|Tory Stark| [Marvel]

09. |▪La mayor creación de Howard▪|

Capítulo 09. |▪La mayor creación de Howard▪|

Ambientación: Iron Man 2.

Nota/Advertencia: Ninguna.

Victoria estaba consciente de que lo más probable es que nunca haya terminado de conocer a Howard Stark. Es más, estaba segura de que ni siquiera se había acercado, y que a medida que pasaba el tiempo, olvidaba lo poco que creía saber sobre él. Usualmente, tener a esos recuerdos reprimidos en la extensa laguna de su mente le resultaba por demás conveniente, pero había ocasiones, como esa, en dónde no podía evitar recordar ciertos aspectos que caracterizaban a tan extraño y enigmático hombre frío, como la forma en que organizaba sus cosas importantes. Victoria imaginaba que cualquier agente que se hubiese encontrado esa maleta en el rincón más oculto de las bodegas de SHIELD habría pensado que, en realidad, no se trataba de nada relevante, y por eso estaba allí, abandonado y perdido en el tiempo. Pero el hecho de que cada cosa estuviese tan bien conservada le hacía saber a Tory que Howard lo había querido así. Desde los viejos y frágiles recortes del periódico hasta las bien conservadas películas en cinta, todo estaba dónde debía estar y a la disposición de quién debía verlo.

Había cosas que con solo verlas te demostraban que le pertenecieron a Howard Stark. Tony nunca no era tan consciente de ese hecho hasta que volvía a tener algo suyo entre sus manos, lo cual realmente nunca sucedía salvó en las peores situaciones. Quizás estar tan cerca de la muerte ameritaba revivir un poco los viejos recuerdos de su padre, incluso si era en vano, o al menos eso pensó Tony cuando puso a rodar la primera película.

Se sentó junto a Victoria y la miró de reojo, esperando apreciar la reacción de su rostro, pero no obtuvo nada a cambio. Inexpresiva y pensativa, Victoria se acomodó en su asiento y sólo observó, fría y analítica, lo que sea que el fantasma de Howard pudiese ofrecerles. A veces se preguntaba si ella realmente sentía algo cuando veía o escuchaba hablar de Howard, pero a juzgar lo sucedido en el juicio con Hammer, estaba cada vez más convencido de que Victoria no lo extrañaba ni lo haría.

Tony lo comprendía, pues a sus ojos, su hermana valía mucho más que cualquier héroe o arma que su padre hubiese tenido intención de crear.

—Ahora todo es posible con la tecnología...—la voz clara y correctamente pausada de Howard les dió la bienvenida a una nueva cinta. Ambos hermanos estaban muy concentrados en las notas encontradas en la maleta, por lo que no estaban viendo al hombre de mediana edad que hablaba a la cámara, sino que solo lo escuchaban. De todos modos, Victoria no tenía ánimos de verlo—Mejor vida, buena salud y, por primera vez en la historia de la humanidad, la paz mundial. Soy Howard Stark, y todo lo que necesita para el futuro se encuentra aquí.

Victoria formó en sus labios una imperceptible sonrisa irónica que desapareció tan fugazmente como había llegado. En el tiempo en que la cinta había grabado, calculaba, era probable que Howard ya estuviera pensando en su proyecto del suero súper soldado. Quizás hasta ya estaba maquinando la idea de poder usar a Victoria para llevarlo a cabo. Sólo que no tenía en cuenta que la paz mundial nunca se lograría si le daban tanto poder a alguien que era tan similar a él.