parte 57

59 1 0
                                    

Una Grandiosa Pesadilla

Something- The Beatles

Something in the way she moves attracts me like no other lover something in the way she woos me I don't want to leave her now you know I believe and how. Somewhere in her smile she knows that I don't need no other lover something in her style that shows me. I Don't Want to Leave her Now, you know I believe and how.

Scarlett-.

Llegué a casa con cara de pocos amigos esperanzada a no encontrarme con nadie. Imaginándome una tarde tranquila en compañía de mi teclado y mi cama. Subí las escaleras y al entrar a mi cuarto me encontré con un lirio blanco enorme, demasiado hermoso como para no notarlo. Pensé en Logan inmediatamente, pero al tomar la nota y leer lo que decía, supe que no era de él.

"I Miss You" -Johnny C. C.

Sentí que las mejillas se me enrojecían. ¿Acaso Johnny hablaba enserio? ¿Cómo demonios envió un lirio hasta acá? Seguro mi hermano le ayudó, pero... ¿por qué? ¿Enserio veía más en mí que solo un amor de verano? Sonreí un tanto incómoda y lo llevé conmigo a la cocina. Olía demasiado bien como para dejar que se calentara en mi habitación.

Entré con los ojos cerrados a la cocina, con una sonrisa en el rostro mientras yo acariciaba levemente uno de los pétalos.

-Jamás pensé que volvería a ver esa mirada risueña en tu rostro -murmuró Day. Al verla sonreí ampliamente, ella entraba a la cocina como si fuera dueña de la casa, era su costumbre. Esa y amanecer dormida en mi cama sin pedir permiso siquiera de entrar.

- Inquilina -dije con media sonrisa. Ella se puso de pie y me abrazó fuertemente- te extrañé...

- Lo sé, siempre hablamos cuando alguna de las dos está en problemas -murmuró.

- Claro y supongo que ahora soy yo la del problema, ¿no? -murmuré bajito.

- ¿Qué es todo eso que estás haciendo mujer? -preguntó interesada- Te noto distante, confundida, perdida y además, triste. Yo no te conocí así -murmuró- has cambiado.

- Lo sé -dije enojada- mi vida se enreda en un mundo de hombres...

- ¡Válgame Dios, la chica más codiciada de Londres ha hablado! -dijo con sarcasmo y yo reí.

- Espera, soy la chica más codiciada de Londres y Nueva York -dije mostrando mi lirio.

- ¿Un americano?

- No solo un americano, un americano mayor que yo como por cuatro o cinco años, amigo de mi hermano y extremadamente caballeroso y amable -dije y ella se me quedó viendo sospechosa.

- ¿Conoces algo llamado modestia? -preguntó y yo reí.

- Sí, pero no la practico muy a menudo. ¿Cómo está eso de que estás saliendo con Harry? -pregunté interesada mientras cambiaba el tema drásticamente. Ella se dio cuenta pero como hablábamos ahora del amor de su vida no se quejó ni nada.

- Hem... -dijo un tanto sonrojada. Sus ojos eran marrones y su cabello larguísimo y negro.

Adoraba la forma en que sonreía cuando estaba nerviosa. Siempre trataba de ocultarlo pasando una mano cerca de sus labios, pero la conocía desde hacía un tiempo. Así que conocía sus manías. Era mucho más pequeña que yo de tamaño, pero era tan protectora y tan fiera como un león.

-No lo sé, repentinamente llegó a mi lado, me invitó un café... comenzamos a platicar y una cosa nos llevó a la otra. Le dije que yo no soy como cualquier chica que convence con solo un café y él se la pasó cantándome y enviándome rosas todos los días.

karmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora