El Maestro De Mi Hijo - KookMin

Capítulo 49 - Miedo a la esperanza

-Y este es mi cualto y esta es mi cama. Mi papi me cambio mi cunita poique dice que soy una niña glande.

Gyeomie hablaba y hablaba sin parar, girándose de vez en cuando para ver a su padre, quién la miraba como si fuese a desaparecer. Gyeomie caminó con naturalidad hacia su tocador y abrió con dificultad una gaveta para sacar una pequeña caja de cartón con un moño. Luego la extendió hacia su padre diciendo:

-Son legalos. Yo los hice pala ti- Jungkook la miró y Gyeomie se subió a la cama para sentarse. Él tomó la silla que estaba en el tocador rosa del cuarto rosa, lleno de dibujos hechos con crayones de forma muy original, luego se sentó para abrir la caja. Había muchos dibujos y tarjetas de cada ocasión especial. Era una caja hermosa y valiosa, más valiosa que una colección de Leonardo Da Vinci, al menos para él. Jungkook sonrió, apretándola en sus manos, sonriendo cuando veía cada dibujo hecho con líneas imperfectamente hermosas.

-No puedo bidujal muy bien, pelo papi dice que son bidujos muy bonitos y hechos con amol- Jungkook sonrió y mirándola susurró

-Son hermosos gracias- Gyeomie sonrió y luego se bajó de su cama preguntando

-¿Vas a quedalte aquí?-

Jungkook vio la hora. Ya era casi media noche y aunque no estaba cansado, la pequeña que lo miraba como si él fuese una joya valiosa, debía descansar, y él tenía que buscar un hotel en donde establecerse. La alzó en sus brazos y dijo:

-Debes dormir. Yo prometo venir mañana- Le besó los cabellos y en ese momento Jimin se aclaró la garganta haciéndose notar. Había estado viéndolos desde hace rato y estaba más que seguro que Gyeomie le había robado el corazón a su papá

-Es muy tarde para buscar un hotel. La habitación del fondo del pasillo esta libre, puedes usarla si quieres. - Dijo caminando hacia adentro para sacar un pijama de Gyeomie del armario, mientras se moría de nervios. No sabía por qué le había ofrecido eso pero era mejor tenerlo cerca por si acaso tramaba algo, se mintió a sí mismo. Jungkook puso a Gyeomie y se giró hacia Jimin.

-Me gustaría hablar contigo.

Jimin tomó a su hija en brazos, después la puso en la cama y le quitó las medias mientras Gyeomie, obedientemente permaneció quieta, aunque observándolos atentamente a ambos. Ella quería un papi y un papá juntos, así como las tías Twins y sus padrinos.

Sin siquiera mirarlo, Jimin dijo:

-Ha sido un día largo y yo no estoy en condiciones para hablar contigo.

-Jimin...- Comenzó a decir Jungkook pero Jimin lo interrumpió

-Este no es el momento ni el lugar Jungkook- Le dolió llamarlo por su nombre pero estaba intentando ser lo más maduro posible. Él estaba aquí únicamente por su hijo, y ahora por su hija, nada más.

Jungkook asintió a sabiendas de que su hija los observaba y salió de la habitación para que así Jimin pudiera al fin cambiar a la niña a gusto.

Fuera de la habitación se encontraba Jungwon, recostado al lado de la puerta de la habitación que iba a ser de su padre.

Jungkook no se había olvidado de él, pero en todo el día casi no se había dejado ver, y la niña no le había dejado ningún momento a solas para buscarlo. Sabía que le esperaba una conversación muy importante con él. Pero más importante que esa conversación, era que su hijo estuviera dispuesto a aceptar los intentos de su padre para volver a acercársele.

- He oído a papi decirte que te quedaras.

- Sí. Me lo acaba de decir.

-¿Dónde están tus cosas?