CAPITULO 4: ¡ESO HABRA QUE VERLO!

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PVO ALESSANDRO

Braden estaba eufórico. Ser un vampiro desde luego ayudaba cuando necesitabas algo de fuerza extra. Pero en ese momento se notaba que Braden apenas la utilizaba. Quería que fuera una pelea justa. Y la verdad es que lo estaba haciendo muy bien. Estaba seguro que lo escogerían. Era un poco mas alto que la mayoría, pero también era ancho de hombros. Y tenia unas piernas largas y atléticas. Erik había venido para apoyar a su hermano. El y Katerina estaban gritándole palabras de animo mientras yo me repantigaba en el banco. Aquello desde luego no era lo mio.

El entrenador Jackson era un hombre curtido y malhumorado. No paraba de gritarles a sus alumnos que se esforzaran mas. Parecía un puñetero dictador. De repente grito “¡¡Brennan llegas tarde!!” y “¡¡Compton usted también!!”. Se notaba que estaba enfadado. Los dos chicos corrieron al centro de la pista y se pusieron a hacer los mismos ejercicios que el resto de sus compañeros.

-¡Hola!- grito una niña sonriente a mi lado. Era una niña realmente guapa, rubia con ojos claros. No sabia de donde había salido. Seguramente se habría escapado y la estarían buscando. Parecía emocionada.

-¡Aria! Te he dicho que no te vayas corriendo. Donde puñetas te has...- Rosslyn se acerco a las gradas del campo. Al parecer la pequeña le pertenecía. Se sorprendió al vernos, pero se dirigió a nosotros.- Aria, no te vuelvas a ir de mi lado.-le regaño a la niña. Luego se dirigió a nosotros con una sonrisa.- Veo que habéis venido a animar a vuestro hermano.

-Si. Lo esta haciendo muy bien. Y vosotras, ¿venís a ver al vuestro?-se notaba que Katerina estaba contenta de haberse encontrado con su amiga.

-Bueno, mas o menos. A mi hermana le han dado una sobredosis de azúcar y ahora me toca a mi cuidarla- nos giramos a ver como la niña se ponía al lado de Erik y comenzaba a bailar y a gritarle cosas a los deportistas.

-¡Animo Derek, animo! ¡Aquí sigo, ya te digo, esto es muy divertido!¡La sesión de tarde, esta que arde! ¡Soy Pedrito el del culo blandito!- a Erik le había dado un ataque de risa. En realidad nos la dio a todos. Que niña tan ingeniosa.

-Ross, te presento a nuestro hermano mayor, Erik. Erik esta es nuestra amiga Rosslyn- ella se acerco y le apretó la mano con una sonrisa. Oímos gritos del campo.

-¡Aria, cállate ya de una vez!- grito Derek enfadado.Aria le saco la lengua y siguió con sus rimas.

-¡Deshazte de la negatividad, no vale pa' na! ¡Feo como me asusto cuando te veo!¡Venga, levanta y tira de la manta! ¡Eres un pelota y eso a mi me rebota!

-Tu hermana es muy divertida.- Ross se volteo a verme. Al parecer estaba un poco avergonzada por la actitud de sus hermanos. Intente tranquilizarla.- Si te sirve de consuelo, mis hermanos hacen cosas peores y no son tan pequeños- me sonrió como respuesta.

-¿Habéis venido solos? ¿Y tus padres?- pregunto Katerina.

-No... emm... mis padres murieron cuando Aria tenia un año. Vivimos con mis tíos.

-¡Oh! Vaya lo siento. Yo no quería...

-No, tranquila. No pasa nada.- la interrumpió Ross con una sonrisa.- Fue hace mucho. Mi padre solía venir a ver a Derek entrenar. Venia a todos sus partidos. Después íbamos a cenar todos juntos. Es como una tradición. Aun lo seguimos haciendo.

-¡Si! Vamos al restaurante de tía Lorey y nos pedimos una ración gigante de alitas. Mmm... me encantan. Soy la que mas come. La próxima vez podéis venir.- nos invito Aria con una deslumbrante sonrisa. Se había subido a los hombros de Erik. Mire a Rosslyn y esta asintió mostrando su acuerdo.

-Estaríamos encantados de ir con vosotras a comer alitas.- acepte la invitación y luego le sonreí de manera diabólica a Aria.- Aunque te puedo asegurar que nadie come tantas alitas como Ansel.

-¡¿Como?! Eso habrá que verlo...

Y así pasamos la tarde. Erik y Aria se habían echo muy buenos amigos. La pequeña se había pegado a el como una lapa y ambos gritaban rimas absurdas al campo. Mientras, Katerina, Rosslyn y yo hablábamos de cosas sin sentido. Ross nos contó que en dos semanas era su cumpleaños y el de su hermano. No me había dado cuenta de que eran mellizos. Eran tan diferentes. Estuvimos riéndonos durante mucho tiempo, contando anécdotas, siempre, claro esta, sin desvelar nuestra condición vampirica. Me di cuenta que la Rosslyn del principio había desaparecido. Se había soltado y ahora se veía a una Ross mas divertida y extrovertida. Tenia una sonrisa deslumbrante. En un momento de la conversación, deje de escuchar y me limite a mirarla mientras charlaba animadamente con mi hermana. Creí haber oído algo de que iban a quedar. Luego me enteraría. Hacia poco que había oscurecido y el entrenamiento había acabado. Aria se había quedado dormida en los brazos de Erik. Al ver que su hermano ya estaba en el coche, Rosslyn se despidió de nosotros, cogió en brazos a Aria y se marcho. Observe como dejaba a Aria en el asiento trasero. Antes de entrar en el coche se giro, me sonrió con timidez y entro en su coche, alejándose de mi.

PVO ROSSLYN

-¡Chicos a la mesa!- grito tía Lorey. Derek y Aria se sentaron en la mesa, mientras yo acababa de poner un par de platos y me sentaba. Tia Lorey y tío Alasdair se sentaron cada uno a cada lado y empezamos a comer. Hoy tocaba pasta a la boloñesa.-¿Que tal te ha ido en el trabajo, Alasdair? ¿Mucho curro?- pregunto tía Lorey mientras masticaba.

-Bueno, hoy he terminado de restaurar un Pontiac del 68. Mañana, Leroy terminara de pintarlo y en dos días, el dueño vendrá a llevárselo.- nos contó tío Al orgulloso.

-¡Vaya! Que guay. ¿De que color lo vais a pintar?- pregunto Aria contenta.

-Rojo con unas rayas negras en el centro. Seguro que queda chulo. ¿Como te ha ido hoy en el entrenamiento, Derek? ¿Dándolo todo?- alzo el puño para darle mas énfasis.

-Hoy hemos echo las pruebas para los nuevos integrantes del equipo. Al final solo han entrado tres: Jay Miller, Peter Roggers y el nuevo, Braden Mallory. ¡Ese tío es una maquina!- me alegre al saber que habían cogido a Braden en el equipo.- Mañana se lo diremos.

-Espero que los nuevos den juego al próximo partido. Los osos de Sanford son buenos.- dijo tío Al apuntando a Derek con el tenedor.

-¡Pero nosotros somos mejores!- exclamo Derek entusiasmado. Aria y yo nos miramos.

-Eso habrá que verlo... Y dejad ya de hablar de deportes ¿Que tal el día, Rosslyn?- tía Lorey no soportaba que se hablara de fútbol en la mesa.

-Bueno, pues...-comencé a decir.

-Rosslyn me ha presentado a sus nuevos amigos.- fulmine a Aria con la mirada.- Son muy divertidos. Y... tan... guapos. Creo que he encontrado al amor de mi vida.

-¿Así que habéis estado con los Mallory, eh?- dijo mi tía sonriendo. Ya sabia a donde llevaba aquello. Tenia que intervenir antes que tío Alasdair se pusiera en plan Papa Oso.

-Si. Nos hemos encontrado con ellos por casualidad. Estaban animando a su hermano, Braden, que estaba haciendo las pruebas para el equipo. Y hemos conocido a Erik, el hijo mayor. Aria se lo ha pasado muy bien con el.

-Si. Los he oído.- Aria le saco la lengua a Derek.

-¿El alto rubio que esta cañón?- dijo tía Lorey emocionada.

-Hemos hablado y nos lo hemos pasado bien. Ya esta. Nada nuevo- me metí un montón de espaguetis a la boca antes de que metiera la pata. Tio Al levanto una ceja y se recoloco en la silla. Aquello no auguraba nada bueno. Así que intente arreglarlo.- Solo son amigos. Bueno en realidad soy amiga de Katerina. Así que. La he invitado a que venga este finde. Así la conoceréis.- me metí otro montón de espaguetis en la boca y di por finalizada la conversación. En seguida, Aria estuvo charlando del cumpleaños que había tenido en clase y tía Lorelain de un cliente que había tirado el plato al suelo indignado por que los huevos tocaban las patatas. La noche transcurrió tranquila. Mientras tío Al acostaba a Aria, ayude a tía Lorey a recoger la cocina. 

Beaton HillsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora