¡No me jodas, Baji! || Baji Keisuke x OC

Capítulo 6: De vuelta.

[ MIYAMURA ]

Tenía una leve idea de lo que Baji quería hablar conmigo, era muy extraño. Sin embargo supuse que seguramente no se trataría de lo que yo pensaba, aunque resultó ser que al final sí lo fue.

—En realidad era sobre el chisme de hace un rato... —me dijo— No sabía que dabas espectáculos.

Recordé las palabras de los chicos cuando estábamos en la mesa. Yo tenía razón, Baji quería hablar sobre eso.

—Pero afortunadamente yo no soy la única que los da —respondí. Esperaba que recordara que él también estaba dando espectáculos en esa fiesta y nadie lo criticó por ello.

—¿Podrías explicarme por qué de entre quinientos tipos en la fiesta decidiste besar a Mitsuya? Ahora con todo eso muy seguramente le gustas, qué puto problema.

—¿Es un problema? —me crucé de brazos— ¿Y por qué? Explícate, anda.

—Porque es todo un rollo el asunto del contacto —me explicó—. Va a formarse un problema. Pongámoslo así... ¿Por qué crees que Emma y Draken aún no salen?

Él se cubrió la boca, al parecer no debía de haber dicho eso.

—Ya la cagué.

—¿Por qué? ¿Qué acaso no está permitido eso? —pregunté en una risa— Y no te preocupes, ya estaba enterada de lo de Emma y Draken.

—Menos mal. Y no, no está permitido —contestó aliviado—. Ese tipo de cosas lo único que logran es hacer que los idiotas no se enfoquen. Y si a eso le sumamos el hecho de que viven bajo el mismo techo, entonces es peor.

—No creo que sea un problema. Cuando pasó lo del beso, Mikey lo vio —le conté yo—. ¿De verdad es tan estricta la regla?

Asintió muy seguro de sí.

—Ahhh, ¿de veras, Baji? —me burlé— ¿Y entonces por qué me besaste dos veces si esa regla es tan estricta?

—Porque a diferencia del idiota de Mitsuya, yo sí puedo besar a alguien sin comenzar a sentir... cosas —me dijo en una sonrisa victoriosa.

—Ay, ajá —me burlé.

Él me miró mal.

—Y Mitsuya no es un imbécil —respondí mientras tecleaba—. Él ha sido muy gentil conmigo, además es bastante dulce.

—Eres bastante predecible.

—¿Predecible? —solté ahora mirándolo.

—Ya lo puedo notar —continuó con su tono hostil—. A juzgar por tus palabras, apostaría a que terminarías enganchada de cualquier tipo que te diga algo mínimamente dulce.

¡Debí haberlo visto venir desde hace un rato! ¿Le voy a dar el gusto? ¡Claro que no! Enfócate, Miya. Lo que Baji busca es que te sientas mal porque está molesto y lo que menos quieres ahora es que algo tan tonto como esto te distraiga. Los dramas no son importantes ahora, sino terminar la tarea y tus pendientes.

—Como sea, Baji. ¿Ya terminaste? Sal de aquí ahora —dije señalando la puerta.

De verdad no quería discutir con él, sólo me dispuse a seguir con mi tarea. No le daría el gusto ni de seguir pensando en la situación, así que sólo seguí con mi tarea.