El Arte Abstracto de Kevin Miller [Reedición]

Arte Abstracto

—¿Qué es arte abstracto? —pregunto no teniendo ni la más mínima idea de que es eso, por mucho que vea la pintura y los colores.

Kevin se quita los lentes y me da una mirada seria, profunda, como si lo que hubiera dicho haya sido algo indebido, un error, o hasta algo peor, pero aún así, al mirar sus ojos y haciendo de lado su expresión puedo ver las leves ojeras que se han formado.

—Mejor olvídalo —me responde a secas—, bien, ahora quiero saber porque no has escrito —dice mientras toma de nuevo la primer pintura y se dirige a una habitación, esta ocasión no me pide abrirle la puerta—. Habla Carter.

Suelto un suspiro.

—Te comenté solo hace unos días el título,  ya tengo algo escrito, un total de veintiún capítulos, son algo cortos, aún así estoy en eso.

—Necesito leerlo —dice al salir de la habitación, junto con un cuadro blanco—, ¿cuándo podrás darme el escrito?

—No lo sé, tal vez por la tarde pueda enviártelo, o tal vez podría ser justo ahora, pero como estoy aquí, en tu casa, y no sé porque.

Su ceño se frunce, sus ojos me miran y tuerce los labios, pero no dice nada, regresa a la habitación donde sacó el cuadro, se tarda unos segundos, después sale con una caja, la deja sobre la pequeña mesa que está entre los sillones y comienza a sacar su contenido, varios frascos de pintura de colores y unos pinceles de diferente tamaño.

—¿Qué haces? —pregunto ante lo que veo y no tengo idea de que planea, a menos que…

—Me aburre tener que hablar contigo y explicar el porqué de cada cosa, así que solo siéntate y mira, no hables.

Dudosa tomo asiento en uno de los sillones, dejo mi mochila en el piso y me dedico a observarlo. El sólo asiente, sube las mangas de la sudadera roja, así puedo notar una pulsera negra alrededor de su muñeca, ésta tiene varias piezas pequeñas que no alcanzo a ver qué son. Se da la vuelta para encender un reproductor de música, me sorprende escuchar que las notas de un artista como Beethoven le ayudan a Kevin a concentrarse, creí que con Metallica tenía suficiente. Quiero decir algo al respecto, pero mejor guardo silencio.

Kevin siendo cauteloso toma un pincel y comienza a trazar líneas imaginarias sobre el cuadro blanco, yo solo me dedico a mirarlo, y es extraño, porque no solo me enfoco en mirar lo que hace, sino en sus movimientos, por primera vez estoy viendo a Kevin Miller de perfil, en como mueve ligeramente los labios, y por segundos los deja entre abiertos, la manera en que su pecho sube y baja, como mueve su muñeca de un lado a otro mientras el pincel parece danzar sobre el cuadro, que ahora tiene leves toques de color azul, el par de mechones de su cabello negro caer sobre su frente y sus ojos, vaya, la manera en que sus ojos observan y se centran en lo que hace. Por primera vez estoy mirando a detalle a Kevin, no había notado lo atractivo que es.

Tampoco es la gran cosa, pero es extraña la manera en que las cosas suceden, antes solo lo veía fruncir el ceño y darme la peor de las miradas, y llegar al punto de sentirme incómoda, ahora es distinto, veo algo en él que no tuve oportunidad de ver antes, o tal vez su actitud hacia mi persona ha evitado eso.