𝑻𝑰𝑻𝑨𝑵𝑰𝑪 | 𝒀𝑴

𝘿𝙄𝙀𝘾𝙄𝙉𝙐𝙀𝙑𝙀 𝙋𝙏. 2

Entre tanto bullicio el capitán solo podía escuchar un alto pitido en su oreja. Ni se había dado cuenta del momento en que terminó en frente de los barcos de emergencia para "supervisar" la labor de los marineros y para calmar a los pasajeros de la primera clase... Se suponía que debía de mantenerlos calmados.

— Los botes ya están listos señor. — ¿Quién le estaba hablando? Creía saber su nombre pero ya no era seguro ¿Cuál era su nombre? Berice, Buck, ¿Boris? — ¿No cree que sería mejor subir a los niños y a las mujeres a los botes? — Botes... ¿Qué botes? Estaban en un bote, sí. Había niños y mujeres en el bote, también. Entonces ¿De qué botes habla? Como sea, debía de dar una respuesta.

— Sí, — Se me pusieron las orejas calientes. — Mujeres y niños primero. Sí. — El marinero no se veía convencido pero era la respuesta que estaba buscando así que no prestó atención al estado tan moribundo de su capitán. ¿Habré dejado la tetera prendida?

— Muy bien. Todos acérquense a mí. Eso es. Gracias. Por el momento solo necesito mujeres y niños. Señores quédense donde están. Mujeres y niños nada más. — Así como se dijo, así se hizo. Con total calma pues "todo estaba bien". Tanto así que los músicos que tanto habían ambientado cada cena con su música desde que ese barco zarpó salieron a tocar.

— Muy bien chicos como dijo el capitán: Algo tranquilo para que no haya pánico. — Si tan solo supieran que ahora su capitán estaba tan inundado por el pánico que se estaba cuestionando si era mejor un té de rosas o de hierbas chinas. — Baile de bodas. — Tocando con una sincronización digna de ellos. Uno que otro niño que los escuchó y aún no había pasado a un bote bailó, a su manera, sintiéndose seguro por alguna razón.

Un ambiente relajante que denotaba una vida segura para muchos ahí. Todos sin escuchar ni un poco del bullicio que había abajo. Ni al hombre que repartía salvavidas que solo deseaba salir de ahí. Ni a las mujeres y a los niños que estaban confundidos. Ni a los que realmente sabían que todo se inundaría y ellos probablemente morirían en el olvido... Pero no sin luchar.

— Señoras y señores no hay razón para tener pánico. Todos ustedes pasarán cuando la primera clase haya acabado de abordar los botes de emergencia. — Ese bajo e inocente caballero no sabía lo que le esperaba. Nada como una buena multitud con deseos de sobrevivir para sobrellevar la noche de tu, muy posible, muerte. No todos estaban alterados, las mujeres con hijos no se lo podían permitir. Ellas debían de estar preparadas y sobre todo calmadas para no alterar a sus hijos que ya se veían algo estresados y muy confundidos por la situación.

No era un proceso fácil para nadie. Ni mucho menos, hasta los propios marineros tenían dificultades para poner un solo barco sobre el agua. No hubo mucha sincronización y el barco casi cae de golpe. No era mucha altura pero la alta clase era algo dramática.

Si se pudo bajar el bote. Si se pudo lanzar la señal de que ya iba un bote de los cuatro o cinco que quedaban. Ni el marinero a cargo estaba particularmente pendiente de la cantidad de barcos, solo sabía que eran pocos en comparación a la cantidad de pasajeros.

Estaba comenzando a inclinarse. Así como KyungSoo en la comodidad de su silla. Jugando con las balas de su pistola, esperando el momento dado para irse y asegurar que nadie oiría a YoonGi gritar por ayuda.

— Oye no creo que este barco se pueda hundir. — Guardó las balas y se levantó pensando en lo mucho que disfrutaría lo siguiente. — Me pidieron que te diera esta pequeña muestra de nuestro aprecio. — El aire de YoonGi salió de donde estaba y KyungSoo quitó su puño del estómago de YoonGi. — Saludos de la señorita Kim Dahyun. — Y se fue satisfecho.

Jimin podía subir junto a Dahyun. Una excusa barata sobre el estatus y subiría. Podría estar en el mismo bote que Vante que subió sin darse cuenta al ayudar a todas las damas que pudo. No es como si lo fuera a hacer. Su mamá estaría a salvo así que todo estaba bien. Era injusto subirse a ese bote y pasar por encima de la pareja que lloraba a su lado por tener que separarse.

— ¿Ocuparan los botes de acuerdo a la clase? — La señora Park no estaba hablando en serio. Jimin esperaba que así fuera. — Espero que no vayamos llenos. — El colmo de los colmos.

— Madre... — Susurró y su tono subió a la vez que su indignación y su irá. — ¡Cállate! — La tomó del abrigo y la fulminó con la mirada. Ella ni se había puesto el salvavidas. Tan inconsciente pensó. — ¿No lo entiendes? El agua está helada y no hay suficientes botes, ni para la mitad. La mitad de las personas a bordo morirán. — Y se dió cuenta.

— No la mejor mitad. — Dahyun estaba hablando muy en serio. Los estúpidos suelen decir cosas así y hablar en serio al mismo tiempo.

Mitad del bote moriría y él estaba por abandonar a la persona que mejor lo hizo sentir en tan poco tiempo. ¿De verdad iba a sacrificar todo por una señora que pedía que no la pusieran con la clase baja y por otra mujer que no es mejor que su madre? Él no debería de estar ahí, debería estar con Min YoonGi.

— Lastima, debí guardar ese dibujo. Valdrá mucho más mañana. — Se subió al bote confiada de que Jimin la seguiría, solo porque su mamá estaba a su lado, solo por eso él se quedaría a su lado.

— Eres una maldita sin corazón. — Siseó.

— Ven Jimin, hay espacio para ti. — ¿Qué hacía él ahí? — Vamos lindo ¿qué pasa? — Todos a su alrededor le decían que subiera. Todo estaba claro para él.

— ¿Qué dices madre? — Una gran sonrisa se formó. — Yo soy un caballero, no puedo montarme en el bote. — Y se fue. Aumentó la velocidad de sus pasos y un fuerte agarré lo detuvo.

— ¿A dónde vas? — Dahyun se había bajado del bote y lo había seguido. — ¿Qué, con él, para ser un cualquiera junto con ese imbécil?

— Prefiero ser eso que tu esposo. — Sus intenciones de irse no fueron tomadas de la mejor manera, Dahyun repetía que no se podía ir de su lado y lo sostenía con todas sus fuerzas. Parecía estar ganando la contienda, aprovecharse de los principios de Jimin que incluían no golpear a las mujeres era su mejor opción. Su mejor opción hasta que Jimin le escupió en toda la cara y aprovechó el momento para correr.

Dahyun no lo persiguió. La señora Park gritó su nombre sin cansarse aún cuando el bote ya estaba siendo bajado. YoonGi veía por la ventana pensando en cómo soltarse. Y Jimin corría en busca de él, sin saber a dónde ir pero con una leve idea gracias al recorrido del barco que le dieron días antes.

Estaba normal haciendo tarea y veo que vamos por las 341 leídas ¿me lo creo pues no? cuando dejé esta historia por el inicio a clases recuerdo que iba apenas por las 100 leídas y como 5 votos. Por eso y para demostrar mi emoción, decidí actualizar. Sigo sintiéndome muy emocionada porque para mí esto es llegar lejos y pensé que nunca llegaría. Mil gracias, de verdad 💛💛

Los amo 🤧🤧

En otros asuntos. A partir de aquí las cosas dejaran de ser 100% fieles a la película ¿preparados?