𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 1

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El día se asomó dentro de la oscura noche que habitaba en el reino, los rayos del sol tocaban la suave y delicada piel blanca del Omega como caricias.

Seungmin abrió los ojos, adormilado, miro hacia la ventana para ver cómo la estrella dorada del día quitaba la oscuridad que cubría al reino en un manto frío. Sentía tranquilidad, pero no duró mucho ya que escuchó como alguien tocaba la puerta.

— Adelante — Se sentó en la cama viendo directo a la puerta que se abría lentamente.

— Perdón, te desperté? — Dijo su mano derecha Jisung, un Omega igual que el — Pensé que seguías dormido, tu madre dijo que te cambiará rápido para el desayuno... Creo que tienen algo que decir.

— No me despertaste, ya lo estaba desde hace como cinco minutos — Sonrió el pelo blanco mientras frotaba un poco sus ojos — Sabes de que se va a tratar esta vez?, Mi madre nunca desayuna tan temprano.

— No lo sé, solo me dijo que te cambiará, así que levántese joven amo — Ayudo al albino a darse un baño de burbujas con pétalos de rosa que le hacían bien en su piel — Venga por aquí joven amo — Lo ayudo a secarse y le puso un atuendo de telas finas, que tan solo con su tacto te daban una caricias suave e inolvidable, puso un poco de barra frutal en su cuello para que un aroma a flores desprendiera de el.

— No se porque me pones perfume Jisung — Dijo el joven albino mientras sonreía — Sabes que me gusta más mi escencia, huele a vainilla y es mejor que las flores.

— Lo siento joven amo, pero sabe que solo sigo las órdenes — Sonrió y cubrió el cuello de su amo ya que si un Omega que no es marcado lleva su cuello desnudo, está mal visto por la gente y es tomado como acto de rebeldía.

Una vez que Seungmin estuvo listo, bajo hasta el comedor donde yacían sus hermanos mayores, su padre y su madre.

— Al fin bajas mi pequeño lobito hermoso — Dijo Ha-neul, la madre del peli blanco, quien que se quedó quieto ante los abrazos y besos que le daba su madre.

— Sientate hijo, debemos hablar de un tema muy especial — Dijo su padre emocionado, nunca lo estaba, así que debía ser realmente importante.

El pequeño Omega se sentó a lado de sus hermanos haciéndoles una reverencia como siempre y sonrió.

— Bien... Seungmin, como sabrás, en dos días es tu cumpleaños número dieciocho, y sabes lo que significa — El padre miro a su hijo menor sonriéndole — Al cumplir tus dieciocho años llega al fin tu primer celo, por lo cual tu madre y yo decidimos que te casarás con Minho.

El pelinegro los miro con sorpresa, enojo, odio, angustia, ni el mismo sabía que sentir, habían tomado una decisión que se supone debía ser de el, Minho era el guerrero más fuerte de la familia Kim por lo cual sospechaba que el sería el elegido.

— ¡Me niego a casarme con ese patán! — El peli Blanco se levantó de su silla golpeando su mano en la mesa — no quiero casarme así, quiero encontrar a alguien que me ame realmente y yo amarlo a el igual, ustedes no son nadie para decidir mi futuro, ¡¡porque es mío!!

Su padre furioso copio el acto del menor y lo miro a los ojos — Te vas a casar porque soy el rey y el que manda aquí, eres un Omega que nunca podrá ser rey aquí, te casarás quieras o no — dijo su padre seguro de si mismo — Mañana mismo Minho viene por ti para llevarte a su casa así que ve empacando tus cosas.

El joven albino no pudo contener su llanto y salió corriendo rumbo a su habitación, su lugar seguro donde lloro por horas.

— Minnie... Puedo pasar? — Dijo Changbin, su hermano mayor, quien estaba detrás de la puerta.

🥀 𝒀𝒐 𝒔𝒐𝒚 𝒔𝒖 𝒂𝒍𝒇𝒂 𝒚 𝒆𝒍 𝒆𝒔 𝒎𝒊 𝒐𝒎𝒆𝒈𝒂 | 𝑪𝒉𝒂𝒏𝑴𝒊𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora