Capítulo 17

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Una vez que vio que el chico se quedó dormido, salió de aquella habitación de la misma manera en la que entro

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Una vez que vio que el chico se quedó dormido, salió de aquella habitación de la misma manera en la que entro. Sin que nadie más se diera cuenta.

Con una sonrisa en el rostro se dirigió a su casa, en busca de su madre para que esta le dijera de una vez por todas las cosas que debe de saber. Cruzo la puerta al inframundo como ya era de costumbre, ahora que nadie le vigilaba podía entrar y salir sin que nadie se lo impidiera.

Una vez cruzo se fue directamente a casa en donde sabia que su madre seguiría escondida en su habitación, desde la última vez que hablaron ella decidió no salir y quedarse escondida, como si de esa manera se pudiera proteger de todas las preguntas que Alice tenía para ella.

—Qué bueno que llega joven amo — le dijo uno de los sirvientes apenas entro a casa — su madre, la señora Amaryllis lo espera en la sala de descanso — termino por decirle una vez que paso de largo.

—Iré de inmediato — dijo mientras seguía su camino.

Alice no sabia que iba a decirle su madre en ese momento, solo esperaba que fueran cosas positivas o que al menos lo que le dijera fuera capaz de resolver las dudas que lo estaban atormentado en ese momento.

En ese momento aquel pasillo que antes le aprecia de lo más corto ahora le parecía de lo más largo, su camino se sentía demasiado largo. Sus pasos resonaban por el grande pasillo, sin nadie más que lo mirara, estaba solamente él.

—Ya estoy aquí — dijo apenas entro en aquella gran sala.

—No esperaba que llegaras tan pronto — comento la mujer aún sin verlo a la cara, aunque sabia que el chico estaba detrás de ella.

—Yo planeaba venir — dijo mientras caminaba hasta sentarse en aquel gran sillón en frente de ella.

—Tengo algo importante que decirte — dijo la mujer mientras se llevaba la taza de té caliente a sus labio y tomaba de ella lentamente.

—¿Qué es? — las palabras que salían de la boca de Alice eran más que secas, no tenía intención que salieran de esa manera, pero no podía evitarlo, quería saber la verdad, pero no podía hablar de manera más suave y calmada.

—Te lo contare todo, pero por favor, tenme paciencia y entiende mis palabras — la peli-rosa mayor estaba más que nerviosa no sabia como iba a reaccionar su hijo ante tales cosas que tenia que contarle, solo esperaba que la perdonara por todas las cosas que le oculto durante mucho tiempo.

—No lo hare, pero quiero que me digas toda la verdad — su mirada no mentía, ella lo sabía perfectamente.

Tal vez ella no era le mejor madre que puede haber en el inframundo, pero hizo todo lo mejor que pudo para lograr que su hijo tuviera una mejor vida y que nada le faltara, además de lograr que su hijo fuera el mejor en todo lo que él se propusiera.

La mente de Alice en aquel momento se estaba llenado de un montón de ideas, de cosas que no sabía ni que podía imaginar, para empezar, quería saber cómo es que su madre sabe que estar con un humano es peligroso, hasta ahora a él no le pasa nada, él se encontraba en un mejor estado posible, además de que su relación con Iruma estaba más que mejor, comenzaba a aceptarlo en su vida, aunque algunas veces se metía a su casa como ese día, pero no le importaba si con ello podía estar a su lado y pasar más tiempo con él.

—Yo sabia desde hace mucho tiempo que tu pareja era un humano — comenzó a decir la peli-rosa.

Alice por su parte se quedó sin habla a escuchar aquello, ya que según ella tiempo atrás le había dicho que aquello era imposible, que no había ninguna manera de que él fuera emparejado con un simple humano.

Quien hubiera pensado que la mujer que tenía en frente de él le había mentido en la cara durante mucho tiempo, pero ahora que lo pensaba no lo veía tonto o extraño, ya que siempre supo que había algo mal con las cosas que su mamá le decía.

—Ya lo sabias — dijo — ¿Por qué nunca me lo dijiste? ¿Por qué me mentiste todo este tiempo? — quería respuestas y las quería ya mismo, durante tanto tiempo tenia muchas dudas y hoy era el día en el cual su mamá podría responder a cada una de ellas.

—No sabía cómo decírtelo — respondió mientras jugaba con sus manos.

—¡¡No sabias!! — exclamo,  Alice ya no sabia que pensar, su cabeza daba vueltas.

—No quería hacerte daño, por ello guarde silencio todo este tiempo — Alice solo podía mirar sin decir nada, era como si su cuerpo en ese momento no reaccionara a nada de lo que estaba pasando.

—Lo entiendo, pero aún así tenia derecho a saber todo eso — respondió, llevo una de sus manos a la frente, acariciando con dos de sus dedos pues tantas cosas en la mente le estaban dando un poco de dolor de cabeza.

—Sé que debía decírtelo, pero no sabía cómo — respondió la mujer en frete de él.

—Puedes decirme toda la verdad en este momento, ¿No es así? — la mujer simplemente asintió.

—Puedes traer los papeles — hablo a su sirviente quien solo asintió y se retiro del lugar para minutos después regresar con unos cuantos documentos y libros viejos — aquí esta todo lo que debes de saber —  Alice tomo uno de los tantos documentos que estaban sueltos en la mesa, Amaryllis mirando a su hijo dijo — yo también tuve una pareja humana — dijo la mujer, haciendo que el más joven soltara aquel papel y viera a su madre más que asombrado. 

En cada reencuentro, la emoción se hace presente, y mi corazón late fuerte, no lo siento ausente porque siempre estas presente

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En cada reencuentro, la emoción se hace presente, y mi corazón late fuerte, no lo siento ausente porque siempre estas presente.

En cada reencuentro, la emoción se hace presente, y mi corazón late fuerte, no lo siento ausente porque siempre estas presente

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Lo Que Oculta La Noche | IruAzz || EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora