En la semana al volver a la escuela luego de la fiesta de Rose, Jungkook apenas se había cruzado con Taehyung en los pasillos de la escuela, resultaba que el mayor se estaba saltando varias clases.
Jungkook estaba alerta en todo momento. Quizás desafiarlo podría traer una mala broma como consecuencia.
Pero ya iban a mitad de semana y no sucedía nada.
— Jungkook, ayúdame con este cartel. Trae el banco de allí — le pidió HueningKai que se encontraba en en patio colgando el cartel de la feria de ciencias.
Jungkook lo ayudó y juntos colgaron el cartel. Los demás chicos acababan de regresar de la biblioteca.
Gyu le tendió a Jungkook el libro que le había pedido por la mañana.
—No lo encontraba por ningún lado.
Jungkook chocó los puños con su amigo y se guardó el libro en la mochila.
—¿Quieren ir a comer a un McDonald luego de clases? — propuso Taehyun mientras se acomodaba la chaqueta roja, tan roja como su pelo — nos saltamos el almuerzo.
—¡Claro! — dijeron al unísono.
—Uy, no invitan — les dijo una voz grave y profunda a sus espaldas.
Los demás se giraron. Ya tenía que venir Kim a molestar. Yeonjun fue quien le habló:
—Nadie te invitaría a ti, cara de mono.
Taehyung se alzó de hombros desinteresado y luego clavó sus ojos en Jungkook y luego en su cuello.
—¿Ya te han dicho que ese chupón te hace ver guapo?
Jungkook se cubrió con la mano la marca que Taehyung le había dejado. Todavía no se iba.
Los demás se giraron a ver a Jungkook y él hizo una mueca.
—Deja de molestarlo — pidió Soobin amablemente —En realidad deja de molestarnos a todos, veras, es un poco repetitivo y me hartas.
Taehyung puso los ojos en blanco al tiempo que Gyu seguía mirando el chupón en el cuello de Jungkook. No se había dado cuenta el día de la fiesta porque se había ido borracho y enojado por lo que había pasado, recién ahora lo notaba y le daba la sensación de que Jungkook había estado intentando esconderlo durante esos tres días que pasaron. Ya casi no se veía, pero seguía estando ahí.
Era la prueba viviente de que Taehyung le había provocado alguna sensación placentera, y BeomGyu no supo por qué, pero se sintió celoso.
Muy celoso.
—Vámonos — les dijo Gyu a los demás al tiempo que agarraba a Jungkook del brazo y se lo llevaba primero hacia el patio. Tocaba educación física y aquel día tenían examen de Voley.
—Es un pesado — se quejó Soobin.
Como siempre, Tae pelirrojo y HueningKai se mantenían al margen de la situación. No podían hablar mal de Kim Taehyung, sabiendo lo que habían hecho hacia un tiempo.
— Me encantaría ponerle una denuncia perimetral — Dijo Yeonjun mientras entrelazaba sus dedos con los de su novio — Lástima que no tenemos nada para hacerlo.
—No es para tanto — Susurró Jungkook.
Gyu lo miró molesto y Soobin se dio cuenta del gesto. Cuando BeomGyu se ponía celoso, normalmente solía abrir sus fosas nasales más de lo normal, y eso era justamente lo que estaba haciendo.
—Iré a cambiarme — Informó Gyu tomando de su mochila el uniforme de vóley que consistía en uno negro con líneas anaranjadas.
Es que el profesor de educación física era fan de Haikyu y le había ordenado a sus estudiantes que compraran un uniforme igual o parecido al del anime y que no aceptaba quejas por respuesta.
Jungkook también agarró su uniforme y fue a cambiarse a los baños, en cambio Gyu fue a los vestidores.
Jungkook fue al baño, se cambió y se lavó la cara, pero al querer irse, Kim Taehyung lo interceptó en el camino.
— Hola, dulzura — Le dijo cerrando la puerta.
— ¿Qué quieres cara de mono?
Taehyung se mordió el labio. El insulto le hacía gracia.
—Una cita.
Jungkook alzó la ceja. Ahí iba de nuevo con lo mismo.
—No me apetece tener una cita con un abusador, manipulador y amenazante chico.
Taehyung gruñó bajito y Jugnkook lo miró, eso había sonado más como un gemido lastimero.
—Quizás manipulador y amenazante. Pero no soy abusivo.
Jungkook lo observó con seriedad.
—Insistes hasta que persuades a la otra persona y te dice que si. Yo considero eso como abuso.
A Taehyung le daba en el ego, en el orgullo y en la dignidad. Le reventaba las pelotas que lo llamara así.
— Te equívocas. Pocas veces debo insistir hasta el cansancio. Tu amiguito es una excepción. Gyu no sabe lo que se pierde.
Jungkook lo miró de arriba abajo, haciendo énfasis en sus partes bajas.
—Pues yo opino que no se pierde de mucho — Jungkook se ató el cabello y Taehyung observó que sus mechones azules estaban desteñidos —Seguro lo tienes muy pequeño y por eso te acuestas con tanta gente. Para compensar lo que te falta.
A Taehyung casi se le cae la mandíbula al oír tal insulto. Él odiaba que le llevaran la contra, pero que ese maldito chico nuevo con apariencia de porcelana pero con carácter fuerte lo desafiara...
Lo ponía cachondo.
Muy cachondo.
—Mi pene es cuanto menos pequeño. ¿Estás deseando verlo, no es así, Jeon Jungkook?
Taehyung lo desafiaba con la mirada y Jungkook solo pudo tragar saliva de los nervios. El mayor alzó las cejas. Jungkook le había dicho que podría conseguir todo menos a él.
Y Taehyung le iba a demostrar que lo podría hacer caer en sus redes, lo que no sabia era que él se terminaría enredando.
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Una cita con el FuckBoy |Tk| ✔
Novela JuvenilA Taehyung le gustaba bromear, tener amantes de una noche (con suerte tres noches) y sacar malas calificaciones. Era un maravilloso desastre. En cambio, a Jungkook, el estudiante nuevo, le gustaba sacar buenas calificaciones, participar de eventos...