Capítulo 20

831 102 55
                                    

─Un segundo... el paciente ya no se encuentra aquí. Lo siento.─ Dijo ella antes de mirarme.

─¿Lo dieron de alta o lo trasladaron a otro hospital?

─La familia se lo llevó, lo siento, no puedo darles más información.

─Está bien, gracias.─ Le sonreí y me di vuelta a mirar a Louis.

─Mamá...─ Dijo Louis, se lo veía tan chiquito y vulnerable, quería abrazarlo y hacerlo sentir bien.

─Seguro lo llevaron a otro hospital, él va a estar bien, amor. Vamos al colegio, está haciendo frío.─ Dijo su madre y comenzaron a caminar hasta la salida, yo los seguí.

Llegamos al auto y nos adentramos en él. Louis se acurruco en el asiento, al parecer tenía frío.

─Lou, vení aquí.─ Le hice una seña y él no dudó en acercarse más a mí. Yo lo abracé.

─Por favor, no te vayas vos también.─ Me abrazó aún más fuerte.

─Creeme que eso no está en mis planes.─ Le dejé un beso en la cabeza.

Llegamos al colegio después de un largo viaje, Louis se había dormido con su cabeza en mi pecho.

El chofer bajó del auto para abrirle la puerta a la madre de Louis, ella bajó cerrando la puerta. Quedé a solas con Louis. No quería despertarlo pero debía hacerlo.

─Lou... Lou, llegamos.─ Lo moví un poquito.

─Cinco minutos más, mamá.─ Yo sonreí.

─Soy Harry.

─Harry... te quiero─ Me abrazó fuerte y yo solté una risita.

─Y yo a vos, pero tenés que despertarte, ya llegamos al colegio.

─Estoy despierto pero no quiero moverme de aquí.

─No me queda de otra que cargarte hasta la habitación. Vamos.─ Me estire para abrir la puerta.

─Harry, no quiero.

─Vamos, no vas a quedarte por siempre aquí.─ Él soltó un quejido y se separó de mí.

Salí del auto y Louis hizo lo mismo. ─Vamos.─ Lo cargue en mis brazos y se abrazó de mi cuello escondiendo su rostro en este.

─¡Harry!─ Vi a Niall correr hasta nosotros. ─Te estuve buscando toda la mañana. ¿Dónde estabas?

Dylan: Desperté en mi habitación, mi brazo derecho dolía demasiado. Estaba vendado y no podía casi moverlo.

─Despertaste.─ Sentí la voz de Luka, mi primo. ─¿Qué es lo que tenés en la cabeza para hacer semejante cosa? Tenés una vida por delante y tenés toda la herencia de tus padres para gastarla en lo que quieras, pero aquí estás quieriendo morir.

─Deja en paz a tu primo.─ Dijo mi madrina llegando a la habitación. ─Dylan, cariño, ¿cómo te sientes?─ Se sentó en la cama mirándome.

─¿Por qué sigo aquí?

─Porque aún sos joven para irte de aquí, sos un chico fuerte y sano que se preocupa demasiado por los demás, que hace lo que sea para ver felíz a la persona que quiere. Dylan no sos una basura como pensas y decís siempre. La muerte de tus padres nos afectó a todos, mucho más a vos, pero la vida sigue, tenés que mirar hacia adelante, centrarte en lo que querés para tu futuro. Sos fuerte y vas a salir adelante, yo voy a ayudarte, todos vamos a ayudarte para que estés bien.

─¿Y por qué no lo hicieron desde un principio? Después de la muerte de mis padres me dejaron solo. Nisiquiera venían a verme y ahora se preocupan por mí. ¿Dime, qué clase de familia deja a un chico de 16 años solo después de la muerte de sus padres? Me hicieron sentir que no les importaba. Ustedes me llevaron a esto. ¡Y VOS COMO MI MADRINA DEBERÍAS HABERME CUIDADO COMO SI FUERA OTRO HIJO TUYO! Ese era tu deber y fallaste... quiero que te vayas.

─Dylan, cariño...

─¡QUE TE VAYAS! No quiero volver a verte.─ Ella no dijo nada, salió de la habitación y se fue junto a mi primo.

Me levanté de mi cama y caminé hasta el baño, me miré en el espejo por algunos segundos antes de romperlo con mi puño, éste comenzó a sangrar. Salí del baño y agarré una de mis mochilas, puse ropa en ella y salí de mi habitación.

Louis: Estaba en el comedor junto a Niall, Zayn, Liam y Harry. No podía parar de pensar en la noche anterior. Dylan se había vuelto algo pesado pero no quería que le pase nada malo.

─¿Y qué van a hacer en las vacaciones de invierno?─ Preguntó Niall antes de comer una papa pringles.

─Volver a casa y pasar tiempo con mi hermanita.─ Respondió Liam.

─Yo voy a volver a Dubai, necesito saber cómo está papá y las cosas allá.

─Louis y yo vamos a ir a Roma y luego a Paris.─ Dijo Harry y yo lo miré de inmediato.

─¿Me llevan? Yo sinceramente no tengo planes y no quiero regresar a Irlanda así que...

─Claro, podrías venir con nosotros.─ Le dije y él sonrió.

─O ir conmigo a mi casa a conocer a mi hermanita.─ Habló Liam.

─Ay sí, siempre quise conocer la mansión de un mafioso.

─O podrías ir conmigo a Dubai. Te voy a dejar conducir mi lambor...

─¡Zayn gana!─ Dijo Niall haciendonos reír a todos. ─¿Voy a dormir con vos en tu habitación o me van a dar mis propios aposentos?

─Puedo mandar a arreglar una habitación para vos. Sería raro dormir juntos.

─Quizás debería ir con ustedes a Dubai.─ Dijo Liam.

─Celos entrando al chat.─ Habló Harry. ─Bueno chicos, Louis y yo tenemos que irnos pero los veo más tarde. ¿Si vuelve la luz jugamos videojuegos? Sí, okay. Nos vemos, vamos Lou.─ Eso había sido muy raro por parte de Harry, se lo notaba nervioso, apurado. No entendía que le pasaba.

─¿Cuál es la prisa, Harry?

─Hay que ir a la biblioteca, ahora.

Yo sonreí y me detuve. ─¿Me vas a decir lo que te pasa?

─En la biblioteca, vamos.─ Yo negué con la cabeza sin borrar mi sonrisa y comencé a caminar detrás de él.

Llegamos a la biblioteca, no había nadie, estaba completamente vacía y no había demasiada luz.

─¿Por qué estamos aquí, Harry?

─No digas nada y sólo sigueme.─ Y eso hice, lo seguí hasta el fondo de la biblioteca. Todo me parecía muy extraño. Él se giró a verme.

─¿Podés estar sin tus muletas?─ Me preguntó y yo lo miré confundido.

─Uhm... Sí, creo que sí. ¿Por qué?─ Él solo se acercó hasta mi quitandomelas y dejándolas a un lado.

─Cada vez que estoy cerca tuyo mi corazón se acelera demasiado, mis manos empiezan a temblar y me pierdo en tus hermosos ojos... nunca me había sentido así antes.─ Él se acercó más y apoyó su frente en la mía.

─Harry, qué...

─No soy gay, pero admito que desde el primer día que te vi me hiciste dudar de mi sexualidad.─ Habló tan cerca de mis labios.

─Quién lo diría, al hijo del empresario más rico del mundo y de una marquesa le gustan los chicos.─ Puse mis manos en su cintura y lo acerqué hasta que chocaron nuestras caderas.

─No me gustan los chicos, sólo me gustas vos.─ Y ahí estaba nuestro primer beso en la enorme biblioteca de aquel colegio. Había estado esperando este momento por largas horas y al fin estaba pasando.

BOYS SCHOOL [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora