Un Matrimonio De Mentirás

31 *Aura*

Han pasado varios días desde mi aventura con el desconocido y no puedo dejar de pensar en esa noche. Por más que trate de hacer como si nada hubiera pasado me fue completamente imposible ya que cada vez que me acostaba a dormir soñaba con esa noche y en todo lo que me hizo sentir ese hombre, fue algo completamente diferente ya que en ningún momento me trato con delicadeza pero tampoco me maltrato y eso es algo nuevo ya que yo nada más había estado con Derek y el siempre fue muy cuidadoso conmigo.

Decido que ya es momento de salir de este encierro y me arreglo mientras le envío un mensaje a Alba ya que la extraño mucho y es la única persona que me puede ayudar con esta situación asi que le escribo para que nos reunamos lo más pronto posible s su respuesta no tarda mucho tiempo en llegar.

Estoy en tu casa en 2 días.

Luego de ver su mensaje quedó más tranquila y me acuesto un rato a dormir.

"-Eres muy gracioso _ digo riendo y tocando su pecho.

-Gracioso no es lo único que soy _ contesta con una sonrisa inclinándose un poco hacia donde estoy sentada.

-¿Así? ¿Que más eres? _ decido seguirle el juego un poco.

-Algo que descubrirás muy pronto _ dice para luego besarme"

Me despierto sobresaltada ya que los recuerdos no me dejan descansar tranquila. Me voy a bañar para quitarme el sueño que me queda encima.

-Pasaste una noche inolvidable y no sabes ni siquiera con quien _ me digo a mi misma en voz alta. Salgo de la dicha y me visto para ir a comer algo. Decido salir a comprar algo ya que no tengo ánimos de hacer nada. En todo este tiempo no puedo dejar de pensar en otra cosa que no sea esa noche por más que trate cuando caígo en cuenta de algo que había pasado y estaba ignorando.

-No he pensado en Derek en todo este tiempo _ susurro para mi misma perdiendo por completo el apetito.

En todos estos días he estado tan centrada en tratar de olvidar que me acosté con un extraño que no caí en cuenta que había engañado a Derek ya que por más que lo haya abandonado segué siendo mi esposo.

-La vida es una perra _ digo para luego reír sin importarme ni un poco lo que pueda llegar a pensar la gente a mi alrededor.

Eran momentos de tranquilidad que no sabía que muy pronto iba a estar extrañando