Advertencia: Este capítulo contiene escenas de sexo explícitas yactitudes perturbadoras e inmorales. Por favor, leer con precaución y distinguiendo que es lo que está bien y que es lo que está mal. Esta historia está hecha para el mero entretenimiento, no es una guía para como llevar tu vida. Gracias.
Mafias, leyes y tratos (Parte 3)
Decir que Maisie y Black son un misterio está demás.
Aunque Maisie lo es un poco más porque, ¿Quién es esa chica? ¿Realmente es ella? ¿Qué se sabe de su pasado?
Según sus recuerdos ella estuvo de un lado a otro, según las fotos también, pero realmente, ¿todo es verdad?
Es una confusión absoluta.
Quizás en su mente ya sabe cuál es su destino, quizás no. Solo sabe que tiene que arriesgarse para no terminar tres metros bajo tierra.
Mientras ella se peina su cabello castaño pasan muchas cosas por su cabeza, miles de preguntas sin respuesta. Sus ojos volvieron a su color natural: uno a gris y otro parcialmente gris con un toque de marrón.
Resulta que la trataron de ocultar tanto que quisieron alterar ciertas partes de ella, en este caso sus ojos.
Esos ojos hace que recuerde a la chica con lo que soñó en una academia militar. Ella ríe para sus adentros porque está muy segura que jamás ha ido a una nunca en la jodida vida.
Sus ojos se posan en las pequeñas heridas que dejó Black anteriormente. Recuerda como el probó su sangre y eso la estremece de pies a cabeza. También revive los momentos en que la hizo suya y en cómo la compartió con otra persona. Eso fue algo tan repugnante, pero le encantó. Es como si en ese instante ya conociera al hombre que la folló de una manera salvaje, algo en su cuerpo le resultó familiar en ese momento.
Ahora ella quiere más de eso, quiere volver a sentir todo ese remolino de emociones, esos orgasmos tan potentes que la dejan sin aliento y sin energía.
Pero también se ve en el espejo y se odia a sí misma por dejarse llevar por las emociones del momento, de no pensar con la cabeza, pero si con su coño. No se sacia de él y seguramente él tampoco lo hace de ella.
—¿Qué has hecho con la Maisie inocente? —le dice a su reflejo.
Sale de su habitación y camina por toda la mansión. Quiere distraerse, pensar en que solo está pasando unas buenas vacaciones y no que está encerrada, y probablemente a punto de morir.
Aunque tratara de escapar, sabe que no lo puede hacer. Muchos hombres rodean el lugar con sus armas en mano, desde simples Glock hasta fusiles de asalto. Black no permitiría que dañaran a su mujer, pero igual, eso logra amedrentar a la pobre chica.
No sabe como lidiar con la humedad de su sexo, solo de pensar en él la pone húmeda y eso no le agrada. Se imagina estando sobre él, ¿Cómo se sentirá controlarlo desde esa posición?
Ella trata de jugar el mismo juego que él, pero aún carece de cierta pericia para que lo haga tan bien que él.
Mientras ella camina, su cazador la vigila desde la ventana de su habitación. El solo verla aumenta su deseo carnal por ella, él también recuerda lo estrecho que está su sexo, en como ella gime y lo excita todavía más el recordarla como dice su nombre mientras la embiste como un animal.
Ella siente que la están vigilando y su mirada se dirige al lugar en donde está Black, a penas puede verlo de donde está. Él se encuentra detrás de las cortinas de tela transparente. Apenas distingue el gris de sus ojos.
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INEFABLE
Romance"La única manera de librarse de la tentación es caer en ella." - Oscar Wilde Maisie Wilde, una chica que desborda inocencia a cada paso que da. Estudiante universitaria que se caracteriza por ser inteligente y responsable. Sarcástica y tierna al mi...