Mi Pequeño Ángel |Yoonmin|

isib sam

Namjoon estaba más elegante que nunca. Quizás haber estado en los negocios de su padre no fue tan malo.

— Muchas gracias señor Jong por aceptar mi invitación. — dice amablemente Namjoon al hombre mayor que tiene en frente.

— Es todo un placer. Hace mucho tiempo no nos vemos.— le sonríe el hombre mientras toma un poco de su café amargado. — ¿A qué se debe tu repentina reunión conmigo? — Namjoon cruzó sus brazos provocando que la tela de su traje se apegara a sus gruesos músculos. El hombre vio como Namjoon se posicionaba de forma firme a lo que hizo la misma acción. La situación era seria.

— Necesito que deje la alianza con mi padre y sea mi aliado.

— ¿Por qué debería hacerlo? — pregunto sin comprender al muchacho y casi diciéndolo con burla por su ocurrencia.  — Me pides algo complejo. — hace un gesto con su rostro que hace notar su disconformidad.

— Kim Jinhae lo está estafando. — confiesa. — Le pido por favor sea mi aliado y no perjudique a su propio grupo y se le vaya todo su imperio a la basura. — afirma sus brazos en la mesa, sus manos se entrelazaron observando al señor Jong con firmeza y completa seguridad. — Puedo ayudarlo.

— ¿Cuál sería tu ayuda, muchacho? — pregunta un tanto curioso.

— Puedo protegerlo. — afirma.

— ¿Protegerme? Ese trabajo lo hace tu padre. — dice sin ser convencido por la propuesta del más moreno. Sin embargo, la sonrisa del menor en frente de él  lo hizo dudar.

— Ese es el tema, señor. — Namjoon toma del café que le habían servido hace unos minutos para continuar con su propuesta. — Mi padre no lo está haciendo. ¿Por qué cree que más de diez de sus hombres han caído a la cárcel? ¿O la perdida repentina de su dinero? Si no me equivoco, hace unos días usted solicitó un retiro de una buena y gran suma  dinero, pero hubo un ataque y el dinero desapareció. Curioso, ¿no cree? 

— ¿Cómo sabes toda esa información? — dice impresionado por las palabras del muchacho.

— Dígamos que tengo ojos por toda la ciudad. Esa es mi habilidad. Tengo ojos en los lugares que me propongo hasta sobre mi propio padre. Digamos que mis ideales no están junto a él. Trabajo solo.

— Me impresionas, Namjoon.

— ¿Y qué dice? — cuestiona el menor. El señor Jong suspiró por su próxima decisión. Como la mayoría de los conocidos de Namjoon, no tenía un negocio completamente honorable, pero no era tan cruel como el de Jinhae. El señor Jong era bastante precavido, pero demasiado confiado. Dejo su confianza en quien no debía, pero Namjoon era él indicado.

— Bien, muchacho. O mejor dicho, señor Kim. — ambos estrecharon las manos formando su nueva alianza. Esto era una ventaja bastante grande. — Por cierto, hay un nuevo jefe en uno de los grupos. Es de tu edad, podrías hablar con él.

— ¿Quién sería?

— Chae Hyungwon.

...

El peligris comenzó a hacer fuerzas con su cuerpo a medida que lo volvían a adentrar a la mansión guiándolo nuevamente al sótano en donde lo habían tenido encerrado todo este tiempo.

— ¡Suéltenme! — el ruido desde afuera se volvía bastante seguido y fuerte. Sabía que Yoongi vendría en su busca y estaba más que contento por ello. En un intento de soltarse, impactó su cabeza con uno de los hombres quedando libre de su lado derecho, con el hombre en su izquierda golpeó su abdomen para quedar completamente libre cayendo al suelo. Sus manos seguían atadas y era la mayor complicación. Se arrastró por el suelo para luego intentar ponerse de pie, pero fue atrapado antes de eso.