I. Empezando a caminar solo

1.7K 182 27
                                    

—Hoooola hola.

Sonríe emocionado a la pequeña criatura que acaba de aparecer. Luce como una serpiente con aletas y muchas membranas. El dragón se sacude y lo que eran escamas cambia a ser pelaje. Estira las manos con lentitud hasta tomarlo. El dragón gorgotea hasta frotarse contra el cuello del niño; parte de su cuerpo enroscado en la mano pequeña.

— ¡MAMÁ! ¡SÍ TENGO DRAGÓN! ¡MAMÁÁÁÁÁÁÁÁÁÁ!

La gente del pueblo da risas suaves, enternecido por el hijo de la doctora y el carpintero. Es un niño bastante pequeño y que no puede confundirse con ninguno. Desde que nació tiene cabello azul. Se vuelve más o menos oscuro en dependencia con la luz que le dé. Otro rasgo es que tiene los labios muy anchos. Un círculo rosado y esponjoso con el que nadie tiene permitido confundirlo.

Park Jimin es, por decisión unánime, el niño más tierno del poblado.

Se trata de un lugar casi a mitad de la nada, destaca por recibir gente enferma casi diariamente. La doctora y madre de Jimin, Park So—Yeon, recibe a todo el mundo. Están bien ubicados, hay plantas medicinales por doquier y dado que ella cuida de una reserva propia tras su casa, no ha habido problemas con quedarse cortos. No considera que nadie deba estar sufriendo si hay como ayudarlo. Incluso si no tienen como pagar. A la larga, todos regresan para ayudarla o dándole algo a cambio como comida, ropa, algún recurso, etc.

Aunque su paciente habitual es su propio hijo, que no deja de caerse por todo lo que está en su camino. Incluso si no hay nada. Jimin vive más con la nariz rota que nadie.

— ¿Uh? ¡UH! —Levanta de su lugar, el anciano continúa bebiendo la infusión que la mujer le dio—. ¡Así que por esto tienes cabello azul! Es un dragón de agua—Soyeon acaricia bajo el hocico al dragón que gorgotea—. Pensé que había comido demasiadas moras azules durante el embarazo y te teñí el cabello. —bromea a Jimin que se ríe. Algunos mechones de cabello se le vienen a la cara. Hacerse trenzas es misión fallida. Su cabello se suelta sin motivo.

No obstante, Soyeon comprende que se debe a esto: teniendo un dragón de agua, se manifiesta en la textura de su cabellera, nadie puede detener o darle forma al agua. Solo dejarla ser.

— ¿Qué nombre le vas a poner? —Jimin deja al dragón en el suelo, empieza a dar saltos para andar y choca con un dragón más grande. Siendo el de Soyeon. Un dragón de florecimiento llamado Minsu.

Minsu lo toma en su hocico por una de las aletas y se lo lleva al interior de la casa de enfermos para mimarlo un rato. Jimin hace puchero, apenas lo obtiene y ya el dragón de su mamá se lo quitó.

—No sé. No sé nombres bonitos. —Baja la cabeza y balancea en sus pies. Soyeon se sienta frente a él.

—Claro que sí. Hay muchos nombres bonitos que te hemos enseñado—recrimina la mujer jalándole una mejilla—. Veamos ¿Es niño o niña? —Jimin responde que es niña, viendo fijamente a su mamá—. Entonces ¿Cuáles nombres de niña se te ocurren?

Ve por donde Minsu se llevó a su dragona, luego ve a su mamá.

Soyeon.

Soon...

—Soo.

— ¿Y qué significa? —tienta y Jimin mira arriba un poco.

—Espíritu... ¿Bonito?

—Gentil.

— ¡Como el agua en el rio de atrás del pueblo!

—Entonces que se llame Soo.

Jimin abraza a Soyeon y ella lo carga para llevarlo dentro. El cuarto donde lo deja para que juegue y estudie. No se suele enseñar desde que son tan pequeños, pero ella quiere que sea doctor y mientras más pronto reconozca plantas, enfermedades, señales y demás, mejor. Le da pena es no poder enseñarlo a leer y escribir aún. No es tan buena en esa parte y su esposo está muy ocupado últimamente.

Loyal Muse | NamMin || BOOK 2#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora