012

575 110 64
                                    

Capítulo 12:

¿Por qué te vas?


Lo despertó la intensa luz del sol que se colaba por la ventana, distinta a las habitaciones de tercera clase, el camarote de Erwin era espacioso e iluminado, con blancas cortinas que permitían que los rayos entraran a su antojo y le molestaran en la cara.

Dos brazos fuertes lo envolvían y una pesada pierna se enredaba a la altura de su cintura ¿Habían pasado así toda la noche? Erwin lo abrazaba cuál almohada y dormía aún plácidamente, su cabello el cuál siempre lucía impecable esta vez le caía por la frente sin productos que lo mantuviera en su lugar. De esa manera, parecía más jóven, quizás de la edad de Levi.

Quería moverse, aunque le pesaba la posibilidad de despertarlo, un pequeño pánico le invadió al imaginar que por la puerta pudiera entrar alguien tarde o temprano, así fuera sólo una mucama, no podía permitir que los mirarán así.

-Erwin. -Lo llamó y con fuerza se levantó, el mencionado soltó un quejido y se llevo una mano al rostro con una pequeña sonrisa.- ¿Qué? -Le Interrogó.

-Me gusta que me llames por mi nombre, nadie lo dice cómo tú.

Levi apartó la mirada.

La noche anterior, no había pasado nada, nada que se espera cuando dos personas que no están casadas duermen en la misma cama.

Juntos habían subido al camarote de Erwin, habían bebido un poco y cuando Levi pensaba marcharse, Erwin lo detuvo y le pidió pasar la noche allí, las primeras respuestas fueron negativas, pero entonces la cercanía los llevó a otras acciones que estuvieron a punto de desencadenar en lo que Erwin deseaba desde aquel primer beso, sin embargo, no ocurrió...

-Levi. -La voz de Erwin lo sacó de sus pensamientos.

-Me tengo que ir, pasé toda la noche fuera, mis compañeros deben estar preocupados.

Con rapidez tomó sus prendas y empezó a vestirse, en el baño se limitó a lavar su cara, tendría que darse un baño en su cubierta, había sudado toda la noche al no estar acostumbrado a tan largo contacto.

Erwin lo observaba en silencio, intentando comprender ¿Por qué? ¿Por qué todavía Levi huía de él?

Por esa ocasión, se abstuvo de preguntarle y sólo dejó que se marchara, pensando con una pequeña sonrisa, que al menos aquél había sido un enorme paso, sólo debía dar oportunidad a Levi de asimilar sus sentimientos, de digerir quién era en verdad.

Pero... ¿Qué ocurriría entonces al bajar del barco? ¿A caso sería de nuevo lo mismo? ¡No podía permitirse eso! ¿Qué tal si Levi en tierra firme se alejaba? De esa manera no habría oportunidad de buscarlo, el barco se convertiría en la gran ciudad, lleno de tantas personas que sería tarea imposible volver a encontrarlo a él, si no actuaba pronto todo aquél viaje habría sido en vano, despediria en el altar a su primer amor y tras conocer a su verdadero amor lo dejaría ir para no volverlo a encontrar.

La sonrisa de su rostro se borró.

Levi no podía evitar reparar en los acontecimientos recientes, no sólo pensaba en la noche anterior, si no en todo lo que había pasado, aquél viaje le había despertado tantas cosas, eran demasiadas emociones con las cuales no sabía lidiar. Su mente había trazado un objetivo claro, pero algo dentro suyo le suplicaba recapacitar en lo que pensaba hacer, no era la razón abogando los riesgos de el plan, era una patética parte de sí que no deseaba traicionar a Erwin Smith.

-Levi. -La voz de Furlan lo hizo recuperar compostura.- ¿Estás seguro de que podremos hacerlo?

-Claro que podremos. -Habló con firmeza.- Esta noche yo voy a mantener ocupado a Smith y a sus compañeros mientras tú e Isabel se cuelan en ese camarote, el collar vale una fortuna, lo ví con mis propios ojos. -Recordó la cena, recordó a Erwin sentado a su lado, recordó su sonrisa, recordó su sonrisa a esa mujer.- Furlan tienes razón, en este barco está nuestro boleto a la libertad.

Aquella decisión era la correcta... Debía serlo ¿No? Estaba hablando del futuro de sus amigos, al llegar a Nueva York, al bajar de ese barco, todos sus problemas con el dinero estarían solucionados, invertirian el dinero en algo, incluso podría enviar a Isabel a la escuela, a ella que aún estaba en edad de cursarla.

En cuanto a Smith, quizás en él quedaría el amargo recuerdo de ese desagradable músico callejero que lo engañó para robar a su amigo, eso era, Smith lo odiaria, y si lo odiaba lo querría lejos, él debía estar lejos de Erwin, no podían estar juntos, aquél amor era una aberración que Levi no podía aceptar.

El dinero no le importaba en verdad, quería un pretexto para que ese rubio lo odiara y tal vez así, sería más sencillo de olvidar.

14 de abril de 1912.

Mientras escribía se publicó por accidente, lamento si la notificación les llegó doble y en general lamento estar siendo un desastre para las actualizaciones, prioricé mi admisión a la universidad, pasé un exámen pero aún me falta una segunda parte de la selección, pasando esta semana espero poderme llamar universitaria, gracias a quienes han llegado aquí con tanta paciencia, los aprecio mucho. 

Lover Boy // EruRi (Titanic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora