Capítulo 5

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Louis: Los minutos pasaban y yo seguía estancado en el punto uno. No entendía nada ya que todo estaba en italiano, no había ni una sola palabra en español. Me estaba volviendo loco.

Harry fue el primero en terminar, él me miró volviendo a su escritorio. El segundo en terminar fue Zayn, luego Niall y Liam. Pasaban y pasaban los minutos ya sólo quedaban cinco sin terminar el examen, incluyendome y yo no había ni escrito mi nombre.

─¡Vayan entregando sus exámenes!─ La vi mirar su reloj. ─Tienen dos minutos, así que vayan entregando.─ Ella se levantó del escritorio y caminó hasta mi pidiéndome la hoja, se la entregué en blanco y escondi mi rostro en mis manos.

Italiano te odio.

Harry se levantó de su asiento y caminó hasta mi. ─¿Cómo te fue?

─¿Qué como me fue? Le entregue la hoja tal cual como la profe me la entregó a mi. No entiendo una mierda, nunca estudié italiano antes.─ Estaba tan enojado conmigo, todavía tenía mi lápiz en la mano, lo apreté con tanta fuerza que se rompió.

─Hey, tranquilo... puedo enseñarte.

¿Lo había dicho en serio? ¿Él iba a enseñarme italiano? A pesar de que eso había sido muy amable de su parte, debía no aceptar. Pasar tiempo con él sólo nos llevaría a hacer algo que seguro después nos ibamos a arrepentir.

─Yo...

─Harry es el mejor en italiano.─ Llegó Niall abrazandome por los hombros.

¡MIERDA!

─Si querés voy a estar en mi habitación toda la tarde.─ Dijo Harry antes de darse media vuelta y caminar hasta la salida.

─Que no te intimide, es un buen chico.─ Zayn apareció delante de mí. Y no era que me intimidaba sino que le tenía unas re ganas a aquel chico desde el primer día que lo vi. Tenía miedo de llegar a hacer algo que no le gustara a Harry y a la mierda las clases de italiano con él.

Me levanté de la silla y caminé junto con los demás chicos hasta la salida del aula.

─¿Me acompañas al baño?─ Niall se giró a verme y yo asenti.

─Nosotros vamos a buscar a Harry.─ Habló Zayn antes de agarrar el brazo de Liam y alejarse.

─Vamos.─ Ambos comenzamos a caminar. ─Contame que pasó la madrugada del domingo cuando trajiste a Harry.

─No pasó nada.─ Mentí, no iba a decirle que dormí con Harry, no quería que me vean como un aprovechador de la situación.

─Claro que pasó algo. Te vi salir de la habitación de Harry aquella mañana.

─Te juro que no pasó nada, al llegar le dije que fuera a tomar una ducha, él salió a los pocos minutos, se acostó en la cama y se durmió.

─¿Y decidiste quedarte por voluntad propia a dormir con él?

─¿Qué querés de mí, irlandés?─ Me frene en seco y él se dio vuelta con una sonrisa.

─La verdad.

─¿Cuál verdad?

─¿Lo hicieron esa noche, no?

─¡Pero que mierda, Niall! Qué te importa si lo hicimos o no, es asunto mío y de él lo que haya pasado esa noche.─ Dije molesto, ya no podía seguir ahí, así que me di media vuelta y caminé hasta la cafetería para agarrar algo de comer.

Pasé al comedor y me senté en la única mesa libre que había en una de las esquinas. Tenía en mis manos una manzana, la miraba detalladamente pensando una y otra vez en la pregunta de aquel chico rubio. A él no le interesaba lo que hacía o no hacía con Harry, yo no le preguntaba con quien había tenido sexo aquella noche en la fiesta o con quién había estado.

─Imbécil.─ Murmure.

─Esta es mi mesa.─ Levanté la vista y pude ver a un chico alto y musculoso parado en frente de mi junto con sus demás amigos.

─Yo me la gané.─ Dije antes de sobresaltarme debido a la fuerza con la que había puesto la botella de agua aquel chico en la mesa.

─Te eh dicho que ésta es mi mesa.─ Su voz había salido muy intimidante pero aún así no me moví. ─No porque hables con esos chicos significa que te vas a sentar en donde te plazca. Ésta es nuestra mesa.

─¿Acaso la compraste? No podes andar sacando personas de una mesa solo porque vos te querés sentar aquí.

─Fíjate que si puedo sacarte.─ Rodeó la mesa y me agarró del cuello de la camisa haciendo que me levantara de la silla. ─¡No quiero que te vuelvas a sentar aquí me escuchaste!─ Exclamó antes de arrojarme al piso.

Vi a Harry caminar hasta aquel chico, no podía descifrar la expresión en su rostro, sólo me quedé observandolo.

─¡Hey, Brady!─ El chico se dio vuelta y Harry le dio un fuerte golpe en el rostro. ─¡No quiero que vuelvas a tocar a mi chico!

¿Su chico? ¿Qué? ¿Había escuchado bien?

─¿Estás bien?─ Me ofreció su mano para ayudarme a levantar, la tomé de inmediato. ─Vamos.─ Pasó su brazo por atrás de mi cuello llevandome a la salida del comedor.

─Un gracias no estaría mal.

─Puedo defenderme solo.

─¿Ah sí?─ Dejó de caminar parandose delante de mí. ─No podías ni pararte del piso.

─Esque... estaba más cómodo ahí.─ Él sonrió mostrando sus oyuelos.

─¿Por qué te separaste de los demás?

─El rubio es muy... metido. Se mete en asuntos que no le importa. Si así va a ser todo el tiempo no quiero estar en tu grupo.─ Pasé por su lado comenzando a caminar de vuelta al aula.

─¿Qué es lo que te dijo?─ Levantó la voz para que lo escuchara, me di vuelta a mirarlo, le hice una seña con la cabeza para que me siga.

Nos adentramos a aquella enorme biblioteca donde no había nadie, caminamos hasta el último estante de libros. Me detuve y me giré a verlo, voté todo el aire de mis pulmones para volver a llenarlos.

─Aquella noche de la fiesta cuando te traje, él me preguntó si había pasado algo entre noso...

─¿Y qué le dijiste?

─Qué no pasó nada pero el insistía con que si pasó algo, me preguntó si lo hicimos, en realidad lo hizo sonar como una pregunta pero no lo fue ya que estaba decidido que habíamos... ya sabes. Me enojé le dije que no le importaba lo que nosotros dos hagamos...

─No, no le importa.─ Él se acercó más a mí. ─Pero se perfectamente lo que estás haciendo, Louis. Intentas desarmar este grupo pero no vas a conseguirlo.

─¿Qué? ¿Cómo podés pensar eso? Todo lo que te digo es verdad.

¿Pero que le pasaba a este chico? Ademas yo no era capaz de romper amistades y menos de separar a un grupo de amigos.

─Niall nunca se metería en la vida de los demás y menos en la vida sexual de cada uno.

─Pero lo hizo...

─Pensé que eras bueno para nuestro grupo pero sos igual que los demás. No quiero que vuelvas a hablarnos.

─Bien, pero no quiero que te vuelvas a acercar a mí pidiéndome que vaya a abrazarte en la noche. Cobarde.─ Él no dijo nada y se dio medía vuelta caminando hasta la salida de la biblioteca.

Hasta el chico más lindo del colegio era un imbécil.

BOYS SCHOOL [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora