¡Esta vez no! (OMEGAVERSE) •Narusasu•

Una familia

Después de 10 largos meses, estaban por fin en el hospital, el azabache había entrado en trabajo de parto cuando el rubio estaba en una misión, está duraba una semana, y se suponía que regresaba hoy, un Uchiha envío un águila, con el mensaje que su Omega estaba por entrar a trabajo de parto. El rubio regresaba a toda velocidad, mientras recordaba lo difícil que fueron los primeros meses.

Flash back:

- ¡Dobe, mira! - De inmediato el rubio fue con el azabache, este estaba en la sala mientras el rubio cocinaba.

- ¿Estás bien Sasu? - Pregunto el rubio.

- No, para nada, están creciendo mucho, y también mi pansa. ¡Estoy gordo! - Grito lo último al borde del llanto, sus ojos ya estaban cristalizados.

- Eso está bien Sasu, no te preocupes, solo serán pocos meses. - Dijo tratando de consolarlo, mientras el azabache negaba rápidamente.

- Ese no es el problema... ¡Es que ya no soy sexy para ti! - Dijo señalandose desde los pies a la cabeza, mientras el rubio sonreía burlón.

- Vamos amor, eres muy sexy, dattebayo. - Dijo abrazandolo suavemente.

- ¿Entonces por qué ya no me tocas? - Dijo apartandose un poco del contrario.

- Necesitas reposo teme, no puedo hacerte nada, sin que los niños lo vean. - Dijo dando pequeñas caricias en su abultada panza, dejando para finalizar un beso en ella.

- Odio que tengas razón Dobe. - Hizo un pequeño puchero y sonrió. - Beso. - Señaló sus labios mientras lo decía. Juntaron sus labios lentamente en un corto y casto beso, pero lleno de mucho amor.

Fin del flash back.

Luego de recordar eso sonrió dulcemente, y se apresuró aún más, ya quería estar con su azabache y sus dos hijos, no sabía cómo eran pero ya los amaba con todo el corazón.

Mientras que un azabache bastante nervioso y molesto, estaba caminando por todo el hospital por orden de la enfermera, con ayuda de su mejor amigo también azabache.

- ¿Y ya la invitaste a salir? - Soltó así el azabache con un poco de esfuerzo, mientras que el otro se roburizaba.

- N-No es fácil señor, es hermosa, inteligente, y muy graciosa, no creo que este en su nivel. -

- Tienes razón, Sakura es hermosa e inteligente, y tú solo eres un Uchiha. - Lo dijo de forma sarcástica. - Ten orgullo de tu clan, que no es tan poca cosa, ni tú tampoco, solo empieza con un "Hola" las cosas se darán por si mismas. - Dijo con simpleza.

- Usted y Naruto-san... ¿Cuando se enamoraron? -

- ¿Q-Que pregunta es esa? - Dijo un poco nervioso, aclaro su garganta y siguió. - Por más cercano que fueras a mi, no te lo diría, esa es una historia que solo se la contaré a mis hijos. - Dijo con orgullo. - No te ofendas. - Agrego rápidamente.

- Claro que no señor. - Dijo riendo divertido, lo entendía.

- Pero si te diré, que Sakura también está interesada en ti. - Dijo con una pequeña sonrisa, mientras el otro sonreía apenado. - ¡Ahhh! - Era el azabache, al parecer ya había dilatado lo suficiente. De inmediato llamo a las enfermeras, quiénes lo pusieron en una camilla para llevarlo, cuando un alborotado rubio estaba entrando al hospital, esté se dirigió al ojiazul.

- ¡Menma! ¿Dónde está? - Dijo alterado, ni siquiera se había cambiado, aún tenía su chaleco y banda joinnin.

- Acaba de entrar Naruto-san. - Rápidamente se acercó una enfermera.

- ¿Usted es Uzumaki Naruto? -

- Así es. - Contesto rápidamente.

- Por aquí. - Y sin más se fueron, con un pequeño agradecimiento al ojiazul por el rubio. El ojiazul volteo a la entrada del hospital, y vio a los amigos de su líder. Los equipos 7 y 8, y el equipo Baki.

- ¡Equipo 7, 8, y Baki, Uchiha-sama acaba de entrar en trabajo de parto, Naruto-san también ah ingresado! - Dijo informando a los presentes, quiénes estaban sorprendidos, era igual de educado que el azabache.

- Oh valla, ¿ya entro mi hermanito? - Hablo un azabache junto con un rubio de larga cabellera.

- ¡Así es Uchiha-sama, Deidara-sama! - El rubio se había ganado su lugar, por utilizar sus explosiones a favor de la aldea, pareciera que todo lo que hizo quedo totalmente en el pasado.

- Menma-kun, ya te dijimos que nos puedes llamar por nuestros nombres. - Dijo el azabache mayor rodeando el cuello del ojiazul.

- Si, es muy formal, nos conocemos hace tiempo. - Agrego el rubio. Mientras ellos estaban en su mundo, los demás observaban.

- ¿Y nosotros? - Pregunto la peliazul.

- Nos olvidaron. - Respondió el Nara, mientras todos asentian. Cuando una enfermera salió.

- Parientes de Uchiha Sasuke. - En eso todos, incluyendo sus hermanos se pararon enfrente de la enfermera, está casi se desmaya al ver tantos hombres guapos juntos.

- P-Por aquí, p-por favor. - Dijo la enfermera totalmente roja, mientras todas las parejas de los hombres se enojaban. (Temari, Hinata, Tenten, Ino, etc.) Al llegar pudieron observar a la pareja con un bebé cada quien. Era una imágen realmente linda.

- ¡Hermanito! - El primero en lanzarse al azabache fue el mayor, pues realmente lo extrañaba, el también estaba en una misión cuando el otro entro en parto, pero con la diferencia de que el si se fue a cambiar.

- ¡Itachi, muévete! - Grito el azabache sonrojado, mientras todos reían, incluso el rubio. El rubio de cabello largo fue el único quien fue en rescate del azabache menor.

- Vamos Itachi, déjalo respirar. - Así lo hizo, por más que fueran Uchiha, tenían su lado tierno. Estaban platicando cuando llegó la pelirrosa a dar informes, de inmediato el azabache ojiazul se sonrojo sin razón.

- Hola chicos, hola Sasuke-kun. - Ante esto todos sonrieron y asintieron. - Bien, parece que todo está en orden, tu herida no se abrió eso es bueno, cómo tienes a Naruto te vas a mejorar en poco tiempo. - Dijo con una sonrisa tranquilizadora y siguió. - Así que Naruto... Cuidado, o te las verás conmigo. - En ese momento un aura tenebrosa cubrió a su amiga pelirrosa, aún con su sonrisa, que si le preguntaras a alguien era la más tenebrosa que vieras.

- S-Si Sakura-chan, d-dettebayo. - Dijo un muy nervioso rubio.

- ¡Bien! Nos vemos Sasuke-kun, hasta luego chicos. - Lo último lo dijo mirando al ojiazul azabache.

- ¡Menma! ¿Que esperas? - Dijo el azabache con una sonrisa ladeada, mientras los presentes veían la escena.

- Esque está ocupada... - Dijo apenado, mientras todos lo veían frustrados.

- ¡Ve ahora! - Dijeron todos al unísono, sin más fue a buscar a la pelirrosa.

- Esos dos... - Suspiro el azabache.

- Si, son muy lentos dattebayo, nosotros lo hicimos en cuanto nos vimos. - Dijo rascándose la nuca el azabache, mientras el azabache mayor explotaba de furia, pero le preocupaba más sus sobrinos, así que tomo el que estaba sosteniendo el rubio y el otro rubio de cabello largo tomo al del azabache. Mientras todos reían en silencio.

- ¡Cállate Dobe! Estamos con los niños! - Así fue como el rubio empezó a correr y detrás de él, el azabache, mientras se escuchaban las súplicas del rubio y los reclamos del azabache. Y todos sabían lo mismo, esos niños, serían los más felices con ellos. Sin más, fueron a procurar que el azabache no matará al rubio.