—Alguna persona cercana a ti, ¿Paso por lo mismo?
Un par de lágrimas comenzó a deslizarse por las pálidas mejillas de YoonGi, quién sentía una fuerte presión en su pecho.
—Sí... —contesto, limpiando rápidamente las lágrimas sobre su rostro —Una persona muy cercana a mí.
—¿Fue tu prometido de él que nos contaste en la primera reunión que tuvimos? —indago, sintiéndose un poco menos triste.
—Así es fue él, pero yo tuve no solo el gran infortunio de ver por perdidos los recuerdos en su memoria, de su familia, de sus amigos, de mí y de nosotros sino que también lo perdí a él ese mismo día.
—No entiendo bien, ¿a qué te refieres? —intento entender.
—Sí... —clamo con desgano y soltando un fuerte suspiro de tristeza —Es una historia muy larga de contar.
—Bueno pues... Este parque es demasiado grande para recorrerlo o mirarlo en un solo rato, creo que tenemos el tiempo suficiente para que tú me puedas contar todo lo que te pasó antes, si es que así lo quieres sino por mí parte no hay problema —mencionó, poniéndose lentamente de pie y parándose frente al pelirubio —Perdón si es que estoy siendo demasiado entrometido.
Liberando un suspiro suavemente, se puso de pie haciéndole frente al pelinegro frente a él, mirando el maravilloso iris brillante de sus ojos, controlándose internamente por no besar aquellos labios que hacía años no besaba, por no rodear fuertemente entre sus brazos aquél cuerpo ni tan delgado ni tan fuerte que se amoldaba perfectamente entre los suyos, por no acariciar sus mejillas tiernamente, por no confesarle toda la verdad de una sola vez.
—¿Estás seguro que quieres escuchar mi historia? —preguntó, rogando al cielo que esté aceptará y que sus palabras se quedarán en su mente durante toda la noche y comenzará a unir hilos de todo lo que estaba pasando a su alrededor, de que se diera cuenta de una vez y por el mismo quién era, y quién era el hombre frente a él.
Con una asentimiento y una sonrisa sobre su rostro fino, se sujeto del antebrazo del pelirubio y susurro más cerca de lo que debiera —Estoy seguro.
Los segundos, los minutos, las horas pasaron y pasaron en aquél parque que fue recorrido varias y varias veces esa mañana, incluyendo tarde y noche por esos dos chicos de casi la misma edad, disfrutando de la compañía del uno del otro sin decírselos mutuamente, sin notar además que desde lejos un par de chicos los observaban sonrientes.
—No creí posible qué un amor como el que se tienen YoonGi y Jin existiera, que aún y a pesar de haberse mantenido lejos el uno del otro por varios años debido al rencor y maldad de una persona, siguiera vivo dentro de ellos, pero ahora veo y me doy cuenta de lo equivocado que estuve.
—Así es YoonGi, siempre se negó a creer que Jin estaba muerto, por eso lo busco y lo busco, contratando detective privado tras detective privado y si uno no llegaba a encontrar respuesta alguna de su paradero contrataba a otro que si le diera respuestas y así fue por estos años pero nunca absolutamente nunca se dio por vencido, incluso cuando sus padres o yo nos queríamos rendir en los momentos más difíciles, él nos decía porqué no teníamos que hacerlo, porqué debíamos encontrarlo.
—Pues lo logro, lo encontró —murmuro, sonriendo dulcemente pues aunque le dolía debía admitir que le gustaba ver a Jin feliz. No es que no fuera feliz con él pero simplemente cuando estaba ahora junto YoonGi, su mirada y su sonrisa brillaba aún más.
—¿No te duele? ¿No te entristece lo que está pasando?
—No me duele, no me entristece porque sé que él está feliz, que él va a ser feliz, que YoonGi se va a encargar de hacerlo muy feliz.
La sonrisa en el rostro de TaeHyung, se hizo un poco más grande de saber que su mejor amigo había estado en muy buenas manos durante los años que no estuvieron con él, pero sobretodo de saber que lo más importante para el pelinegro junto a él, era verlo feliz.
—¿Lo amas? —pregunto con suficiente interés, sintiendo como cada vez más el nudo en su garganta le hacía más difícil el pasar saliva.
—¿Por qué preguntas? ¿Es importante esa pregunta para ti? —indagó notando como las mejillas del pelinegro frente a él, se adornaban de un rojo intenso.
—Emm... es solo una simple pregunta —mintio, intentando calmar los latidos acelerados de su corazón.
—No es solo una simple pregunta —susurro acercándose poco a poco y lentamente a los labios de TaeHyung, los cuales estaban brillosos debido a la saliva que su lengua había dejado al pasarla nerviosamente por ellos, ansiosos por ser besados —Creo que la respuesta te interesa más de lo que quieres admitir —murmuro a solo unos milímetros de los labios ajenos en los cuales no podía quitar su vista.
—Ji-jin nos pue-puede ver —tartamudeo el pelinegro sintiendo la respiración de HoSeok sobre sus labios y esperando tanto que esté no se hiciera para atrás.
—Entonces... deberíamos irnos a un lugar más privado —canto, saboreando sus propias palabras, oyendo lo ruidosamente que pasaba la saliva del hermoso chico frente a él.
—Eso, eso no sería correcto —menciona apenas audible para ambos, mutilando débilmente sus labios.
Dando un último vistazo a YoonGi y Jin, HoSeok tomaba suavemente el antebrazo del pelinegro frente a él y lo jalaba lejos de aquel parque, llevándolo a una de las terrazas privadas de la empresa, aquellas que eran únicamente para comidas y reuniones privadas.
—¿Q-qué hacemos aquí? —preguntaba el menor, contemplando como el dueño de todo aquello tomaba asiento tranquilamente.
—Vamos a hablar... De nosotros... —completaba, centrando sus ojos en los del bello hombre parado frente al balcón, quién movía sus manos nerviosamente dentro de sus bolsillos.
—¿Nosotros?
—Sí, nosotros —respondía levantándose suavemente de donde yacía sentado, percatándose de cómo los ojos el menor huían de los suyos —Te gustó, ¿no? —abordo sin cuidado.
—Y-yo, n-no...
—No te atrevas a negarlo, he visto como me miras y hace tan sólo un momento casi nos desvanecemos en un beso que ni siquiera nos dimos.
—No te creas tan importante —bufaba recuperando su compostura, acercándose un poco hasta él contrario.
—Bien, entonces no te importará que haga esto —cantaba HoSeok, tomando por el brazo a TaeHyung, acercándolo lo más que podía hasta él, sujetando entre sus manos su rostro, uniendo sus labios en un beso que les robaba hasta el último aliento, convirtiendo en un mentiroso a la razón y ego de TaeHyung.
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Love Again ꒱ Yoonjin
Fanfiction• 𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋𝐈𝐙𝐀𝐃𝐀 • • Continuación de Serendipia. Se recomienda leer la primera parte para comprender los sucesos aquí narrados. 💗 ꒰♡Sinopsis: Después de haber escuchado de alguien que le ocurrió una desafortunada tragedia, Yoongi empieza a bu...