Brad Gómez
No pude evitar mirarla, Alicia se dio cuenta pero era inevitable como cuando alguien se cae nunca se puede evitar voltear y mirar.
-¿Por qué la miras? -sonreí y la dirigí a un asiento para ver la boda.
América Salinas estaba muy bella como cualquier novia en el día de su boda, aún recuerdo cuando me casé con Raquel, todo fue por civil para ahorrarnos problemas sabíamos que cuando Harry cumpla 9 años entendería nuestra separación al final no pasó, por terminar enamorado de ella.
Ella estaba tan linda ese día, con una cola de caballo y su cabello tan largó y lacio, su vestido blanco, esa sonrisa blanca y no podría podría olvidar de ese primer beso. Claro después de esa noche, cuando dijo "Acepto" con una sonrisa y yo solo estaba serio.-Brad. -Alicia me dio un beso en la mejilla que me hizo -¿En qué piensas?
-En mi boda con Raquel.
-Yo no fui, no quería ver que dijeras "Si acepto."
-Era obligado Alicia. -besé su mano y ella sonrió un poco.
-Lo sé, pero... no quería oponerme, sabes que si lo hubiera hecho.
-Lo hubieras hecho.
-No podría. -me miró a lo ojos y me dieron unas ganas de besarla y abrazarla, jamás soltarla.
Jennifer James
No sé si me miró, no me atrevo a voltear, no me interesaba.
-¿Qué te dijo? -Luz y su tierna voz me habló abrazando a Franco.
-Que estaba bien.
-Tu hija es muy linda Jennifer, también que tiene una mamá muy hermosa como tú. -él sonrió, Franco era demasiado amable que eran de esos amigos que simplemente ya no hay.
-Gracias Franco.
-Cállense va a decir que si. -Katia dijo y si eso faltaba.
Cuando dijo acepto y se dieron el beso me recordó a mi boda, con Alejandro.
Harry Gómez
-¿Has hecho que? -Margarita me gritaba por lo de Maddie, nunca la conoció y ya me anda reclamando.
-Ya Margarita, basta.
-¿Basta? Harry acabas de jugar con una mujer... ¿Qué acaso tus padres te enseñaron eso? ¿Qué acaso yo te enseñe eso?, que hayas hecho eso fue lo peor que pude esperar de ti. Harry jamás se juega con nadie, no importa quien sea, como sea, nunca se hace, lo que hiciste Harry es lo más bajo que pudiste hacer. -Margarita recogió el plato de la mesa.
-¿Pensaba que querías mi felicidad? mi felicidad tiene nombre y es Miranda.
-Yo quería tu felicidad, la deseo, pero lo que hiciste no hay perdón Harry, decir que esa niña te gusta, utilizarla solo para una venganza. -por parte tenía razón pero ¿Qué iba hacer? ya pasó todo, todo seguirá igual, nada cambiara -Es mejor que vallas a tu cuarto. -dijo al entrar a la cocina.
Subí las escaleras para ir a mi cuarto fue una tarde muy agitada.
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Miranda Sánchez: Mi vida me alegra que volvieramos, es lo más especial del mundo mi amor.
Harry Gómez: Si
Miranda Sánchez: ¿Pasa algo?
Harry Gómez: no mi amor, solo quiero dormir, te amo y cuídate bastante.