

FREY STEIN

Ella no estaba.

Desperté está mañana y ella no estaba. 

¿A donde se fue?, me preguntaba a mi mismo constantemente. 

Lejos de ti seguramente, contestaba mi subconsciente.

Su repentina ida me estaba matando el pensamiento y la misma pregunta se repetía en mi cabeza. 

¿Por qué?, había pasado algo y yo no me había enterado. ¿Cómo era eso posible si yo siempre le prestaba atención a todo lo que tuviera que ver con ella?. 

Me encontraba en mi habitación, impaciente, sabía que pronto colapsaría si no obtenía respuesta sobre su paradero. Había tratado de no sonar desesperado al momento de preguntar donde se encontraba ella, nadie me respondió. 

Mamá estaba hecha un manojo de nervios se había pasado buscándola todo el día con la compañía de Kaia y Valter. Heist había desaparecido otra vez y Peerce estaba en su trabajo.

Había tratado de ir con ellos pero mamá se opuso, pero ya no podía más, necesitaba saber sobre ella.

Ella, ella, ella. Era todo lo que podía pensar desde el momento cuando yo era un adolescente en el pasillo de nuestra casa de Alemania, ella se acercó a mi con su rostro angelical, su amabilidad, su interés tan inocente por mi y estuvo ahí cuando nadie lo estaba, ella me había tenido entre sus brazos ese día y yo, la tenía ella.

Ella me quería y yo, haría cualquier cosa por ella, mataría por ella, era una forma tan única de amar, o tal vez, no era amor, era algo mucho más profundo que eso, algo a lo que no se le podía poner etiqueta.

Esa era la única forma en la que sabía "amar", después de todo. 

Sabía que ella siempre se repetía a si misma que era su hermano cuando nos besábamos, pero eso a mi nunca me había importado, era lo último que pensaba cuando se trataba de ella. 

Me levanté dispuesto a saber de su paradero, no aguantaría no saber nada de ella cuando era yo quién lo preguntaba.

Creí que después de haber estado juntos sexualmente, al final, ya se podía haber olvidado de los malditos estereotipos, en realidad, no éramos hermanos completamente. Pero después ocurrió todo lo que pasó con mamá y ... Heiner.

En cuanto llegué a la sala principal pude visualizar a uno de mis padres: Mayne Stein, él se encontraba sentado leyendo un libro, sus ojos de colores diferentes se movían cuidadosamente por cada página. Mamá lo había dejado a cargo.

Le di una mirada y me dirigí a la puerta de salida. Antes de que pudiera salir su voz me interrumpió.

- ¿A donde vas, Frey?- preguntó sin mucho interés y sin despegar sus ojos de el libro.

Solo le di una mirada fría, y me fui.

Ya sabía a donde ir después de todo, sabía donde se encontraba ella, ella no conocía a nadie más que no fuera él en este asqueroso pueblo.

Me hervía la sangre de solo pensar en la imagen de ellos juntos, en la misma cama, sonriéndose uno al otro mientras se miran, el abrazándola. Odiaba todos los malditos escenarios posibles de ellos dos juntos, yo nunca había sentido odio por el pero si se trataba de ella, no dudaría en matarlo.

En cuanto llegué, toqué la puerta y mientras pasaban los segundos esperando, la ira iba creciendo, él me abrió, ni siquiera tuvo tiempo de reaccionar cuando lo primero que pude hice fue agarrarlo de cuello de la camiseta, lo había tomado desprevenido si no muy probablemente esto sería al revés.

-¡¿Dónde está?!- grité, el solo se limitó a mirarme. Lo golpeé- ¡¿Dónde mierda está?!.

El caminó hasta una puerta, que parecía ser la cocina, tocándose el ojo izquierdo, aún si decir nada.

- ¡Rhett!- dije- ¡Mierda, Rhett!, ¡¿Dónde está?!.

-¡¿Qué mierda quieres, Frey?!. ¿Ilusionarla y luego mandarla a la mierda otra vez, es eso lo que quieres, eh, Frey?.

Lo volví a golpear. El retrocedió y su espalda chocó con la mesa.

Esta vez solo me limite a mirarlo, no le respondería, solo yo sabía perfectamente lo que pasaba entre Mia y yo.

El se acercó a mi y ni siquiera tuve tiempo de poder defenderme cuando me dio un golpe en el labio. Me toqué el labio y le di una sonrisa ladina.

Lo volví a golpear, el me dio otro y luego vi todo negro como cada vez que me pasaba lo mismo y solo lo golpeaba sin control, la ira se apoderaba completamente de mi.

Hasta que sentí a alguien rodearme con sus pequeños brazos, al instante supe de quien se trataba, pronto sentí como dejaba de golpearlo y me calmaba poco a poco.

-¡¿Qué mierda te pasa?!- gritó en cuanto me calmé.

- ¡¿Por qué carajos estabas con él?!- grité con mi mandíbula tensa- ¡¿Por qué te fuiste?!

Ella estaba igual de angelical que siempre, tenía unas ojeras y sus ojos estaban rojos, lo que decía que había estado llorando.

-¡Por qué me mintieron!- gritó- ¡Por qué ustedes no son mi familia!.

No entendía lo que decía, ¿Qué no éramos su familia?, de donde había sacado eso.

- ¿Qué?- solté, sin expresión confundida pero estaba confundido, realmente lo estaba.

-¡No pertenezco aquí, no pertenezco a tú mundo, no pertenezco a ningún lado!- ella soltó.

Mentira.

-¡Si perteneces!.

-¡No, y si es así ¿A donde, Frey?!

- ¡Perteneces aquí, conmigo!.-  dije de pronto, no se por que lo dije, aun que en el fondo lo sabía muy bien, había dicho lo que realmente sentía.

...

¡Hola personitas!

¿Cómo están?, espero que estén muy bien.

Buenooo, este es nuestro primer cap. narrado por bebé Frey, espero que les gusté. 

¡ Gracias por los 50k de leídas, sus comentarios y los 7k de voto, los quieroooo muchooo <3!

Chaitooo :)