⚜️Capítulo 9⚜️

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. BUSCANDO EL RUMBO.

Narra Padmé Amidala

A mi alrededor no había más que arena y arena.
Era como un laberinto interminable, con un increíble horizonte indefinido.

Mi objetivo era Mos Espa, un lugar, el cual pisé hace 13 años.
Ahora vagaba por los desiertos, con un collar que me estaba matando poco a poco y con una terrible sed, que no se calmaba.
¿Cómo hacía la gente para vivir aquí?

El recuerdo de Naboo me vino a la cabeza, haciendo que la angustiante situación que estaba viviendo se me olvidara por unos momentos.

¿Cómo olvidar las cascadas, los lagos, los ríos y las playas de mi adorado planeta natal?

Aún me acuerdo cuando hacía el retiro con mis compañeras de curso, en el país de los Lagos.

Charlábamos tumbadas sobre la arena dejando que el sol y la brisa nos diese en la cara , intentando averiguar de qué pájaros procedían los cantos que escuchábamos.

También echaba muchísimo de menos la agradable compañía de Dormé, Sabé, Jamillia o Typho.

Opinar  de la situación política de la República, charlar de qué podíamos hacer para mejorarla...
Aquellos eran buenos tiempos,sin duda alguna.

Los rayos del sol, incidían de tal manera que era casi imposible seguir andando.

- A ver... El norte.... Es por allí... Por que el sol ese... Está allá. - dije con el hilo de voz que me quedaba, entre jadeos y respiraciones lentas, con un sudor extremadamente insoportable.

La vida en el desierto no estaba hecha para mí, y confiaba en no regresar más a este planeta una vez que saliera de ésta.
Si es que salía, claro.

-Tú puedes Padmé. - dije cansada.

El suelo ahora había cambiado.
De estar caminando por arena pura, entre las dunas del desierto, ahora me encontraba caminando entre un corredor de rocas rojizas, pisando un terreno más firme.

La sombra que había en aquel lugar, hizo que esbozara una sonrisa automática.
Es como si la fuerza me hubiese escuchado y hubiera atendido mis súplicas.

Me senté un segundo en el suelo, apoyada sobre una pared rocosa , para descansar.

Después comencé a subir por las rocas, para ver si podía ver algo al horizonte.

Caminé con incertidumbre, y con cierto nerviosismo.
¿Y si me encontraba a uno de esos bichos autóctonos tan peligrosos de los que me habían hablado?

Seguí por la senda y en lo alto de la montaña  pude ver a lo lejos una ciudad.
Sin duda era Mos Espa, pero se veía tan minúscula que supe que aún me faltarían unas horas para llegar allí.

Bajé de la montaña, y seguí caminando en dirección a la ciudad, esta vez con más motivación ya que ahora estaba segura de que lo podría lograr.

-Un arma. - dije desconcertada.

Miré hacia mis alrededores aterrorizada.
¿Y si pertenecía a una de esas criaturas del desierto?

~Ella y Él~[ANAKIN AND PADMÉ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora