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Estoy completamente asombrada, todos estos meses en los que hemos estado juntos nunca nos dijimos te quiero. Aunque yo lo intenté aquella noche, pero un imbécil nos interrumpió.
Empieza a ponerse nervioso ante mi actitud, debo contestar o pensará que yo no siento lo mismo por él.

- Yo también te quiero Daryl -pongo mi mano en su mejilla- intenté decírtelo antes pero nos interrumpieron -rio nerviosa-

Se queda callado unos segundos pensando en esta última frase que pronuncie. Creo que se empieza a dar cuenta porque empieza a sonreír mientras sus ojos avellana se clavan en los míos.

- Déjame adivinar -susurra- ¿lo intentaste cuando gané la carrera? -acaricia mi mejilla- y ese hombre nos interrumpió

Asentimos a la vez riendo, una parte de mí no se lo quería decir ese día por miedo a su reacción. Terminamos yendo a la habitación, me acuna en sus brazos y entre caricias me quedó dormida.

Al día siguiente. Camino hacia la empresa, hoy cogí el transporte público porque Daryl quiere seguir investigando sobre el plan de Maccini. El metro se retraso y estoy llegando veinte minutos tarde, Cassidy me va a matar.

Acelero el paso y no tardo mas de 5 minutos en llegar. Cuando llegó a mi planta miro a todos lados para intentar no encontrarme con Cassidy, suspiro aliviada llegando a mi mesa. Cuando dejo mi bolso oigo un carraspeo al lado mío, levanto la vista de mi teléfono y ahí esta. ¿Cuánto tiempo lleva esperándome?

- Señorita Stone -se cruza de brazos- llega casi media hora tarde, ¿usted se cree que esto es una escuela o que? Aquí no vamos a permitir este tipo de cosas -intentó hablar pero ella no me deja- suficiente hemos aguantado todos estos meses cuando faltaba al trabajo y venía aquí con excusas, rogando para que no la echáramos. Ya no voy a aguantar una más.

- Lo entiendo -aprieto los dientes aguantando no saltarle encima- y le prometo que no habrá una próxima vez, se lo juro.

- Por supuesto que no habrá una próxima vez -se endereza- porque esta despedida, recoja sus cosas

- No, no, no -niego asustada- por favor Cassidy no me eches -odio rogar, y mas a ella- prometo que llegaré temprano y -cojo aire, lo que voy a soltar ahora me hierve la sangre. Porque es lo que supone Cassidy cuando en realidad no es así- haré bien mi trabajo

Sus labios dibujan una sonrisa malvada, se acerca a mí para volver a repetir esas cinco palabras que me dejaron descolocada.

- Repito -alza la voz- esta despedida, recoja sus cosas -sonríe mas- tiene 10 minutos para recogerlo todo y irse lejos de esta empresa

Empiezo a recoger mientras mil pensamientos pasan por mi cabeza, todos negativos. No tengo muchas cosas, a la fuerza me consigue entrar todo en el bolso. Emma aparece enfrente mío con la libreta que usa para cuando va a las reuniones, al ver mi mesa casi vacía se acerca rápido a la mía sin quitarme el ojo de encima .

- Ey -me mira preocupada- ¿se puede saber que haces? ¿Dónde vas?

- Estoy despedida, Cassitetas acaba de echarme, tengo cinco minutos para estar fuera -meto algunas cosas más-

- Haber espera, espera -levanta las manos- ¿por qué?

- Por llegar tarde -cierro el bolso cogiéndolo- Emma entiendo tu preocupación, pero ahora mismo no quiero hablar, quiero llegar a casa y intentar tranquilizarme -suspiro pasando la mano por mi cara-

- Cuando te sientas mejor nos tomamos algo y hablamos -me mira con tristeza al ver la expresión de mi cara-

Sonrió débilmente y camino hacia el ascensor. Cuando me subo aprieto el botón, algo bueno que tiene este día es que esta vacío y puedo aprovechar para pensar en mi futuro, ¿qué pasa si no me cogen en los trabajos que encuentre? No quiero ser una mantenida, y mucho menos ahora que voy a tener un hijo/a. ¿Y si me cojo la baja? No, aún es muy pronto. Pero ahora que lo pienso, si empiezo a trabajar en unos meses tendré que darme la baja, y sería tontería ponerme a trabajar si en pocos meses tengo que dejarlo temporalmente. Niego intentando quitar el caos que se ha formado en mi mente.

Temporada 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora