Harry Potter, El Espíritu del Lobo

21 El Cáliz de Fuego

-Creo que deberíamos ir hacia el Gran Comedor –dijo Harry mientras guardaba su miembro en sus pantalones-.

Viktor tragó el líquido en su boca antes de contestar. -Por mi estaríamos haciendo el amor -contestó mientras arreglaba su túnica-.

-No me tientes cariño, no podrás escapar del lobo –dijo Harry agarrándolo del cabello-. Обичам те, моят сладък търсач.¹

-Como te adoro cuando me hablas sensualmente en búlgaro -respondió en inglés Viktor-. Vamos, llegaremos tarde a la presentación -dijo tirando al azabache mayor de un brazo-.

Ambos adultos jóvenes corrían alegremente por el corredor hasta la entrada del Gran Comedor, los alumnos de Beauxbatons y Durmstrang los quedaron mirando por un largo tiempo, Harry se despidió con un asentimiento antes de entrar al comedor, dirigiéndose hacia donde estaban sus parejas comiendo.

Se sentó tranquilamente ignorando las miradas de los alumnos de Hogwarts, quienes lo miraban de diferente manera al ser quien llevase al famoso Viktor Krum al castillo. Oliver y Sam se sentaron a su lado, ambos chicos estaban impresionados por la desaparición de su pareja por algunos minutos.

-Entonces... ¿Cómo se conocen Krum y tú? -preguntó Sam mientras trataba de ocultar sus celos-.

- ¿Celoso? -preguntó burlonamente mientras lo miraba con una sonrisa-. Lo conocí en el Mundial de Quidditch, obtuve un pase VIP tras ayudar a su entrenador -explicó sacaba un chocolate de mente del bolsillo y se lo metía a la boca-.

-Es por eso que no estabas en la tienda cuando volvimos –dijo Helio sentado a unos puestos más arriba-. Había pensado que te escapaste con alguno de los chicos al bosque -comentó mientras tomaba un sorbo de su jugo de calabaza-. Sigo sin entender por qué sirven un jugo tan dulce.

Todos quedaron mirando a Helio quien siguió bebiendo su jugo como si nada. -De donde lo sacaste -consultó Hermione mirando a su amigo como si le hubiese salido otra cabeza-.

-Dobby me lo dio antes de entrar -explicó sin dar más detalles-.

-Suertudo -masculló Harry mientras se echaba otro chocolate de menta a la boca-. Pero así fui como conocí a Viktor Krum, ¿contentos?

-Aún no, pero podemos con eso –dijo Marcus mientras le quitaba un chocolate a Harry-.

[...]

Las delegaciones acababan de hacer sus presentaciones hace unos minutos, Beauxbatons terminó sentandose en Ravenclaw, mientras que Durmstrang en Slytherin. McGonagall les dio nuevamente la bienvenida antes de dar comienzo al Torneo de los Tres Magos.

Las mesas se llenaron de alimentos de todo tipos, platillos típicos de cada uno de los paises donde residen los alumnos de las escuelas durante el verano. Harry se encontraba rodeado por sus parejas, quienes disfrutaban alegremente todos los alimentos que estaban a su alcance.

Por otro lado, a Viktor le tocó sentarse junto a Draco Malfoy, quien no dejaba de llamar la atención del buscador búlgaro y fallando en el intento.

La cena fue de lo más llamativa en la historia del colegio, pero todo tenía un termino y ese fue cuando el reloj del castillo marcó casi las diez de la noche, momento en el cual la directora de Hogwarts se levantó de su asiento.

-Ha llegado el momento -declaró la anciana directora con voz profunda-. El Torneo de los Tres Magos va a dar comienzo. Antes de que el señor Finch traiga el cofre me gustaría dar algunas palabras.

》Existe un procedimiento que debemos seguir. Pero, como de costumbre, debo dar la bienvenida a quienes nos acompañarán desde hoy hasta el termino del Torneo. Para quienes no los conocéis, permitanme presentarles al señor Bartemius Crouch, director del Departamento de Cooperación Mágica Internacional, y al señor Ludo Bagman, director del Departamento de Deportes y Juegos Mágicos -hubo aplausos para ambos hombres-.