Las cosas en el inframundo no estaban funcionando como era debido, las constantes peleas por el poder estaban en un punto clave en donde varias criaturas morían día a día, bestias mágicas, demonios de alto rango, así como también los de bajo rango eran los más afectados.Por todo el lugar se había regado información acerca del hijo del anterior rey demonio, algunos demonios estaban contentos con la información, ya que había alguien de la realeza que podía protegerlos y cuidarles como el anterior, pero también había demonios que se encontraban en contra del nuevo sucesor, ya que para ellos era solo un forastero queriendo obtener un lugar que perdió hace mucho tiempo.
Ninguno tenía en claro cómo es que el rey demonio anterior logró concebir un hijo, mucho menos un hijo que era mitad demonio y mitad humano, algo como eso era muy raro de ver, además de que no era común, aquellos que nacían con una parte humana solían morir en cuanto nacían, por lo cual esa hazaña era en definitiva raro.
—No deben de dejar que ese humano venga a nuestro mundo — hablaba uno de los demonios que funcionaban dentro del inframundo como parte de las 13 coronas.
Esas 13 coronas que servían al rey, sin embargo, en ese momento se encontraban en una gran disputa por quien debería de tomar el control del inframundo y quien era el más adecuado para ello.
Baal desde un rincón, únicamente se dedicaba a ver cómo los 13 demonios más importantes del inframundo se metían en una disputa que sabían nadie ganaría.
—Uno de nosotros debería de ser el nuevo rey demonio — uno de los 13 había dicho.
Aquellas palabras lograron llamar su atención, en algo estaba de acuerdo, uno de ellos era más adecuado para el puesto de rey en vez de una simple humano, además que eso podría servir para el plan que tenía en mente, pues ya habían pasado muchos años de ausencia de un rey por lo cual era el momento perfecto para realizar un verdadero cambio en el lugar, un cambio que volviera a todos los demonios a sucumbir a sus orígenes, que volvieran a su naturaleza habitual y que los demás le temieran a ellos, que ya era hora que dejaran de esconderse y para ello, lo primero que tenían que hacer era deshacerse del actual hijo del rey demonio.
—¿Y quién sería el adecuado para tomar el lugar del rey? — uno de ellos preguntó, enseguida, los demás demonios guardaron silencio pensando en quienes de ellos 13 era el mejor candidato.
—Yo propongo a Baal, él sería un gran líder para nosotros.
—No creemos que sea una buena opción — otro de ellos respondió de manera rápida.
—¿Por qué no? — contestaron — Baal puede volver el inframundo un lugar habitable para nosotros los demonios, podemos volver a estar en paz con todos.
Aquellas palabras no podían estar más que alejadas de la realidad, pues los planes del contrario eran muy distintos a lo que pensaban todos en ese momento.
—Nuestra mejor opción es Sullivan, él podría llevar al inframundo a su gloria nuevamente — aquellas palabras no hicieron más que molestar a Baal.
—Sullivan fue quien nos metió en este problema — Baal habló finalmente — Sullivan fue quien ayudó al rey anterior a escapar al mundo humano, es culpa de Sullivan que el antiguo rey este muerto — termino de decir, mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa de superioridad.
—No podemos asegurar eso de la nada — le respondieron — no sin antes tener pruebas de lo que nos estas diciendo.
—¿Qué más pruebas quieres? — pregunto de manera burlona — ¿Acaso vez a Sullivan aquí con nosotros? Les aseguro que en este momento se encuentra en el mundo humano con aquel niño que dicen ser el hijo del antiguo rey.
Los murmullos no se hicieron esperar en aquella enorme sala, algunos de los 13 estaban de acuerdo con Baal, mientras que otros querían seguir aferrándose a la idea que Sullivan no seria capaz de realizar tales actos, de haberlo hecho querían creer que tenía una razón para hacerlo e irse del inframundo.
—Aun así, Sullivan sería uno de los mejores candidatos en vez de Baal.
Aquellas simples palabras hicieron que el contrario se enojara más de la cuenta, se preguntaba cómo era posible que un ser inferior a él se atreviera a menospreciarlo de esa manera.
—Puede ser que Sullivan sea la mejor opción — habló otro al notar que la situación no avanzaba — pero no sabemos de él desde hace un par de semanas, no sabemos si esta bien o si algo le sucedió — los demás presentes solo asentían a esas palabras — tenemos que pensar en el inframundo, en esos momentos se tiene una caos que no podemos dejar pasar.
—¿Qué sugieres?
—De momento dejaremos de lado el sucesor del rey, tenemos que enfocarnos en encontrar a Sullivan para que nos aclare toda esta situación.
Unas carcajadas se hicieron sonar en el lugar, Baal no creía en todas las estupideces que aquellos demonios estaban diciendo y planeaban, como si él fuera a permitir que se reencontraran con Sullivan y arruinarán los planes que tenía en ese momento.
Colocándose de pie, caminó por el largo pasillo bajo la atenta mirada de todos los demás y salió de la sala, en su rostro se podía notar el enojo que en esos momentos le embargaba, para Baal aquella situación era desagradable, si quería que las cosas salieron como a él le gustaba, tendría que hacerlo él mismo.
Se daría a la tarea de buscar al dichoso humano que se quiere subir a la corona y deshacerse de él lo más pronto posible, así tendría a los demás a su favor, lo que le llevaría a hacer del inframundo el lugar que tanto deseaba, al llegar a su residencia, se encontró con Kirio uno de sus subordinados y a quien le daría la importante tarea de buscar al humano y traerlo a él.
—Tienes trabajo que hacer Kirio y espero no me decepciones — con un asentimiento Kirio salió del lugar.
Baal solo esbozo una sonrisa.
En pupilas que hablan sin decir palabras, se esconden los anhelos, las dudas guardadas. Miradas que chocan, se buscan, se alejan, musas del misterio que enredan y festejan.
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Lo Que Oculta La Noche | IruAzz || EDITANDO
FanfictionIruma tenia una vida tranquila y relajada hasta que aquella noche lo escucho por primera vez. Iruma no tenía ni idea que aquel ser convertiría su vida en una montaña rusa de emociones. -¿Estas seguro de ello? - una voz le preguntó. -Sólo es mi imagi...