Las siguientes horas fueron eternas, nunca pensé que dilatar hasta diez centímetros fuese tan doloroso. Cuando me llevaron a quirófano estaba aterrada, tenía mucho miedo. Miedo a que algo saliera mal, o a los posibles dolores que iba a sentir.
Daryl estuvo a mi lado en todo momento, nuestras manos estaban cogidas y solo me soltaba una para limpiar el sudor de mi frente. Besaba mi frente y me daba ánimos. Fueron unas horas que se me hicieron muy largas, pero gracias a mi novio no lo pase tan mal.
A pesar de que Matt no pudo entrar, en todo momento sabia que estaría de los nervios. Totalmente desesperado caminando de un lado a otro, sin saber que hacer.
En el momento que escuche a mi bebé llorar suspire aliviada, por fin. Miro a Daryl agotada y sudada, no tenía fuerzas para nada.
—Lo has hecho genial mi amor —Se acerca besando mis labios.
Ambos levantamos la mirada cuando una enfermera se acerca con nuestra hija en brazos, la deja en mi pecho y no puedo evitar llorar.
—Hola princesa —sonrío emocionada y Daryl se inclina besando su cabeza.
—Bienvenida al mundo mini fierecilla —susurra con una sonrisa.
No puedo evitar echarme a reír ante el apodo que le ha puesto a nuestro hija.
—¿Mini fierecilla? ¿En serio?
—Estoy seguro de que va a tener tu carácter y va a dar la misma guerra que tu —ríe.
Nuestro pequeño momento es interrumpido por una enfermera que nos pregunta que nombre queremos ponerle. En estos nueve meses nos costo bastante decidirnos, teníamos una larga lista de nombre que nos gustaban. Conseguimos elegir dos, pero de esos no pudimos elegir solo uno, a Daryl le gustaba Evie y a mi Alyssa. Así que no pudimos ponernos de acuerdo, sonrío cuando se me ocurre algo.
—¿Qué te parece si le ponemos los dos? —miro a mi pareja por si le parece bien la idea.
—Me parece bien —sonríe—. Ponle primero el que quieras.
—Se llamará Evie Alyssa.
Nuestra pequeña y hermosa Evie Alyssa Ortega.
Los enfermeros le mandan que vaya a la habitación y enseguida me llevarán a mi. Cuando sale les pregunto que pasará con mi hija, me tranquilizan diciéndome que le harán unas pruebas para ver que no tenga nada, y que la van a bañar. No tardarían en llevarla a la habitación conmigo, y que si todo pasaba con normalidad, al día siguiente me darían el alta. Pero si algo ocurría, que espero que no y que todo salga bien, tendríamos que quedarnos unos días.
Tengo mucho sueño, me siento muy débil, ya que gaste todas las fuerzas que tenía en empujar durante horas. Intento mantenerme despierta, al menos hasta tener a mi hija en la misma habitación que yo, no me quedaré tranquila hasta entonces.
Cuando llego a la habitación Daryl y Matt están hablando, los enfermeros colocan la camilla donde estaba y les dicen lo mismo que me dijeron a mi en quirófano.
Los dos se acercan a mí, Matt me sonríe con dulzura y retira el cabello mojado de mi cara.
—Eres una campeona princesa, sabia que podrías aguantar el dolor y que todo saldría bien —sonríe con orgullo.
Cojo su mano sonriendo y dejo un beso en ella, también cojo la mano de mi novio y la entrelazo dejando otro beso en ella.
—¿Necesitas algo? ¿Tienes sed?
—Quiero ducharme.
Los dos se miran y bajan su mirada hacia mi, ponen la misma sonrisa. A pesar de no decirme nada ya se cual será su respuesta.

ESTÁS LEYENDO
Temporada 2
FanfictionEl romance de esta apasionada pareja continúa, una nueva etapa con más amor, pasión, adrenalina, fiestas, nuevas sorpresas y mucha diversión. Pero un hombre poderoso estará de vuelta y Daila no se va a quedar detrás de su novio, va a luchar, aunque...