A TU LADO [En curso] •

7. La peor situación.

Mini-maratón 2/2

Tal vez si no lo veo, él no me ve, pensé.

Pff. Que gran estupidez.

Dios mío que hago aquí.

Eran casi las dos de la madrugada y yo seguía en mi asiento desde que llegué, veo a personas ir de lado a lado, unos borrachos, otros bailando y, otros.... bueno, haciendo lo divertido con ropa.

Ya yo me sentía exhausta de estar allí sin hacer nada, los demás por su parte ya tenían con quién estar y en dónde estar. Mientras yo hacía solo existía en el sillón.

Era como si todos se pusieran de acuerdo en conspirar contra mi y dejarme sola.

De vez en cuanto André me llamaba desde la pista de baile con la manos mientras hacía movimientos con la caderas, que le quedan bastante bien, eh. Pero al ver todas las miradas rabiosas de esas chicas hacia a mí, se me quitaban las ganas.

Pero ese no es el mayor de mis problemas. No, no, no... El problema era que cierto señorito anda rondando por el lugar y por mi cabeza.

Ay, dígame qué eso no sonó tan patético de como lo escuché.

¡Cállate!

En todo el rato que he estado aquí, Leam me ha estado observando desde la barra, algunas vaces se acercan personas hacia él a saludar, él habla con ellos en poco tiempo y vuelve a verme como si fuera la mejor opción de su vida.

Y es que me siento un poco incómoda, oh vamos, no es fácil que un día seas invisible y al otro un chico buenorro se te quede viendo más de lo normal. Y no importaba si era lindo, o superficialmente atractivo... ERA LEAM.

¿Que insinuas?

Nada.

Y, al parecer no he sido la única en notarlo ya que  Nacha también se dió cuenta de eso, por lo que me dijo que le hablara pero porque, si yo no tengo nada que decir o hacer ¿no?.

Al final Laura volvió de no se dónde, pero no viene sola, viene con Greg. Talvez se lo encontró en algún lugar o, simplemente se pusieron de acuerdo para encontrarse.

¿Casualidad? No lo creo.

—Comadree, ¿Adivina a quién me encontré?. —me dice Lau, señalando a Greg. Pero el solo asiente como gesto de saludo.

Parece que no es un hombre de muchas palabras, pensé.

—¿Dónde están los demás?— me pregunta la rubia.

—Nacha y su novio se fueron a su casa, tomaron un taxi. André se perdió, en no se dónde.— le respondí, encogiendome de hombros.

Ellos empiezan a hablar de no se que, la verdad es que no les presto mucha atención, solo puedo ver a Leam en los raticos que el no me ve a mi, y es tan ridículo porque a pesar de que separo mi vista de él, siempre termino cayendo en él mismo. Es muy difícil porque siento el impulso de verlo, y saber si sigue allí. De repente mi teléfono empieza a vibrar en mi bolsillo, lo saco rápidamente y veo un mensaje de Leam.

Leam <3: Puedes dejar de verme, me siento acosado.

¡¿Qué?! Pero si es él quien lleva rato allí. Viéndome. Si no lo conociera me asustaría.

Yo: ¿Disculpa? Tú eres el que lleva todo el rato viéndome.

Leam <3: Si, si. Al menos me respondiste. Seguro pusiste mi nombre con un corazoncito.

Yo: Te regalaré una cama, para que sigas soñando.

Leam: O, para que durmamos los dos.