Capítulo 12: Conmovedor.

1.2K 97 5
                                    

Pasamos el resto de las vacaciones juntos y en lo que quedó de ellas Rosel no volvió a hablar, dijo que para él era más fácil comunicarse como siempre lo había hecho, por medio de la pizarra y por medio de mensajes, no me quedó más que respetar su desición. Una de esas noches estábamos haciendo tarea juntos, en su casa como de costumbre, y Luculia estaba haciendo algo en la cocina.

- ¡Ah! No entiendo cómo entiendes estas fórmulas, es demasiado difícil.

Se apuntó así mismo y negó con el dedo.

- Sé que para ti no, pero si yo fuera un poco más tonta sería una rubia americana en película de miedo.

Rosel soltó una carcajada pero fuerte, su mamá salió de la cocina incrédula ante lo que había oído.

- Abril tú... ¿Reíste así?

Negué con la cabeza mientras sonreía y apuntaba con la mirada a Rosel.

- Rosel... ¿Tú...?

- Eh... Sí.

Dijo Rosel. Poco a poco comenzaron a brotar lágrimas enormes de los ojos de Luculia mientras estos se ponían rojos.

- De-de hecho, pu-pude hablar el dí-día que regresé, pe-pero no lo habí-había hecho por...

Luculia se arrojó a sus brazos abrazándolo fuertemente, Rosel no la abrazaba.

- ¡Hijo! ¡Tenía años sin oír tu voz! - decía llorando a llanto abierto - ¡Es hermosa! ¡Te ha cambiado tanto! Es tan varonil pero sigue siendo tan tranquila y gentil.

Lo tomó por la cara acariciándolo suavemente mientras lo veía directamente a los ojos llenos de lágrimas, por primera vez ví que Rosel veía a alguien a los ojos además de a mí.

- Lo siento hijo, sé que no te gusta que te toquen o abracen, pero no lo pude evitar, ¡Soy tan feliz de oírte de nuevo!

Rosel asintió y la abrazó. Luculia sorprendida lo abrazó también y lloró nuevamente, y sinceramente a mí también se me salieron unas cuantas lágrimas.

Yo tenía algunos meses de conocer a Rosel y me sorprendí cuando oí su voz y aunque en ese momento estábamos en malos términos me sentí muy feliz de haberlo oído, me pregunto ¿Qué habrá sentido Luculia quién lo conoce desde que nació y lo ha adoptado emocionalmente como hijo y salvado la vida? Definitivamente es un sentimiento que jamás sería capaz de sentir.

No llores Abril, no llores.

.
.
.

Rosel continúo el resto de las vacaciones hablando poco a poco, algunas veces usaba la pizarra, en otras mensajes de texto, pero sobre todo, usaba la voz para comunicar sentimientos positivos, como por ejemplo su risa, las palabras te quiero, me gustas, linda, mi nombre, el de Luculia, y para decir hola, literalmente de su boca no salían palabras que fueran negativas.

Las vacaciones terminaron y cuando menos me di cuenta ya íbamos a regresar a la escuela.

- Despierta Abs, tu novio-vecino vino a verte.

Gritó July mientras me arrojaba una almohada.

- Bu-buenos días señora Sorní, ¿Se-se encuentra Abril?

Esa voz, me acerqué a las escaleras, ¡Era él! ¡Estaba hablando! Juraba que no volvería hablar con otra persona que no fuera Luculia o yo, mamá se veía sorprendida pues al igual que todos no lo había oído hablar desde que lo conocía.

- ¡Rosel! S-sí, claro.

¡Oh genial! Ahora era ella la que tartamudeaba.

- Pasa dentro de la casa, no te quedes afuera, Abril no tardará en bajar.

Él es diferente ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora