El Arte Abstracto de Kevin Miller [Reedición]

Un punto No final

—No pudiste quedarte callada —dice Kevin al estar cerca de su jeep. Su tono de voz es frío—, solo te pedí eso.

—¿El hecho de dejarme besar no fue suficiente para ti?

—No lo entiendes Blake.

—Y tú tampoco Kev, literal, ante tu hermano quede como tonta, ante la chica de igual manera, creen que soy un pasatiempo solo por permitir que me hayas besado, y no sé con que fin lo hiciste, pero fui yo quien quedo mal.

—¿Quedar mal? No tienes idea de lo que vendrá después de esto, yo no esperaba que Oliver estuviera aquí, al menos lo que hice fue por Lorraine.

Ante sus palabras y expresión me queda muy en claro para donde va esto, y puede que termine mal, de nuevo, pero no pienso quedarme callada.

—Es ella, la chica que amabas es Lorraine.

—No sigas —me advierte.

—No puedo creer que te prestes a esto Kevin, es demasiado bajo para alguien que implora solo ser llamado por su apellido, pero claro, acepta ver a su ex y a su hermano juntos, en el término que sea, pero juntos, y lo peor, es que te esfuerzas en hacer algo solo para llamar su atención.

—Te equivocas —dice con voz amenazadora.

—¿Equivocarme? —suelto una risa—, ella dijo que estaban en Paris, obviamente juntos, pero no resulto porque yo te llame, eso te distrajo y solo lo utilizaste para dejarla, haciéndole ver que hay alguien mas importante que ella cuando lo único que buscabas era llamar su atención y traerla justo aquí. Pero lo que no esperabas es que llegara con tu hermano, ¿verdad? Blake Carter volvió a ser de utilidad para ti, y a cambio, observaste el dibujo que te deje, así hacías un intento por quedar bien conmigo mientras atraías a tu chica.

Kevin solo se dedica a mirarme, su expresión es tan intimidante, pero no puedo dejar de mirarlo mientras siento un nudo en la garganta.

—¿Sabes? —digo con dificultad— yo ya estoy cansada de ser siempre usada al gusto de todos.

—Blake…

—No vuelvas a cruzarte en mi camino, yo ya cumplí con lo que me correspondía, que era escribir una historia para tu hermano, ahora lo que te corresponder es solo alejarte de mí.

Doy media vuelta, mis pasos se vuelven lentos mientras un par de lagrimas comienzan a caer por mis mejillas. He sido yo la que ha perdido demasiado con esto, tal vez no puedo detenerlo, pero al menos quisiera ser fuerte, poder decir no, y evitar caer.

—Espera Blake —dice Kevin al alcanzarme—, yo te llevo a casa.

—Es lo menos que puedes hacer —digo sin ganas, más no dejo de caminar—. Te espero en el portón.

Kevin regresa por su jeep para alcanzarme justo donde le dije, al subir y abrocharme el cinturón la sensación es distinta a como lo fueron las veces anteriores en que tuve oportunidad de andar con él en su camioneta.