34 - mafia kuir win

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Narrador Omnisciente.

Tweek estaba algo frustrado, no solo había vuelto a huir de Clyde, si no que había dejado la cafetería abierta y probablemente asalten la tienda.

El rubio suelta un largo y pesado suspiro, quería regresar pero su miedo de enfrentar al castaño eran mayores, por lo que decidió que era mejor que robaran la cafetería a tener que enfrentar sus miedos.

El día anterior fue su cumpleaños y nadie le había regalado nada, no es relevante pero Tweek quería contarlo para que tuvieran empatía con el (no la tengan, fue un hijo de puta).

- ¿Será muy tarde para escapar a Rusia? ... ¿EN QUE ESTOY PENSANDO? Rusos, Norcoreanos ¡Son casi lo mismo! ── se deja caer boca abajo en la nieve, está se le mete en la nariz y le llega al cerebro, aquello hizo que volviera a sus cinco sentidos sin lógica alguna ── no creo que escapar sea la mejor opción, ahora es muy tarde -

Ya estaba enfrente de su casa y casualmente había olvidado las llaves para entrar, encima sus padres estaban fuera de la ciudad, por lo que decidió esperarlos sentado en el suelo.

Mientras Tweek se arrepentía de sus indecentes pensamientos y acciones, por otra parte, Clyde ya había salido de la cafetería para buscar a Tweek.

Iba un poco lento ya que no quería arruinar su atuendo gay ni su peinado de los 80's.

- ¿Qué se supone que le diga a Tweek cuando lo vea? Pensaré en eso después, solo espero que no se de cuenta que el ramo de pasto es del patio de su casa -

El castaño intentó caminar un poco más rápido, primero pasaría a la escuela, después al club de música de Tweek y por último a la casa de este, si no estaba en ninguno de aquellos lugares, seguramente estaría con Wendy y sus amigas.

﹏﹏﹏ ❲ :🌿: ❳ ﹏﹏﹏

- Bueno, Tweek no está en la escuela ni en su club ── decía el robusto ya algo cansado, pero no se rendiría tan rápido ── ahora a la casa de Tweek, por suerte de ser el protagonista, no me queda taaan lejos y... -

Clyde deja de hablar solo al notar como un par de adultos lo miraban como el anormal que es, por lo que decidió empezar de una vez su camino, ah y se iba a comprar unos condones de sabores.

Metió las manos en sus bolsillos traseros para ver si tenía dinero pero al parecer ya tenía los condones ahí metidos.

- ¿Habrá sido Kevin? Con razón hace rato sentí que me manosearon -

Vuelve a guardar los preservativos, sabía que a Tweek le gustaba inflar esas cosas por algún extraño motivo, así que eso le regalaría por su cumpleaños atrasado.

Un ramo de pasto con un hermoso listón de alambres y globos de sabores, este sería el mejor cumpleaños atrasado de Tweek.

El castaño recordaba las palabras correctas para su confesión, ya lo tenía todo planeado pero estaba practicando para no cagarla y decir otra tontería.

Al llegar a casa de Tweek (estaba a un par de metros de distancia), no pudo evitar ponerse pálido al ver que el rubio si estaba ahí, quería darse la vuelta e irse pero esta sería su última oportunidad para confesarse.

- Vamos Clyde tu puedes ¡No eres un marica! Oh bueno... Si lo soy pero me refiero a que ¡Agh! Otra vez estoy hablando solo ── se golpea la cara para concentrarse y comienza a acercarse al rubio a paso lento ──

Clyde se había sentado a un lado de Tweek con intención de que este no se diera cuenta que estaba ahí, pero para su mala suerte no fue así.

Esto le sorprendió un poco ya que el rubio tenía la cabeza escondida entre sus piernas y no había alguna manera de que se diera cuenta que estaba sentado junto a el.

☕ - Twyde - Caja De Buda - 🌮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora