Eyes...❞ |Usamex.

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La vida no es fácil y jamás lo será, eso es algo que se ha dicho y que se ha demostrado desde siempre. Algunos mientras son pequeños pueden disfrutar de la protección que les brindan sus padres al alejarlos de esa triste realidad, cuidándolos de todo y haciendo lo que esté a su alcance para que su descubrimiento llegue lo más tarde posible. Otros no tan afortunados, desgraciadamente aprenden a temprana edad que el mundo en el que vivimos puede ser cruel y que las cosas nunca van a ser como nos gustaría, pero que tendremos que aprender a vivir con ello pues no habrá nada que podamos hacer.

De igual manera, disfrutamos de ponernos metas en nuestra vida diaria, objetivos que de verdad nos gustaría alcanzar y hacemos lo posible por conseguirlas, desgraciadamente siempre habrá variables que complicarán las cosas, así como también personas que se encargarán de recordarnos lo miserables que somos y que eso difícilmente cambiará.

Algo curioso es que muchas de ellas son cercanas a nosotros, aquellas personas que naturalmente tienen un lugar en nuestro corazón en muchas ocasiones son las mismas que se encargan de lastimarnos, ya sea con la intención o de manera incidental, pero siempre estarán ahí.

¿Por qué permitimos que hagan todo eso? ¿Por qué aquellos que más nos lastiman son a los que más queremos? ¿Qué tan masoquistas debemos ser como para permitirles tener un lugar importante en nuestra vida? ¿Por qué seguimos tratando de complacerlos?

Es un tanto complicado de explicar, mientras algunos luchan y dan todo por su aprobación, hay otros que solamente quieren alejarse lo más posible y juran ante cualquiera que no cometerán los mismos errores, pero para su mala suerte, siempre llevarán consigo una parte de aquellos a quienes tanto odian, sin importar qué tan pequeña o insignificante pueda ser.

Ahí está Rusia, el primero de sus hermanos y el que más orgullo le dio al hombre de la casa mientras fue pequeño. Ese niño estaba destinado a ser todo lo que la URSS no pudo, sin embargo, y a pesar de que heredó muchas de las características de su progenitor, las cosas cambiaron cuando se enamoró de un joven de su misma clase, decepcionando así a quien una vez de sintió orgulloso de él.

Luego está Kazajistán, el segundo hijo, aquel que al ver lo que desobedecer a su padre provocaba, decidió seguir sus pasos y convertirse casi en su réplica perfecta, siendo tan desagradable y poco empático como el mayor lo era, ganándose así la repulsión de muchos, pero al mismo tiempo el respeto de quien lo crió.

Bielorrusia vino después, convirtiéndose así en la tercera hija y la única mujer, algo que desde el principio le desfavoreció, pues su padre jamás le miró con mucha esperanza a pesar de ser probablemente la más fuerte mentalmente de sus hermanos. Aún así hizo de todo con el objetivo de orgullecer al mayor, y a los catorce años al darse cuenta de que todo aquello no valía la pena, cambió sus planes y terminó odiando a quien alguna vez admiró, decidiéndose a buscar un trabajo en su tiempo libre y a ahorrar el dinero suficiente junto a su hermano Ucrania para que al ser mayor de edad pudieran irse de esa casa y continuar con su vida sin el ambiente tan problemático que les rodeaba.

Ucrania fue el último, un chico al cual URSS ni siquiera intentó inculcarle algo, pues después de dos intentos fallidos, lo consideró inútil, aunque cabe destacar que para entonces el mayor ya no hacía nada más que beber y fumar. Gracias a eso y al ver lo que su padre podría hacerle si desobedecía, se volvió alguien bastante reservado y tímido a diferencia de los demás, siendo cercano únicamente con su hermana, aunque ni siquiera a ella le había revelado que sentía una especie de atracción por un chico de la misma clase de Rusia. Lástima que aquel a quién quería a penas y supiera de su existencia.

A pesar de eso, su objetivo principal era irse de ahí, quería estar lo más lejos que se pudiera de su progenitor al igual que de sus dos hermanos mayores, pues si bien estos habían sufrido y probablemente mucho más que él, como se mencionó antes, ambos habían heredado muchas de las características de su padre, las cuales no eran precisamente buenas.