~Ella y Él~[ANAKIN AND PADMÉ]

⚜️Capítulo 14⚜️

. CUERPO Y MENTE.

Narra Obi-Wan Kenobi

Desde que se me propuso exiliarme a Tatooine no lo dudé ni un segundo.
Después del duelo de Mustafar comprendí que había fracasado como maestro, mentor.. Y padre.

El planeta desértico que ahora consideraba mi hogar era el lugar ideal para refugiarme del imperio, de Anakin y de mi pasado.

Ahora vivía en una pequeña casita humilde, escondida entre los pedruscos color rojizo,con todo lo necesario para vivir.
La soledad se había convertido en mi mejor amiga desde que me trasladé a las afueras de Mos Esley, también a pocos kilómetros de Mos Espa.

Terminé de cocinar, en la pequeña cocinita de la cabaña y sonó mi comunicador, después de casi dos meses.

-Senador Bail.. . - dije sorprendido.

-Maestro Kenobi, tenemos un problema.

-¿Qué clase de problema?

-No se sabe nada de Padmé Amidala desde hace dos semanas desde que se tuvo que ir de Naboo porque el imperio la buscaba.

-Cielo santo..¿Nadie se ha podido comunicar con ella?

-Negativo, por lo que Typho y yo decidimos investigar que había pasado, y descubrimos que alguien interceptó su nave.

-¿El imperio?

-No, al parecer no, ya que las tropas aún siguen buscándola.

-¿Entonces que va a pasar con la transmisión? - dije pensativo.

-No podemos hacerla sin ella, Obi-Wan, por eso debemos buscarla.

-¿Y qué puedo hacer yo para ayudar?-dije con pocas esperanzas.

-Typho y yo seguiremos investigando, era sólo para comunicártelo... Quizás podrías investigar con el uso de la fuerza...

-¿Qué te hace pensar que puede estar en Tatooine?

-No lo sé... Te lo digo por que eres un jedi.

-Intentaré concentrarme en la fuerza a ver si veo algo.

-Gracias, maestro Kenobi.

-No hay de qué, amigo.

-Te informaré si sé algo.

-Adiós Bail.

-Adiós.

Se cortó la comunicación, dejando que el holograma de la figura de Bail se esfumara.

Me quedé pensando el resto del día, acerca de lo que me había comunicado Bail.
"Pobre Padmé ", pensé para mis adentros, mientras contemplaba como el sol se iba escondiendo entre las rocas del Desierto.

-Obi-Wan, no te atormentes.-una voz muy conocida pero que no había oído en años se presentó de repente.

-¿Qui-Gon? - giré mi cabeza atónito.

-Sí, el mismo. - dijo mi maestro en forma de fantasma de la fuerza.

-¿Cómo...?

-Los misterios de la fuerza, Obi-Wan.

-Increíble. - dije aún sorprendido.

-Sí, sin duda fascinante. - éste se sentó a mi lado.

-Obi-Wan, lo que pasó en Mustafar no fue por tu culpa, todo es culpa del Emperador, sabes que hiciste lo que pudiste...

-Maestro.... Le he fallado...

-No te martirices Obi-Wan, todos cometemos errores.. Acuérdate de  que somos humanos.