Love Again ꒱ Yoonjin

19.

Advertencia: Este capítulo contiene lenguaje explícito+18. Si te incómoda, te invito a retirarte al siguiente capítulo.

La manera en que las manos de HoSeok rodean la pequeña cadera de TaeHyung, es tan gentil que el mismo pelinegro se siente desfallecer; disfrutando totalmente de la sensación de comodidad que había entre ellos dos al estar juntos.

Los cálidos besos y pequeñas mordidas depositados por parte de HoSeok, sobre el largo y perfumado cuello de TaeHyung, eran cada vez más frecuentes, llenos de cariño y afecto; un afecto que desde hacía tiempo les hacía falta a ambos.

—¿Eres feliz? —pregunta tranquilamente el mayor, acariciando gratamente la cintura entre sus manos.

—¿Por qué preguntas eso? —interroga el menor, centrando su mirada en los espectantes ojos café claro del bello chico frente a él.

—Simple curiosidad —responde, tomando entre sus manos las suaves mejillas de TaeHyung.

—¡Increíble! —clama —. Eres igual de curioso que yo —asegura con una espectacular sonrisa cuadrada sobre su fino y lindo rostro.

—¿En verdad?

—Si. He pensado que por eso nos llevamos tan bien.

—¿Cómo qué?

—No entiendo tu pregunta —duda, jugueteando a su vez con sus narices muy agradablemente.

—Antes de decirte, respóndeme algo.

—¿Qué cosa?

—Somos socios, ¿no?

—Ajá —asiente.

—Pero también somos amigos, ¿correcto?

—Así es.

—Y luego de eso, ¿qué somos?

De pronto, todo en la mente de TaeHyung queda rápidamente en blanco, volviéndose tan pensativo y silencioso su alrededor.

—Porque déjame decirte, que el término amantes no me agrada en lo absoluto —agrega fiel pero sobre todo sincero Hobi.

—Tampoco a mí —añade el pelinegro —. No me agrada la idea de que le estoy siendo infiel a mi amistad de años con Jinnie y más con una persona tan importante como lo eres tú para él, para su vida.

—En todo caso de que fuera así, que no lo es —susurra tierno —. Yo sería quién provocó todo esto. Desde que te ví quedé fascinado contigo —cuenta sin pena alguna, haciendo sonrojar y reír al hombre de expresión seria que había conocido hace tan poco.

—No digas mentiras, te crecerá la nariz como a pinocho —se mofa descaradamente Kim.

—Permíteme aclararte que yo, nunca pero nunca, he dicho una mentira de tal magnitud.