¡No me jodas, Baji! || Baji Keisuke x OC

Capítulo Final: El Inicio.

ESTE ES EL FINAL OFICIAL
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[ MIYAMURA ]

Había llegado al templo abandonado hacía ya diez minutos, las únicas personas que estábamos ahí, éramos tres: Hinata Tachibana, Yuzuha Shiba y, por último, yo. Hoy era siete de mayo, cinco años después de que enterramos la cápsula del tiempo.

Había un aura bastante extraña en el lugar, todo lucía peor que antes e incluso el triple de deteriorado. El día estaba oscuro y las nubes realmente daban al ambiente un sentimiento de total melancolía, era todo lo contrario a como imaginé que sería nuestro reencuentro. En mi mente tenía otra idea de lo que sucedería el día de hoy: Smiley y Angry pelearían con Chifuyu por ver quién tendría los mejores recuerdos, Draken y Emma estarían comprometidos o tal vez ya casados, Mikey se burlaría de las cosas que pusieron dentro de la cápsula y Baji me mostraría lo que había dentro de su caja de recuerdos.

Las chicas ya habían revisado sus respectivos recuerdos, el resto de las cajas las dejamos sin abrir ya que no nos pertenecían.

—¿Ellos no vendrán? —le pregunté a las chicas.

—No lo creo, están muy apurados ahora con sus negocios, ya sabes... El restaurante de ramen, el taller, el local de tatuajes... —respondió Hina en una sonrisa, pero yo la conocía perfectamente bien como para saber que esa sonrisa era falsa.

—Entiendo —le sonreí de vuelta.

En mis manos llevaba un sobre que encontré dentro de mi caja, un sobre que yo no había puesto ahí. Era un sobre con mi nombre, el cual era de parte de Baji, fue bastante extraño. Me preguntaba en qué momento lo habría escondido en mi caja para que yo no lo notara.

—¿Y eso? —preguntó Yuzuha mirando el sobre— ¿Vas a abrirlo?

—No lo sé —respondí algo anonadada—. Oye, Yuzuha, no tienen que esperarme... Llegaré a tu apartamento en un rato, ¿de acuerdo? Llegué tarde y todavía tengo que revisar todas mis cosas, así que no se preocupen.

—¿Segura? —me preguntó.

—Claro —le sonreí—, de todas formas tengo que pasar por mi boleto de tren luego.

—De acuerdo, de acuerdo —me contestó—. Te esperamos allá entonces.

—Adiós, Miya —me dijo Hina.

Pronto desaparecieron de mi vista y me quedé a solas en ese antiguo templo. La carta que llevaba en mis manos era de parte de Baji, del Baji de hace cinco años, el Baji del que me enamoré perdidamente: mi ex novio. Mil recuerdos invadieron mi mente en ese momento...

Mi vida realmente cambió desde que conseguí el empleo en Hiroshima. Mi relación con mis padres estaba mejor que nunca, gané más dinero del que tenía contemplado. También pude crecer en la empresa en la que trabajé y, finalmente, logré sentirme la mujer exitosa que siempre había querido ser. Todo marchaba perfecto, pero había una sola cosa que no funcionaba: lo mío con Baji. Las relaciones a distancia son difíciles cuando la situación es complicada. Él había conseguido trabajo en una empresa de marketing bastante reconocida en Tokyo, subió de puesto bastante rápido, eso me había llenado de felicidad y de muchísimo orgullo.

Mi empleo en Hiroshima consumía todo mi tiempo y era cada vez más demandante. Mis tiempos no me permitían charlar con Baji como antes, las llamadas y los mensajes eran menos a medida que el tiempo pasaba, todo debido a nuestras rutinas. Nuestros horarios no lograban empatar y sólo podía verlo un par de horas el fin de semana gracias a que vivía lejos de él. Lo intentamos un tiempo, incluso Baji sugirió la idea de vivir juntos, pero alguno de los dos tendría que perder su trabajo para que eso pasara, así que no era una buena opción. Luego de un lapso de tiempo en el que no hubo soluciones, decidí que terminaríamos, todo fue en buenos términos o al menos eso creí hasta que un día fui bloqueada por Baji de absolutamente todos lados. No estaba en ninguna de mis redes, incluso bloqueó mi número. Cortó toda comunicación conmigo de manera abrupta, lo cual me lastimó, pero lo entendí. Lo último que supe de él fue porque se lo pregunté a Emma poco tiempo después de que Baji me bloqueara, ella me dijo que él estaba bien, así que eso me mantuvo tranquila por las semanas siguientes.