La sombra del deseo

+Epilogo+

Axel

(Un mes después)

Las semanas parecían eternas desde ese día, los días se sentían más largos. Era la primera ves en años que me sentía solo, claro que Adán estaba con migo, pero al encerrarme en mi fría y oscura habitación, la tristeza e impotencia me invadía.

—No pude hacer nada—Susurré para mi.

Ellos que tanto cuidaron de mi y me protegieron para que yo no sufriera, él estaba conmigo cada que tenía un problema.

Me ocultaron muchas cosas y si eso me molestó,pero después comprendí el porqué y se los agradecí.

Mientras estaba encerrado y me ponían a luchar, me torturaban, comprendí todo y la imaginé de mi papá se derrumbó en mi, ellos siempre fueron los que se preocuparon por mi, ellos siempre fueron mejor que mi padre, eran mis protectores.

El día que me entere de todo no lo pude creer pero cada cosa qué pasó, me lo confirmo, y ahora me arrepiento de haberlos cuestionado.

Hoy se cumple un mes de su partida, me encuentro en la vieja casa, en su habitación sentado en el piso mientras con la mirada repaso cada lugar, y los recuerdos me atracan.

Todas esas beses que jugábamos, e inventábamos historias y peleábamos con los monstruos;cuando de pequeño yo tenía pesadillas y corría con él por el miedo, él me miraba con ternura y dejaba que me quedara con él, o aquella vez que le hicimos una broma a Adán, por qué no compro el pastel que queríamos y todos terminamos llenos de harina y huevos, y papá molesto por el desastre que hicimos, y esas beses que yo preguntaba por mamá y tenía que inventar historias para que yo dejara de llorar, ambos crecieron demasiado rápido.

Vivimos tantas cosas que ahora duelen..

Solo son recuerdos que se quedan en ese fragmento de mi vida...

Y ahora no puedo decirle —Gracias Hermano—Las grimas caen en la alfombra de su habitación.

Inmensas ganas de salir corriendo y gritar me inundan, pero no puedo hacerlo, nadie tiene que saber que estoy aquí.

Hundo mi cabeza en mis rodillas, dejando que el silencio se apodere de todo.

Pasos se escuchan por las escaleras de la casa y mi sistema entra en miedo pero lo reprimo, ya no puedo ser el mis no Axel miedoso y a la espera de que sus hermanos lo salven.

Cada ves se escuchan pasos mas acerca, con mucha delicadeza de no hacer ruido y alertar a la persona o personas, camino y me escondo debajo de la cama.

Por el pequeño espacio que tengo para ver, cuando la manija de la puerta cruje y se habré con, delicadeza para no generar ruido.

Me quedo paralizado al verla, después que se asegura que todo el lugar está vacío se adentra en la habitación y en una mochila que lleva comienza a meter pertenencias de Aidan.

Tengo la mirada fija en cada movimiento que hace, parpadeo muchas veces hasta que la reconozco, mi madre.

—Ella esta muerta—me recuerda mi mente, por lo que sabía ella murió junto con Aidan, pero esta aquí, habrá mis ojos como platos intentando asimilar que esta aquí.