¡No me jodas, Baji! || Baji Keisuke x OC

Capítulo 8: Krono.

[ MIYA ]

—Debes venir con nosotras, ¡por favoooooor! Anda, ¿sí? —me animó Emma.

—Ayyy, no sé —dije mientras cepillaba mi cabello. Justo había salido de ducharme.

—Vamos, anda —soltó Hina—. Te va a gustar, te lo prometemos, el lugar es increíble.

Sobre el plan de hoy, habría una reunión en Krono, ese lugar solía ser bastante concurrido hace algunos años, dejó de serlo desde que aparecieron las primeras pandillas en los condados cercanos. Krono era un salón de eventos enorme que pronto quedó abandonado y, con el paso del tiempo, se volvió un punto perfecto para las fiestas clandestinas.

Baji, Mikey y los gemelos se habían ido al menos dos horas antes. Las chicas querían que yo estuviera ahí, así que decidí que sería bueno asistir.

Recordé que no había hablado con Baji sobre el beso de ayer y, a decir verdad, había estado evitando siquiera mirarlo a los ojos desde esta mañana. ¡Me sentía bastante rara! El beso de ayer se sintió bastante distinto, aunque supongo que fue por mi estúpida iniciativa.

—Las acompañaré hoy —acepté en una sonrisa.

Estar en el cuarto de Emma maquillándonos, vistiéndonos, charlando y cantando canciones... ¡Cómo me gusta arreglarme antes de ir de fiesta!

Emma eligió un top rojo y unos jeans entallados como atuendo de la noche, mientras que Hina utilizó un rómper corto de lunares blancos y fondo negro. Yo decidí usar un top de manga larga en color negro y unos pantalones en cintura alta del mismo color, como zapatos utilicé unas botas de combate. Las chicas comenzaron a maquillarse, así que hice lo mismo: elegí un delineado en color negro y un labial rojo. Después de maquillarme, rocié algo de perfume en mi cuello y distintos puntos de mi cuerpo, al final coloqué uno de mis anillos en mi mano derecha.

Las tres bajamos las escaleras una vez que estuvimos listas y nos dirigimos a la cochera, Emma se montó en la moto de Draken y Hina subió a la de Takemichi.

—¿Lista? —habló Emma haciendo un gesto con su mano.

—¿Te llevo? —dijo Mitsuya a mi lado izquierdo, estaba sonriéndome.

Volteé a mirarlo, ¡se veía muy atractivo! Él llevaba puestos unos pantalones grises con un precioso patrón de cuadros, una camisa de manga corta en color negro y una cadena con una cruz como el arete que siempre llevaba puesto. Lucía genial.

—Mejor decirlo ahora antes de que Smiley y Chifuyu quieran molestarme con eso —me dijo—. Estás bastante linda hoy.

Solté una risa, en realidad me había emocionado un poco el escucharlo.

—Muchas gracias, tú te ves increíble hoy —lo halagué de vuelta.

Pronto todos arrancaron las motocicletas. Yo subí a la de Mitsuya y me sujeté de su torso, olía delicioso. La noche era fresca, el asfalto estaba mojado por la lluvia de esta tarde y el viento pegaba en mi rostro con fuerza. Mitsuya iba a buena velocidad, pronto alcanzó a los demás y nos acercamos a Krono luego de unos minutos de camino.

Al ser una zona abandonada, estaba rodeada de frondosos árboles. Era un bosque malditamente tenebroso, pero hermoso a la vez, cruzamos aquel tramo de árboles y pronto llegamos al estacionamiento de Krono. La pintura de los espacios para aparcar estaba a punto de desaparecer por lo vieja que era y su falta de cuidado.