𝓷𝓲𝓷𝓮𝓽𝓮𝓮𝓷

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Los jadeos y quejidos era lo único que se escuchaba en esa oscura habitación

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Los jadeos y quejidos era lo único que se escuchaba en esa oscura habitación. Las tenues luces de unas contables velas era lo único que le daba iluminación a sus cuerpos semi-desnudos.

Él, sintiendo explotar, la acorralo contra una de las paredes y, haciendo a un lado su ropa interior, comenzó a penetrarla con sus dedos. El calor de sus paredes vaginales lo envolvió haciendo que se excite todavía más.

Pero aun así no podía quitar sus ojos de la chica frente a él, sus ojos llenos de placer, sus mejillas sonrojadas y sus labios hinchados y de un color rojizo. La amaba, no podía describir cuanto.

Momentos después el se encontraba dentro de ella, moviendo sus caderas con velocidad y fuerza, haciendola gritar con cada movimiento.

Susurraron un 'te amo' justo cuando ambos terminaron, ella se abrazo a su pecho para así poder descansar un poco.

— No quiero que sea mañana.

Aún dentro de ella la había llevado a la cama, donde se recostaron uno junto al otro.

Él comenzó a dibujar líneas invisibles con sus dedos sobre la desnuda espalda de la chica, recorriendo todo su cuerpo, particularmente frenando en su trasero donde daba más atención.

Suspiro pesadamente haciéndole saber que el tampoco quería que la noche terminará.

— ¿Prometes que me llamaras todas las noches?

La chica rió ante el diminuto puchero que puso su novio.

— Sólo si tengo saldo.

Jungkook frenó el movimiento de sus manos e hizo un gesto de falso enojo.

Su novia notó como tomaría aquel comportamiento bobo y actuado así que decidió abalanzarse sobre su pecho y atraparlo en sus brazos.

— Te quitaran el teléfono por lo mucho que te llamaré.

Jungkook la rodeo con brazos y piernas. El rubio cabello de la chica cayó sobre su rostro y él no pudo sentirse más bendecido.

—Te voy a extrañar...

Ambos habían hecho un trato cuando notaron que su relación podría acabar por falta de tiempo libre, y éste consistía en entender por completo al otro y no recriminarlo o molestarlo cuando esté se lo pida de antemano.

Lo más importante para ellos era la comunicación.

No sabían cuánto tiempo iban a dejar de verse tan seguido, así que decidieron aprovechar el tiempo.

Chaeyoung comenzaba a besar el torso del menor, Jungkook sonreía de manera satisfecha sabiendo que esa noche iba a ser buena para ambos.

Al siguiente día el espero su mensaje diario, al menos uno que le reportará que había estado ocupada, tal y como él. Pudo esperarse todo, menos una llamada de su novia llorando sin consuelo alguno. No entendía nada de lo que decia hasta que Taehyung le informo que ambas, tanto ella como Jisoo, necesitaban hablar con ellos de manera urgente.

pretty woman •vsoo• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora